Dirty boy/Pretty boy - Drarry

Dört

Se encontraba en su casa sentado en el sofá con Ron a su lado viendo su caricatura favorita mientras cantaba el opening.

Se levantó para dirigirse a la cocina a buscar un vaso de agua, por alguna razón sentía que estaba a punto de morirse de sed.

Cuando se acercó lo suficiente no pudo creer lo que tenía ante sus ojos.

—¿Mamá? — preguntó desconcertado mientras se acercaba cautelosamente.

—¡Harry! — exclamo entusiasta una pelirroja mujer mientras se secaba las manos pues se encontraba lavando.

—M-mami— la voz se le quebrada mientras se lanzaba a los brazos de la mujer.

—¿Mami? ¿no estás muy grande para llamarme así? — dijo mientras se separaba un poco de él para poder acariciarle las mejillas. En respuesta Harry movió la cabeza de lado a lado repetidas veces de manera frenética en forma de negación.

—Tu eres mi mami— dijo mientras una lágrima se escapaba de su ojo—te extraño...la vida es muy dura sin ti.

—Tranquilo hijo ya verás que todo irá mejor, yo siempre estaré a tu lado. ¡Harry, mami te ama! — susurro mientras lo abrazaba nuevamente.

Harry al tenerla tan cerca empezó a olfatear, quería volver a sentir su inigualable olor a rosas y miel, pero inmediatamente empezó a identificar el olor se dio cuenta que no era el olor de su madre, este era un poco más fuerte el de ella era muy sutil, y no olía a rosas y miel era más como una fragancia masculina.

Se separó de ella y la miró confundido.

—¿Mamá? — todo se empezó a volver borroso.

—Adiós mi niño, nos vemos luego— dijo mientras le regalaba una hermosa sonrisa la cual era idéntica a la de Ron.

¡Espera! ¡¿está despidiéndose?! ¡NO!

¡mamá no te vayas ¡

¡MAMÁ REGRESA ¡

—¡Mamá! — gritó mientras abría los ojos y se levantaba de un salto de una cama— ¿eh? —miraba a sus alrededores. Esta no era su habitación.

Miro hacia todos lados y no lograba identificar el lugar.

Todo era muy oscuro, las paredes eran blancas, pero estaban marcadas con grafitis y dibujos hechos a mano, la cama tenía una sábana negra al igual que las almohadas, también había una mesita de noche y un escritorio.

Se empezó a asustar pues no sabía en donde estaba, se volvió a sentar en la cama mientras pasaba su mano por su cabello. Al ver su mano pudo observar que tenía unas plumas pagadas a ella y que estaba todo pegajoso, bajo para mirar su torso y se dio cuenta de que no traía ropa puesta solo su bóxer.

Tomó rápidamente la cobija a su lado y se cubrió.

Cuando escucho unos pasos y su vista se clavó en la puerta en donde había un cartel que decía "D. Malfoy"

Seguido de eso vio la figura de aquel misterioso chico que lo había salvado anoche.

—Veo que ya despertaste— dijo mientras se acercaba con su ropa muy mal doblada—vístete y date una ducha, el desayuno está listo— aviso mientras colocaba la ropa en la mesita de noche y desaparecía por la puerta dejando a Harry sin palabras.