Dirty boy/Pretty boy - Drarry

On beş

La suave luz de sol que traspasaba las claras cortinas lo despertaron. Froto sus ojos para seguido darse la vuelta y encontrar una caballera azabache tocando su nariz.

Abrazo al menor por la cintura enterrando su cara en sus cabellos para seguido inspirar su aroma que tanto lo identificaba.

Sintió al más bajo removerse ya que aquel acto le había proporcionado cosquillas, el mayor al darse cuenta de ello empezó a olfatear su cuello tal cual como un perro causándole muchas cosquillas.

—¡Ya! D-Draco b-basta — el menor se retorcía de la risa en la cama mientras el rubio comenzó hacerle cosquillas a su pancita— ¡Dray, alto! ¡me muero! — entre risas pidió, y con algunas lágrimas en los ojos.

Cuando el mayor se detuvo Harry pudo respirar, ¡en serio un día lo mataría!, mientras que el menor intentaba normalizar su respiración el mayor se levantó para poder vestirse, ¡alto! ¡¿durmió en bóxer?!

—¿Por qué te quitaste la ropa?

—Es mucho más cómodo, deberías saberlo dormiste como un bebé — se colocaba su camisa. ¿Cómo podría saberlo? él durmió con pijama, en ese instante se despojó de la cobija y se dio cuenta de que no traía pantalones.

—¡Draco! porque me quitaste mis pantalones? —dijo molesto.

—Ya te dije que es más cómodo.

—Mentira, solo quería verme en ropa interior— se paró frente a él con una cara de enojo que al mayor le pareció divertida— ¡No te rías!

—Perdón amor, es que eres una ternura—riendo, Draco le pellizco sus mejillas, eso solo hizo molestar más al menor, desde pequeño nadie lo tomaba en serio pues decían que sus expresiones eran muy lindas y por ende solo se ganaba risas, pellizcos, abrazos y uno que otro beso.

Tenía ganas de matar a su novio, pero la presencia de alguien más lo detuvo.

—¡¿Eh?! ¿hoy es día de no pantalones? ¡Hannie porque no me dijiste! —y así fue como Ronald se fue corriendo a cambiar.

El día de no pantalones se le ocurrió al pequeño pelirrojo cuando vio una serie en donde había un día en donde nadie usaba pantalones, pero se suponía que eso sería los veintitrés de agosto y hoy era cinco de Julio.

—Ron, hoy no es...

—¡Día de no pantalones! el día más esperado señores — saltaba por los pasillos con sus pantalones de pijama en mano mientras le daba vueltas y cantaba la canción que se inventó.

—¿Día de no pantalones? — pregunto Draco de manera burlona.

—Se le ocurrió a él— se excusó Harry.

—¿Y cuando es el día del desnudo?— pregunto al acercarse por la espalda y lamia el lóbulo de su oreja.

—N-no, D-Draco, R-Ron está aquí — trataba de contener los gemidos, el mayor empezó a acariciar su miembro por sobre la tela.

—No nos escuchara si te mantienes en silencio — sedujo Draco comenzando a dejar besos húmedos en todo su cuello.

El miembro de Harry ya se encontraba erecto y doliente, solo deseaba que su novio lo aliviara como solo él sabe hacerlo, pero cuando Draco iba a meter su mano, el más pequeño de la casa se apareció.

—Harry tengo mucha hambre — hablo de manera tierna y delicada. El de orbes esmeralda reacciono y de inmediato se dio la vuelta pegando su pelvis a la del mayor para ocultar su erección. Mala idea pues el más alto dejo escapar accidentalmente un leve jadeo dejando un poco extrañado al pequeño pelirrojo.