Solo una tonta | 𝐤𝐢𝐦 𝐬𝐞𝐮𝐧𝐠𝐦𝐢𝐧

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Capítulo dieciocho: ¿Su novia?

—No me iré de aquí hasta que tu vengas conmigo.

—Espera, ¿qué? —claramente estaba confundida, él y yo jamás habíamos salido a algún lugar y tampoco habíamos hecho planes para ello. Seungmin era raro, tan raro como yo.

—Me refiero a que tenemos que ir a entrenar, ya sabes para tu expediente en deportes...

—Ah, era eso —dije y él afirmó con la cabeza—. Deja me voy a cambiar la ropa, con esto no puedo hacer mucho.

—Si, está bien, te espero aquí enfrente. No tardes mucho.

Le sonreí para después ir corriendo a mi habitación y cambiarme a una ropa más cómoda para hacer ejercicio. Momentos más tarde ya estaba de vuelta con Seungmin, quien tenía un balón de basquetbol en manos, yo lo miré con terror, si había un deporte en el que me iba peor que en todos, era ese.

—Ay, no me digas que...

—Jugaremos básquetbol, será divertido.

—No, no, no, soy pésima para eso, odio el básquetbol, no lo soporto. Me pasan cosas horrendas.

—¿Tanto así? ¿por qué?

—¿Acaso no recuerdas lo que me pasó en primero de secundaria? —me puse roja de tan solo pensarlo.

Flashback...

No había llegado uno de nuestros profesores por lo que teníamos hora libre. Yeji y Lia me habían invitado a jugar básquetbol junto con otros compañeros, yo claramente no iba a aceptar aquella propuesta, no sabía nada sobre aquel juego, pero termine aceptando porque me enteré de que estaría Christopher Bang, quien en ese momento me atraía... entonces me metí a jugar.

Mejor dicho, me metí a no hacer nada porque no sabía jugar. Mientras todos corrían y se pasaban el balón yo simplemente me quedaba allí parada sin hacer nada viendo Chris, toda hipnotizada.

Lo que yo no sabía era que dos de sus compañeros estaban jugando muy pesado, corriendo de un lado a otro sin cuidado alguno. De pronto sentí como algo demasiado pesado pasaba encima de mi espalda haciendo que yo cayera de rodillas, lastimándome un poco. Dos malditos niños de tercer año habían pasado encima y lo peor de todo es que eran el doble de altos que yo. Termine en el suelo casi llorando de la vergüenza y el dolor.

—¿Te lastimaron? —pregunto Seungmin en cuanto estuvo a mi lado, aunque lo había visto reír antes de venir.

Yo asentí sin decir nada más, le mostré mis rodillas que estaban sangrando un poco, mi pants había terminado roto de esa parte.

—Esos idiotas, ni siquiera se disculparon. —bufó mirando a los chicos a lo lejos. —Vamos, sube a mi espalda, te llevare con la profesora Moon.

Fin del Flashback...

—Si bueno, ahora no están esos idiotas, nadie puede hacerte daño, estás conmigo. Esa vez yo te ayude a levantarte, si te caes hoy no dudare en hacerlo de nuevo.

—Pero esa vez tú te reíste antes de ayudarme.

—Es que fue un poco gracioso, pero juro que si te caes no me voy a reír por más graciosa que te veas. Ahora hay que iniciar, porque se hace tarde.

Me aventó el balón y cayó en mi cabeza, después de disculparse y reír un poco comencé a intentar encestar, aunque no lo logré en ninguna ocasión.

—Así no se tira, tontita... Mira. —me quitó el balón y de un solo tiró encesto, se veía demasiado bien, me quedé tan hipnotizada en todo lo que hacía que no escuche nada de la explicación que me dio. —Ahora inténtalo tú.