4.- Antiqua vera

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-Claro Jane  -Dije poniendome de pie- Doug. ¿Nos puedes dejar un momento?
Doug se me quedo viendo, con el seño fruncido y mala expreción.

-Está bien, pero después tenemos que hablar-Dijo Doug con un pesado suspiro, salío cerrando la puerta, para dejarnos a solas.- Ire con los demás que se están instalando.

La casi rubia camino despacio por el cuarto estudiando a detalle cada parte de este y se detuvo frente a una pintura mía de cuando yo era una niña.

-¿Por qué no regresaste?-

-¿Qué?-Dije mirándola detenidamente.

-Nos abandonaste. Me abandonaste- Dijo Jane volteando a verme con ojos llenos de furia pero al mismo tiempo con una notable tristeza- Dijiste que jamás me abandonarías.

-Jane, yo no...-Y antes de terminar de hablar un gran dolor me recorrió de pies a cabeza. Comencé a retorcerme desesperadamente- Jane... p...para, t-te lo ruego...

Jane quito la vista de mí y yo caí al suelo adolorida.

-¿Qué fue eso- Dije recuperando el aliento un poco.

-Explícate- Dijo con tono serio.

-Jane, jamás los dejaría ¡Lo Juro!- Dije tratando de apaciguar el dolor que a un quedaba en mí.

-Te fuiste con los Cullen y después con esos estupidos vampiros nómadas-Dijo con tono amargo, después se giró dándome la espalda.

Empecé a escuchar un leve sollozo que venía de Jane, pero no podía ser cierto. Jane jamás se sentía mal por algo. Como puede me levante del suelo y fui hacia ella, yo era más alta que ella. Puse la mano en su hombro y giro para verme, los vampiros no pueden llorar, así que no había rastros de agua en su cara.

-¡Pensé que ya no regresarías!- Dijo Jane con voz chillona, para después darme un abrazo.- ¿Por qué te fuiste así, acaso no te importamos, ¿no te importa mi amo o yo?

-Oh Jane, tenía que hacerlo- Dije mientras ella una seguía agarrada a mí- También quise buscar a mi verdadera familia, quien soy yo...

-¡Pero esta es tú familia!- Dijo Jane entre pequeños quejidos– ¡Jura que no te volverás a ir!

Le correspondí el abrazo, jamás pensé que ella me quisiera tanto.

-Jamás te abandonare- Dije acariciando su cabeza- Jamás... el que yo no este aquí, no quiere decir que no me importen.

-No estuviste con nosotros en la pelea de los Cullen...-

-Alice me convoco y...-

-¡Pero estuviste de su lado!- Espeto Jane molesta.

-¡No! Jane... no quería que los dos clanes a quien amo se atacarán sin piedad. Por suerte todo acabo resolviendose.- Trate de ser dulce y abrazar a Jane.- Estáre aquí Jane, tranquila...

-¡Jurame que te quedarás un tiempo!- Dijo alzando la mirada- Este año será la celebración de paz.

-Por supuesto, me quedare... - Sonrei al verla más tranquila- Si los lideres nos invitan ahí estare. ¡Lo juro!

Ella más calmada se alejó un poco de mí, recobrando su fría postura de siempre; yo le dedique una sonrisa.

-Bien, me voy-Dijo Jane acercándose a la puerta- Descansa. Pero no confío en el vampiro que te acompaña...

-Te quiero Jane- Dije antes de que cerrara la puerta.

Me quede en silencio, al parecer le importaba mucho a Jane. Estaba algo cansada de estar en esa habitación igual de helada que siempre y ahora oliendo a cigarro por Doug, quien había dejado la colilla en el piso de cantera, dios ese hombre.

Recuerdos Vampíricos 🩸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora