Acá he estado siempre

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Fueron tan solo algunas horas las que Jisoo pudo dormir, no había sido para tanto su estado de ebriedad como para despertarse sin recordar nada. 

La cabeza le dolía y se sentía descompuesta, todo le daba vueltas, se refregó los ojos con el dorso de sus manos y giro sobre ella misma, cuando estaba a punto de retirar las sabanas de encima de su cuerpo para levantarse, miro hacia la cama de al lado, viendo a Rosé aún dormida, poso sus manos sobre su rostro y murmuro "Que hiciste Kim Jisoo" .

El cuarto se teñía de una luz cálida que se colaba desde a fuera a través de los ventanales de la habitación, aprovechando la escaza luz que entraba, haciendo el menor ruido posible, tomo prestada ropa de Lisa y se dirigió al baño.

En la noche anterior había estaba un poco ida, y cuando Rosie se había encerrado en el baño, ella simplemente se había quedado dormida. Por eso, antes de meterse a duchar, se paro frente a la bacha del baño para retirarse el maquillaje de su rostro. 

Cada vez que cerraba los ojos para echarse agua y terminar de quitar el resto de desmaquillante, recordaba todas las idioteces que había hecho y dicho durante la fiesta y después cuando habían llegado a la habitación. Se creía incapaz de haber hecho todo lo que hizo, pero si, sin dudas había sido ella "Se supone que tenes que cuidarla no lastimarla" se regañaba una y otra vez. 

En el momento que ingreso debajo de la regadera empezó a sentir vergüenza de sus actos, no sabía como iba a volver a mirar a Chaeyoung a la cara, se moría de la vergüenza, y sentía que había arruinado por completo las vacaciones de sus amigas, porque en ese momento no se le pasaba por la cabeza la idea de hacerle frente a la situación y plantearse a ella misma que era lo que le estaba sucediendo. 

Después de ducharse  se quedo reposada sobre la puerta del baño por un momento, intentando escuchar algún tipo de ruido al otro lado, algo que le advirtiera que Chae ya estaba despierta, pero todo seguía tan en silencio como cuando había ingresado al baño. Siendo lo más sigilosa  posible busco su bolso y sin importarle que no fuera a juego con su atuendo, se disponía a salir con el.

Estando fuera del cuarto respiro aliviada, al menos por ese momento aún no iba a tener que enfrentar a Rosé o a sus amigas cuando se dieran cuenta de lo incomodo que se podía tornar el ambiente entre ellas. Reviso su celular para comprobar que no tenia noticas de Lisa o de Jennie, luego de eso lo llamo al jefe de seguridad para comentarle que quería salir a desayunar a fuera, a ver si alguien la podía acompañar. 

Pensaba escabullirse el mayor tiempo posible, al menos hasta saber que iba a hacer. Intentaba no pensar mucho en sus idioteces y en las lagrimas que le había hecho derramar a Rosé, sentía dolor, pero más fuerte que eso era la vergüenza que la invadía,  y era eso lo que hizo que se fuera del hotel sin decir nada. 

Decidió caminar hasta la primera cafetería que encontrara, en un trayecto del camino fue hablando con el guardia, pero cuando este se quedo unos pasos más atrás de ella al recibir una llamada, el recuerdo de Rosie bailando con su amiga le golpeo por dentro, sentía una mezcla de tristeza con ira, pero aún no estaba lista para afrontar sus propios sentimientos, saco su celular y pese a ser costosa la llamada le marco a su hermana para hablar con ella de cualquier cosa que no fuera Chaeyoung. 

En la cafetería apago su celular y le pidió al de seguridad que se sentara con ella, no quería estar sola a pesar de haber salido sola, lo invito un café con croissant untados en mantequilla, y le hablo de las veces que habían estado en Paris con las demás miembros cuando se encontraban de gira, y que los croissant le hacían acordar a eso, que había sido Rosé quien se los había hecho probar por primera vez, volviéndose su aperitivo favorito y que los disfrutaba aún más si estaban recién horneados, diciéndole al guardia, que ese olor le recordaba a Chae, dejando ver una sonrisa boba. Intentaba apartarla de sus pensamientos, pero sin querer queriendo siempre la atraía hacia ellos. 

Chaesoo: El verdadero motivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora