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—entonces ¿tengo que seguir mis estudios?

—eso es correcto señorita (T/A)

—¿en realidad es necesario? Ya estoy en esta industria no creo necesa...

—es necesario—interrumpió su representante —la educación es algo indispensable 

—mmm Kyo ¿verdad?

—mi nombre, es correcto 

(T/N)  se inclinó para poder susurrarle —de representado a representante no quiero seguir con las clases son aburridas

—empezará la siguiente semana, sus clases serán de lunes a jueves horario de 7:30 a.m. a 12:00 p.m.; yo le indicaré el día que empiece a donde ir ¿de acuerdo?

chale, muy bien 

—bueno, nos vemos pronto— sacó un papel de su saco y se lo extendió a la presente —para que no olvide lo mencionado, que pase buen día 

—gracias, adiós kyo— cerré la puerta y me dirigí a la sala 

 —quién era?–preguntó Mikuo 

 —mi representante, dice que tengo que seguir estudiando, ¿también estudias?

—si, es irritante pero ya casi termino, tienes 17 ¿no?

—si 

—entonces ¿vas en...segundo o tercero de preparatoria?

—voy en segundo 

—un año más y ya acabaste— intentó dar ánimos —yo apenas voy a empezar mi último año al fin 

—te tengo envidia

en el tiempo que he estado aquí me he sentido muy cómoda, llevo como 1 mes ya viviendo aquí, lo único que cambiaría sería que Otomachi no nos despertara tan temprano a todos 

—si tenme envidia– puso un dedo en su frente dándole un empujón —ey ¿me ayudarías a pintarme las uñas?— preguntó mientras veía el esmalte desgastado en sus uñas 

–claro— 


º🔺º🔺º🔺º


—pasa— Mikuo se hizo a un lado y dejó pasar a (T/N)

—permiso— su habitación era ordenada, algo que de alguna manera no esperaba, tenía varias fotos con Miku en la pared y con amigos, eso creo

—tienes bastantes fotos

—me gusta tomar fotos 

—¿para tener un recuerdo?

—no, es porque siempre me veo genial en las fotos y opaco a los demás con mi belleza

—wow, ya me gustaría tener ese ego

 —todos...—Mikuo estaba rebuscando entre sus cosas sus esmaltes —creo que Miku los tiene o Kaito, bueno en un rato vengo, voy a preguntarle a Miku ¿me harías el favor de ir y preguntarle a Kaito?

—ok, ¿cuál es su habitación?

—la última al fondo—se dirigió a la habitación de Miku

camine hasta la habitación del fondo iba a tocar la puerta pero una voz me interrumpió —(T/N)—me giré a ver quien era —oh, Kaito, te estaba buscando 

—umm ¿para qué?

—pues Mikuo y yo nos vamos a pintar las uñas, de casualidad ¿no tienes sus esmaltes?

Kaito se quedó pensativo —creo que si deja los busco, ven pasa— abrió camino para que pasara

–con permiso 

Kaito estaba buscando entre sus cosas mientras (T/N) se sentó en la cama viendo toda la habitación —veo que te gustan los gatos 

 —s-si, me gustan bastante 

—¿alguna vez tuviste uno?

—si, de hecho en la casa de mis padres tengo 2 una se llama Shia y otra se llama Oki  

—yo siempre quise un gato pero nunca pude

—y ¿alguna vez tuviste una mascota?

—pues si pero no se si llamarlo mascota, donde vivía había un perro que venía a mi casa, lo llame tamal

ta- ¿qué?—el chico se sentó junto a ella confundido 

—jaja tamal, es una comida que se prepara de donde yo vengo 

—¿ta-tamare?

ta-mal— remarco la última letra  —"L"— señaló su boca para mostrarle como se hacía —lo pronuncias como "R" pero es "L"

—t-a-m-a-r-e

—jaja "L"— volvió a abrir su boca para enseñarle —tamal— le dedicó una sonrisa

Kaito dio una leve risa y la volvió a verla cruzando sus ojos haciendo contacto visual con esas bellas orbes oscuras, los dos se quedaron viendo en un silencio para nada incómodo,  estaban algo cerca el uno del otro, parecía que nada iba a interrumpir este momento.

—ey par de tortolos

—¿eh?— dirigió su vista al origen de la voz —M-Mikuo no no es lo que pa-parece, solo es-estábamos. . . 

—(T/N) ¿vendrías a ayudarme?— interrumpió 

—oh, c-claro— (T/N) se levantó con un leve sonrojo y algo apenada, salió de la habitación y los dos chicos la vieron hasta que desapareció de su vista 

—¿tienes mi esmalte blanco?

—a-ah, toma— le entrego el esmalte que tenía en mano —perdón por no devolverlo

 —que tensión tenías con (T/N)— lo dijo en un tono burlón  —un poco más y tal vez se hubieran be...

 —¡me tengo que ir, tengo que ir a grabar una canción y quiero llegar a tiempo!

—no te preocupes, no le diré a nadie... y gracias por mi esmalte– se dirigió a su habitación 


º🔺º🔺º🔺º


—¿ya has dado tu primer beso?— Mikuo vio a (T/N) indiferente

—no

—pero ya casi ¿no?

—hijo de tu madre, que no 

—como digas pero que tensión habían armado ustedes dos—empezó a reír recordando aquella escena 

—cállate— le dio un leve golpe en la cabeza a lo que él dio un quejido —a ver ríete para darte otro 

—ay perdón

—ahora deja que tus uñas saquen 

—si si, ahora déjame pintarte las uñas ¿si?— le  mostro los esmaltes que tenía —escoge 

—mmm... este me gusta 



º🔺º🔺º🔺º


gracias ala gente q lee esta historia y que vota, no me cansare de agradecerles 

bye 

:D

𝑼𝒏𝒂 𝒅𝒆 𝑴𝒖𝒄𝒉𝒂𝒔  (𝘬𝘢𝘪𝘵𝘰 𝘹 𝘭𝘦𝘤𝘵𝘰𝘳𝘢)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora