Estaban los tres en la mesa, la chica no bajaba la mirada, sus ojos pasaban del agente Coulson al Teniente Ross.
Nunca se había sentido cómoda en situaciones así, sabía que los hombres frente suya no pretendían hacerle daño pero en el pasado un escenario como ese nunca terminaba bien.
– Primero que nada, me alegro mucho que te encuentres a salvo aquí. – Comenzó a hablar Ross, aquello había roto la tensión que sentía la joven en su piel. – Aunque por otro lado, me disculpo si Stark fue demasiado impulsivo o si te presiono para que tomaras esta decisión de manera apresurada. Puede ser un tanto... excéntrico. – Evito hacer un mal comentario respecto al magnate, no quería verse parcial ante la joven.
– Oh no, no hubo problema con eso. Es verdad que fue muy repentino, pero créame que nadie me presiono, sé que fue una buena decisión. – Le aseguro la chica.
– ¿Te has sentido bien aquí? – Comenzó con una pregunta casual.
– Si, han sido muy amables conmigo. –
– ¿También lo fue Stephen Strange? – Inquirió cambiando a una expresión más seria, sorprendiéndola con esa pregunta.
– Ah... – La sonrisa amena se congelo en su rostro y no supo que más decir. – Este... –
– Escucha, no tienes necesidad de mentir ni de decir nada a favor de él ¿De acuerdo? ¿Lo conoces acaso? –
– No, es la primera vez que veía a alguien como él. – Suspiro nerviosa, no quería empezar mal la conversación hablando mal de una persona que no conocía de nada.
– ¿Puedes decirme que sucedió y por qué intento lastimarte? – Ross entrelazo sus dedos y espero por la respuesta de la chica, Coulson por su parte ponía atención a sus reacciones.
– El día de ayer, llego esta persona de visita buscando al Señor Stark. Estuvieron unos minutos conversando en la sala y el señor Stark me pidió que me presentará para preguntarme acerca de unas reliquias que KODE había robado de las cuales yo no tenía conocimiento. De un momento a otro, Strange afirmo que yo estuve involucrada en un robo a un lugar ubicado en Hong Kong, llego a sugerir que yo fuese alguna espía y que trabajaba para KODE. –
Coulson decidió involucrarse. – ¿Por qué crees que pensaría eso de ti? –
– Dijo que mis características coincidían con una de las personas involucradas en el robo. Pero eso debe ser un malentendido, nunca he puesto un pie en Hong Kong. –
– ¿Él te hizo daño... físicamente? – Everett comenzaba a pensar que tal vez Strange le hubiese provocado aquella marca en su mejilla. Entonces la chica comprendió el contexto de la pregunta.
Toco su mejilla. – No, él no me lastimó, se lo aseguro. Esto ocurrió en Varsovia, cuando me secuestraron del Hospital. –
– Entiendo. – La chica parecía decir la verdad, no dudaba en sus respuestas. – Esperemos entonces que el malentendido se aclare. Mientras tanto, él no puede acercarse a ti ni molestarte. Has sido un elemento importante en esta investigación, arriesgaste tu vida dándonos la información que hackeaste de ellos y mereces toda la ayuda posible para que puedas rehacer tu vida sin el miedo de que vuelvas a ser víctima de KODE y vamos a cumplir nuestra palabra. –
Sentencio Everett firme y decidido a cumplir su cometido. La chica asintió tímidamente, jugo con dedos tratando de controlar su nerviosismo, sintió una ansiedad por morderse las uñas pero controlo ese impulso.
– Para comenzar. – Esta vez Coulson volvió a tomar la palabra. – Me gustaría que nos respondieras algunas preguntas. –
Coulson parecía tener algún plan entre manos, su vasta experiencia le dictaba que debía desconfiar hasta de su sombra y por más inofensiva que se viera aquella jovencita, debía descartar cualquier posibilidad que se tratase de una espía.
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KODE: Ginger
De Todo¿Crees que existen seres diferentes al resto de los seres humanos? Si tu respuesta es no, deberías replantearlo y mirar a tu alrededor. Hoy día estamos rodeados de meta humanos, seres con una inteligencia increíble, seres astutos, personas veloces...