꧁𝐷𝑖𝑘𝑎𝑙𝑙𝑖꧂KookV

Capítulo Cuarenta y Dos

Treinta y dos semanas

—Kookie ¿Puedes llevar esto a la cocina? —Dijo Taehyung con una charola de pastelitos morados.

—Claro amor —El Alfa los tomó y gustoso caminó hacia la cocina— por cierto Tae ¿A qué hora llegan?

—Jimin me dijo que ya está subiendo las escaleras, SeokJin y Hoseok vienen en camino.

—¿Estás seguro de que no quieres que me quede? —Jungkook se acercó con cuidado al cuerpo de su amado omega y comenzó a dejar una marca de olor sobre su marca-—Se que es tu fiesta y la de las uvitas, pero quiz...

—No, no, ve a divertirte, aparte los chicos quieren hablar de cosas privadas que no debes de escuchar.

—¿Por qué no? -comenzó a dejar pequeños besitos en el cuello de Tae haciendo a este reír.

—Ya sabes, queremos desahogarnos, hablar un poquito mal de nuestros Alfas.

Jungkook soltó un suspiro y al final terminó rendido. Besó por última vez los labios del omega antes de separarse de él y comenzar a arreglar un adorno Azul que habían puesto en la sala. SeokJin había convencido a Taehyung de hacer un Baby shower, por lo que está desde temprano ayudando a adornar la sala y a cocinar.

Cuando miró todo complacido dejo salir una sonrisa y volteo a ver a Taehyung quien estaba sentado en uno de los sillones comiendo lo que parecía ser un pastelito con un lobo de decoración.

—Tae, aún no te comas los pasteles —Dijo en modo de regañó, pero no pudo evitar mirar con ternura a su omega.

—Vamos Kookie, es que tengo hambre.

Vio como los labios del omega se formaban en un puchero, sabía que no podía hacer nada ante esa mirada, estaba a punto de darle otro pastelito pero su timbre sonó.

—Voy a abrir.

Taehyung asintió tomando el alimento de las manos de Jungkook, haciendo al Alfa negar con una sonrisa en el rostro.

—¡Ah! Si es aquí, estaba asustado de haberme confundido de dirección.

Era Jimin, el omega se veía agitado y nervioso por lo que se hizo a un lado y lo dejo pasar.

—Hola Jimin, un gusto volverte a ver.

—Lo mismo digo Kook.

Cuando el omega rubio lo llamó con ese apodo no pudo evitar arrugar su entrecejo, estaba a punto de decirle que no lo llamará así, pero al ver como Jimin admiraba cada detalle de su hogar decidió dejarlo pasar.

—¿Pasa algo?

—E-es muy lujoso.

—¿Qué cosa? —el alfa volteo a verse la ropa al pensar que quizá Jimin hablaba de lo que llevaba puesto.

—El departamento, es muy lujoso.

Jungkook suspiro aliviado de que no fuera su ropa, por lo que miró a su al rededor y vio que su departamento no estaba en su mejor estado, una de las paredes estaba manchada porque Taehyung una vez quiso cocinar y aventó la mezcla con colorante rosa cuando su grupo favorito empezó a tocar.

También los sillones, había decidido cambiarlos porque a Tae no le gustaba el negro y quiso comprar esos de figuras de rana. Y ahora sus paredes estaban llenas de fotografías de él y su omega.

Sin mencionar los mil adornos que quiso colocar Taehyung por lo del Baby shower.

Definitivamente el lugar ya no se veía elegante, se veía como un hogar, era su hogar.