El nerd

Capitulo 17

Estamos en el apartamento de Thomas, lleva como diez minutos mirándome rabioso, yo también lo miro así

Se que es celoso pero tampoco me gusta que se ponga posesivo frente a las demás personas, me hace quedar mal frente a los demás

Que me diga que no puedo hacer algo y encima frente a otras personas, me da rabia

—Ni siquiera somos novios, no debería tener que escuchar sobre tus celos—rompo el silencio

Ni uno de los dos cede, la tensión es palpable

—No somos novios por que tú no quieres que lo seamos

—¿Enserio? ¿Esa será tu respuesta?—me rio secamente.—Si no quieres que te recuerde por que no somos novios en primer lugar entonces no lo uses como argumento

Su cuerpo está tenso y su mandíbula apretada, siento que en cualquier momento algún objeto será estrellado contra la muralla

—Tu no lo entiendes—me acusa

—Hazme entender—respondo frustrada

Me empotra contra la pared, con una mano a cada lado de mi cara, encerrándome

No dejo que su cercanía me afecte, lo miro desafiante

—¡Me vuelve loco!—espeta enfurecido.—No soporto imaginar a otra persona comiéndote con la mirada y toqueteando lo que es mío

—Ese es uno de los problemas, no soy tuya

—Si, lo eres—responde convencido.—Y yo soy tuyo

Al escuchar eso me relajo un poco pero no lo suficiente como para que piense que lo que hace está bien

—Tu sabes que ya no estamos juntos, que solo somos amigos

—Deja esa mierda, por favor

—No puedo

—Si puedes

—¿Es que acaso no te importa nada?—pregunto agobiada.—No puedo tener hijos, no me quiero casar, ya no confío en ti, no soportaría más mentiras, tampoco que me hicieras daño de nuevo... lo nuestro se desmoronó

—¿Y lo de ayer?

—Yo te deje en claro que no estábamos volviendo

—Alexa, vuelve a ser mi novia, podemos superar todo lo que me estás diciendo

—No se si podemos hacer que las cosas vuelvan a ser como antes

—Lo intentaremos, trabajaremos en aquello

Ya no está enojado, ahora tiene otra meta en mente

Por supuesto que quiero ser su novia, lo amo dolorosamente mucho, pero tengo miedo, muchísimo miedo

—¿Podemos ir de apoco?—pregunto con cariño.—No te estoy diciendo que si, tampoco que no

—¡Por supuesto!—se emociona.—Iremos de apoco, lo de ayer se me fue de las manos, no te hacía el amor hace mucho, pero no pasara de nuevo, iremos de a poco

—Está bien, de apoco—cedo ante su emoción y sonrisa encantadora

Me abraza con fuerza, su olor masculino me invade maravillosamente y me siento como en casa, este es mi lugar feliz, con el

—Te amo—susurra dejando un beso en mi frente

No respondo, no le digo te amo hace bastante pero necesito un poco más de tiempo