𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟒

34 6 2
                                    

¿ᴇxᴘʟɪᴄᴀᴄɪÓɴᴇꜱ ᴏ ᴍÁꜱ ᴅᴜᴅᴀꜱ?

—Hija Marcus y yo nos vamos a casar.

—¡¡¡¿Qué?!!!

Todo lo que se ve implicado es horrible, mudanza, cambio de escuela, salidas siempre, cambio de amigos, tiempos, rutina vida llena de cosas como ahorita.

—Mamá... Dime que viviremos  en la misma ciudad.

—Aun no planeamos eso Mía no empieces.

—Necesito un respiro.— me levanté y me fuí.

No no no... Más terribles no pueden estar estás vacaciones, pero... Lo que pasó anoche con Daniel.
Seguí caminando y ví a todo el equipo de básquet saliendo del hotel, así que Ian se me acercó.

—Hola, ¿cómo estás?—Preguntó

—Todo bien, ¿Se irán?

—Tenemos torneo, pero volveremos en la madrugada, si ganamos mañana mi tío nos festejará aquí.

—Oh,está súper bien, suerte— le dí una sonrisa.

—Oye, yo, siento que necesito hablar contigo de lo de anoche— me miró y yo desvíe la mirada, como mierda iba a enojarme con él por un beso cuando yo...me dejé llevar con Daniel en el agua.

—No te preocupes, todo está bien, gana ese partido—le cambié el tema.

—Bien—agarró mi mejilla y se subió al camión.

Me puse nerviosa al ver a Daniel, su mirada tan penetrante, lo de anoche...
Me fuí rápido de ahí, si algo le agradezco al mundo son mis piernas, que a pesar de ser cortas tienen demasiada fuerza y rapidez, me han sacado de muchos apuros para huir.

Iba caminando y me encontré a las chicas de los bolos, incluyendo la peliroja y la que besó a Ian.

—Woo hola nena—Me saludó la chica que besó a Ian.

—Hola — No fueron con ellos...

—Ven acompáñanos a broncearnos.

Si, yo paso, mi piel es demasiado delicada y si me expongo al sol demasiado me salen manchas.

Me quité mi short y blusa para meterme al jacuzzi con ellas pero del lado de la sombra.

—Me llamo Natasha ¿y tú?—me tendió la mano.

—Soy Mía—acepté su mano.

—Ella es Lidia y Aitana—A lo que la pelirroja interrumpió.

—Sí, ya la conozco, fué la que tiró a mi novio al agua y desde ahí gracias a Ian a estado cerca de nosotros—Hizo cara de asco.

—Ay por favor Aitana, Daniel y tú ya no son nada serio.

—Cállate Natasha, se supone que debes de estar de nuestro lado.—Dijo Lidia defendiendo a la pelirroja.

—Como sea, iré por comida— se fué Aitana.

Vaya, a veces son muy intensas, los siento.

—Sería aburrido si no lo fuéramos.—respondió Lidia.

—No te preocupes, no es nada—le sonreí.

—¿No eres de por aquí verdad?—Me Preguntó Natasha acomodando su bikini.

—No, yo, vengo de un lugar mucho más frío, el calor, con mi piel no van mucho.

—¿Y que haces aquí?— preguntó Lidia.

—Pues a mi madre la invitó el dueño del hotel a venir por esta semana, teníamos planeado volver a la normalidad pero justo hoy me dijeron que se casarían y...

—Espera ¿el tío de Ian se casará con tu mamá?—Lidia le dió un sorbo a su bebida.

—Sí...¿Lo conoces?—intente buscar información ahora de Marcus.

—Claro, cada que habrá torneo él le da unos boletos a Ian para que nos invite a disfrutar del hotel.

—Eso, es genial ¿Entonces son de por aquí?— acomodé mi cabello.

—Sí, la mayoría vivimos muy cerca, también estaremos una semana.

—Que bien — Le sonreí.

—¡Chicas! Vamos al spa.—llego Aitana.

—¿Quieres ir al spa con nosotras?—Natasha me miró divertida.

—Yo...mmm—Tenía ganas de decirle que no por qué no quería causarle problemas con sus amigas.

—Vamos, irás conmigo—me sonrió.

—Esta bien—recogí mi ropa y fuimos.

Salimos riéndonos del SPA

—Jajajaja lo peor fué cuando gritó Aitana con la depilación.

—Estupidas pues por eso ocupo el láser, no sé por qué acepte la seción de depilación.

—Es que le hiciste como el cantante Michael Jackson—reímos nuevamente.

—Ya son las 11 vamos a dormir, los chicos regresarán más noche.—Dijo Aitana.

—Ya nos iremos, pero dame tu número, y seguimos en contacto—Me dijeron Natasha y Lidia.

—Claro.

Creo que las cosas no son tan malas después de todo o que al menos en un día malo hay que verle las cosas positivas a la vida.

2a.m.
Llamada de número desconocido.

—¿Bueno?—Dije adormilada.

—Hola hermosa, perdón por despertarte.

—¿Quién habla?—pregunté

—Soy Ian.


Mis dos razones favoritas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora