T.R.U.E.

CAPÍTULO V

T.R.UE.

Al pie de las montañas HuanWen y Yubin, justo antes de llegar al puerto que se dirige a Yummeng, se encuentra un establecimiento de aguas termales. Cada una de ellas tiene poderes y herramientas regeneradoras. Pero hay un pozo que es considerado el más especial de todos y es que tiene la particularidad de sacar a flote los verdaderos sentimientos de las personas: dolor, agonía, amor, secretos... Luego de que el mundo de la cultivación solucionó el problema del fallecido líder de secta JinGuangyao, se enteraron de este pozo. Ninguno lo vio útil para ese entonces, en un par de años la historia de este pozo había pasado al olvido y no fue paradero de nadie más. Los dueños del establecimiento y los que conocían las aguas termales dejaron de darle importancia, aquella agua poderosa no podía ayudar a nadie.

...O...quizás... ¿sí?

Capítulo V

Wangxian al rescate

Todo aquel descubrimiento le asustó.

Luego de un rato siendo besado por Xichen, Jiang Cheng le golpeó y empujó con todas las fuerzas que pudo. Su fuerza nunca sería proporcional a la del Líder de la Secta Lan, sin embargo, el carácter de este era apacible y cuando sintió que Jiang Cheng le empujaba tan fuerte, no pudo hacer más que ceder.

En consecuencia, su cuerpo cayó al suelo.

El momento se sintió bastante incómodo luego de eso. Jiang Cheng quedó furiosamente sonrojado y apenado, recostado del árbol. Lan Xichen apenas tenía un ápice de vergüenza, la tristeza estaba apareciendo en sus ojos.

— ¿Ah, Jiang Cheng? –Se escuchó la voz de Wei Wuxian entre los árboles.

Ambos habían caído lejos del otro, ambos estaban jadeando, ruborizados y consternados. Cuando la pareja del Wangxian los vio de esa manera quedaron anonadados. Wei Wuxian se acercó para ayudar a JiangCheng:

— Ven, ¿dónde te estás quedando? Te llevo

Lan Wangji hizo lo mismo con Lan Xichen:

— Hermano

Uno se fue hacia un lado con su hermano, el otro se fue hacia el camino contrario junto a quien en algún momento había llamado Shidi. Cada quien se separó, cada quien se encargó de acostar a los ebrios en sus camas y dejarlos donde debían estar. Luego no se preocuparon más.

Cuando ambos volvieron a su hogar suspiraron.

— Te dije que debíamos seguirlos -Dijo Wei Ying.

— Hmp

— ¿Qué hubiera pasado si no llegamos a tiempo eh?

A esa pregunta a Lan Wangji le recorrió un extraño estremecimiento por la espalda y sacudió levemente los hombros, tenía una expresión complicada. Wei Wuxian se le asimilaba mucho, luego de un rato estando en silencio, los dos dijeron al unísono.

— No deben estar juntos

— No deben estar juntos

Luego volvieron a hablar al mismo tiempo.

— Mi hermano le gustaban las mujeres

— A Jiang Cheng siempre le han gustado las mujeres...Oh –Ambos sonrieron – pero – Wei Wuxian se acostó en la cama y apoyó su cabeza de su mano – ahora que lo pienso mejor Lan Zhan, Zewu-Jun si que pareciera que fuera manga cortada desde hace mucho tiempo

— ¿Mn?

— Digo, esas visitas nocturnas que hacía a Jin Guangyao y como se portó después de su muerte...