CAPÍTULO II

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T.R.UE.

Al pie de las montañas HuanWen y Yubin, justo antes de llegar al puerto que se dirige a Yummeng, se encuentra un establecimiento de aguas termales. Cada una de ellas tiene poderes y herramientas regeneradoras. Pero hay un pozo que es considerado el más especial de todos y es que tiene la particularidad de sacar a flote los verdaderos sentimientos de las personas: dolor, agonía, amor, secretos... Luego de que el mundo de la cultivación solucionó el problema del fallecido líder de secta JinGuangyao, se enteraron de este pozo. Ninguno lo vio útil para ese entonces, en un par de años la historia de este pozo había pasado al olvido y no fue paradero de nadie más. Los dueños del establecimiento y los que conocían las aguas termales dejaron de darle importancia, aquella agua poderosa no podía ayudar a nadie.

...O...quizás... ¿sí?

Capítulo II

Problemas Familiares

-Tío ¡confía más en mí!

Jinling había gritado una vez más al tiempo en que corría echando humos. JiangCheng quedó en medio del bosque, con la noche oscura y los grillos acompañándole. Su mano empuñada se tensó con Zidian brillando en ella, la serpiente se extendió en su mano y justo cuando iba a arrancar a correr

- CofCof -JiangCheng cayó de bruces al suelo y luego volteó molesto.

- ¡ZEWU-JUN!

- ¡Sandou Shensho! -Trató de imitarle él con una sonrisa burlona en los labios.

- No estoy de humor

- Nunca lo estás -Le tendió la mano mientras lo levantaba, con su mano ejerció fuerza hacia la dirección contraria a la que se dirigía JiangCheng - déjalo estar, está seguro, ven conmigo

Jiang Cheng miró una vez más mientras Xichen lo arrastraba de vuelta a Yummeng.

Los días habían pasado demasiado rápido desde la primera vez que Xichen había realizado la primera visita a Yummeng. Los días luego de ese pasaron tan velozmente que parecieron un abrir y cerrar de ojos. Cada diligencia fue realizada, los tratados hechos y los planes ejecutados. Los primeros dos meses pasaron entre los preparativos o eventos conmemorativos, resultaba ser que la Secta Yummeng sería el hogar de los nuevos discípulos de distintas sectas durante algunos meses; así como había hecho la secta Gusulan en su momento, la secta Jiang proveería distintas disciplinas para los más pequeños.

Los junior ya no tan junior ayudarían a los pequeños Shidi y servirían de ejemplo. Tendrían los facilitadores necesarios de cada secta para que el aprendizaje fuera más integrado, los principales discípulos serían de la secta Gusulan. Lan Xichen estaba preparando todo para los nuevos discípulos.

Entre los quehaceres, la tensión e incomodidad entre ambos líderes de secta amainó. Por el contrario, una complicidad cálida y familiaridad desconocida creció entre ambos. Lan Xichen no sabía si había sido por aquella primera experiencia, o por los momentos incómodos que le continuaron. Como la primera vez en que los demás vieron el cabello trenzado de Sandou Shenshou.

Aquel día, los Juniors ya no tan Juniors se sonrojaron.

- ¡T-tío! ¡Tu cabello..!

- Cállate o te parto ahora mismo las piernas

La cuestión de las trenzas eran la excusa perfecta para la curiosa pareja del Xicheng, uno yacía curioso por las distintas maneras en que Zewu-Jun podía trenzar su cabello, el otro se sentía tan atraído a aquella faceta que nunca había visto del enrabiado Sandou Shenshou y lo rápido que podía dormirse en sus manos.

T.R.U.E.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora