Pasión Por El Triunfo: Fuego En El Hielo Entre El Amor Y El Odio

Capítulo 46.- Déjame Estar A Tu Lado

—De ahora en adelante estaremos juntos—espetó el alvino mirando esos ojos color chocolate.
—Sí, así será pero hay otra cosa creo que no debemos dar a conocer nuestra relación por el momento.
—Vaya linda quieres que sigamos saliendo en secreto y vernos también así—la miro con esos ojos dorados pícaramente.

La azabache se sonrojo por la forma que la miraba —No seas tonto, lo que pasa si damos a conocer nuestra relación los medios estarán sobre nosotros, además hay otro problema. —esto lo dijo con cierta nostalgia.

Aquel joven tomo del mentón a su chica y la miro—Ahora que sucede.
—Pues la verdad hay un obstáculo entre tú y yo.
—A que te refieres.
—Aizawa aunque tú no lo creas o no te has dado cuenta ella está enamorada de ti, y tu bien sabes que somos rivales en el patinaje y ahora por tu amor.

El tomo de los hombres a aquella chica —Entiende bien Kagome tú serás la única chica que amo y amare por siempre y no debe haber obstáculos entre tú y yo ella tendrá que entender que yo no la amo solo somos compañeros de equipo y nada más.

—Es que tú no la conoces bien, es mejor dejarlo así por el momento ya que dentro de quince días nos vamos Alemania y por el momento no debe haber conflictos entre nosotros no es conveniente si ella se entera de lo de nosotros es capaz de que no vaya a Alemania.

—Está bien se hará como tú lo digas y esto quede entre nosotros—El miro su reloj eran las dos de la mañana. —Ya es tarde tu mamá ha de estar preocupada se nos fue la noción de tiempo.
—No te preocupes además estoy contigo y mi madre aunque tú no lo creas esta fascinada contigo.
—En serio.
—Claro que si —ella tomo de la mano al alvino —Dime que todo este no es un sueños Sesshomaru no quiero despertar de él.

—No linda este no es un sueño y te lo vuelvo a repetir te amo, te amo tú me has hecho sentir esa necesidad de amar.

El la tomo de la cintura y la acerco hacia el —A partir de ahora nada ni nadie nos separa. —vio esos ojos color chocolate que lo habían cautivado desde la primera vez que la conoció.

Ahora esa chica estaba con él y nunca la iba a dejar ir de su lado para el ella era su felicidad completa.

La joven de ojos color chocolate también miraba esos ojos color dorado quien también cuando lo conoció la verdad lo detestaba e incluso lo había llegado odiar por su forma de ser, pero ahora todo era diferente ese chico ahora era su destino su novio y jamás dejare que se aleje de su vida.
Era la chica más feliz del mundo, ella se recargo en el pecho del alvino sentía el corazón latir de ese chico.

— ¡Sesshomaru!
—Si dime.
—Quiero que no haya secretos entre los dos a partir de ahora yo confiare en ti plenamente.
—Yo igual mi querida y linda Kagome.
—Así que Sesshomaru yo quiero contarte algo que me paso hace un año y medio—ella miro de frente al alvino.

Pero él no la deja hablar pone sus dedos en los labios de la chica —No me importa tu pasado hay que vivir el presente lo de ahora eso hay que dejarlo atrás.

—Pero para mí esto es importante y quiero que lo sepas.

Sesshomaru no la dejo hablar más y la beso callándola, la azabache le correspondió, pero ella sentía la necesidad de decirle lo que había pasado tiempo atrás entre ella y Brad.

Es en serio por favor esto es impórtate para mí y necesito decírtelo, el alvino la miro ya que su mirada había cambiado de la chica de ojos color chocolate.
El la tomo de la mano y se sentaron en el sillón que estaba ahí —Bien dime te escucho pero como yo te digo debemos olvidar el pasado.

Sesshomaru acaricio el rostro de la chica...Ella lo miro ya que Kagome quería decirle todo sobre ese chico. Porque era lógico que se lo iban encontrar en Alemania.