━━ 𝘚𝘵𝘦𝘢𝘭 𝘮𝘺 𝘨𝘪𝘳𝘭 ❧ 𝘉𝘢𝘬𝘶𝘨𝘰 𝘒𝘢𝘵𝘴𝘶𝘬𝘪

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El capítulo de hoy no se sitúa desde la perspectiva de la atractiva, fantástica, hermosa e increíble Katsumi. Hoy verán el día de la TNT mal encendida pero desde tercera persona.

— Katsumi beibe

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Al día siguiente de aquella declaración indirecta (muy directa para ser sinceros) Bakugou se levantó con un muy buen humor.

No le importó ni un poco que el sol le dio en todos los pies al amanecer o que la rata/ardilla/hamster que tenía su  futura novia le mordiera las pantuflas.

Incluso ni se inmutó cuando él hermano mayor de Katsumi empezó a hacer las bromas habituales que hacía cuando lo veía en su casa.

Nada podía arruinar su día. Parecía que las cosas marchaban para bien.

— ¿Katsu, haz visto mí corbata?

Estaban terminando vestirse para ir a la U. A. Por lo general, cuando se quedaba en casa de Katsumi, él se vestía en el cuarto y ella en el baño. Y había sido así, solo que confundieron partes de su uniforme aunque era evidente que no era de ellos.

Tal vez los nervios.

— Estaba en el cajón ese.

— ¿Cuál cajón? Hay muchos.

— Donde esta la rata tuya esa.

Ahí estaba porque  la había dejado luego de confundirla con la suya. Por lo general nunca la  usaba, sin embargo, al estar en casa de los padres de la chica que me gustaba desde mocoso prefería dar una buena impresión, aunque los padres conocían su actitud. Ya luego en la academia se la quitaría.

Esa maldita corbata le daba la sensación de que estaba siendo ahorcado y sinceramente no tenía buenas experiencias en cuanto a eso.

Katsumi se paro frente al espejo nerviosa. Siendo honesto no comprendía la razón. Sabía que ella no se ponía ansiosa por decir lo que sentía o pensaba, era muy honesta y eso le gustaba.

¿Acaso esa era una forma indirecta de dejarlo ir e irse a enamorar de uno de la U.A? No dejaría que eso sucediera.

Actuando de la forma más normal posible se acercó a ella y se ubicó tras su espalda. — ¿Estás bien?

Katsumi negó. — Creo que la mermelada me cayó mal. — se quejó.

Bakugou soltó una risa. — Eso te pasa por comerte el pote completo. Sabes que al inútil de tú hermano le gusta.

— Él se comió mí gansito la semana pasada, una cuchara de su propia medicina.

Negó con diversión y tomó su bolso — Bueno, parece que tomaste laxante en vez de mermelada.

— Lo dice el que estuvo todo el día con diarrea por comer pastel de calabaza.

Ambos rieron — Mueve el culo Katsu.

— Tengo más que tu, Katsu.

Bajaron por las escaleras riendo y empujandose amistosamente en un ambiente juguetón. Los padres de Katsumi no dijeron nada.

Desde niños habían sido así y, a pesar de saber la personalidad de su yerno, no refutaron nada al ver la actitud que adquiría con su hija. Si el Bakugou menor la tratara a gritos, empujones o algo así, no dudarían ni un segundo en hablar con Mitsuki sobre eso. Antes que nada estaba su bebé.

Y al tener recuerdos de siempre fueron así, llevan dos años esperando que confirmen su relación.

Prefieren que se lo digan ellos cuando estén listos que meterse en su vida (lo hacen pero con prudencia por ser padres) a generar situaciones incomodas.