"oi, ¿de qué está hablando?"
"Cállate, te quitará puntos".
En el que un Weasley y una Hufflepuff se pasan notas durante la clase de encantamientos.
Libro original @-yamsie
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
CON LA SEGUNDA TAREA, los campeones tuvieron un mes para prepararse para la tercera y última prueba. La clasificación actual eran Cedric y Harry en primer lugar conjunto, Krum en segundo y Fleur en último. Cedric leería todos los libros de encantamientos que pudiera encontrar de cabo a rabo solo para estar preparado para patear el trasero de la migaja. A Fey le pareció muy divertido que Cedric fuera tan apasionado por ganar el torneo de Hogwarts, y se sorprendió de que hablara mal de Krum, ya que siempre era amable con todos.
La amistad de Fey y Ron estaba prosperando, y Fey esperaba con ansias Encantamientos y recibir sus pequeñas notas.
Un fin de semana, Ron decidió presentar adecuadamente a Fey a sus hermanos. Llevó a Fey a la mesa de Gryffindor durante la cena y se volvió hacia sus hermanos y hermana.
–Esta es Fey.– Dice Ron. –Ella es mi amiga de Hufflepuff de la que estaba hablando.– Fred y George sonríen con picardía.
–Entonces esta chica es tu pequeña novia? Ella es demasiado bonita para ti, Ronniekins.– Afirma Fred.
–Ella no es mi…– Vomenzó Ron, pero George lo interrumpió.
–Creo que lo hiciste bien mi querido hermano.– Dice George, pasando su brazo alrededor de Fey.
Fey pone los ojos en blanco y aparta el brazo de George de ella. –No estamos saliendo, pero gracias por el complemento.–
Ginny Weasley le tiende la mano a Fey para que se la estreche. –Soy Ginny, ignora a mis idiotas hermanos, solo están celosos de no tener amigas bonitas.–
Fey sonríe y estrecha la mano de Ginny. –Espero que podamos ser amigas, Ginny.–
Ginny sonríe y asiente con entusiasmo.
Los Weasley comen sus comidas y a nadie parece importarle la Hufflepuff en Gryffindor, por lo que Fey comienza a comer su comida. Ron y Fey tienen una conversación agradable con Hermione, Harry y el resto de los Weasley, y se miran el uno al otro cuando nadie mira. Pensaron que nadie se dio cuenta, pero los gemelos los vieron sonriéndose cálidamente el uno al otro y tuvieron que reprimir la risa. Los Gryffindors aman tanto a Fey que la incorporan a su pequeña familia de inadaptados. Los ojos de Fey casi se llenaron de lágrimas de felicidad cuando Ginny la llamó la hermana mayor que nunca tuvo.
Después de la cena, Ron insiste en acompañar a Fey de regreso a su dormitorio.
–Entonces.– Comienza Ron. –¿qué piensas de ellos?–
–Son increíbles, Ron.– Dice Fey. –Amo a Ginny y Hermione, Fred y George son algunas de las personas más divertidas que he conocido, y Harry es literalmente tan dulce.–
Ron sonríe ampliamente y toma su mano sin pensar. Las mejillas de Fey se calientan con el contacto, pero intenta fingir que no se dio cuenta de que él tomó su mano. Ambos no notan el rosa en sus caras.
Continuaron caminando de la mano hacia la sala común de Hufflepuff en un cómodo silencio. Cuando llegaron, rápidamente desconectaron sus manos y se despidieron.
–Buenas Noches Ron, la cena fue muy divertida.– Dice Fey. Luego le da un rápido beso en la mejilla y se dirige a la sala común, dejando a Ron caminando de regreso a la torre de Gryffindor.
Una vez de vuelta en su cómoda cama, después de ducharse y ponerse el pijama, suspira y piensa en cómo ella y Ron se habían tomado de la mano. Ella gime y se acuesta de espaldas. –Estás tan enamorada, Fey. Ugh.– Murmura Fey para sí misma.
Mientras tanto, Ron está recostado en su cama con dosel relatando la noche. Honestamente, era más feliz cuando estaba cerca de Fey. Ni siquiera su familia lo hacía sentir tan seguro.
Siempre había sentido que lo pasaban por alto, siendo el niño más joven. Todos sus hermanos eran especiales. Bill era un rompe maldiciones, Charlie trabajaba en Rumania con dragones, Percy en el ministerio, Fred y George eran los mejores bromistas y todos los amaban, y Ginny era la única chica que era una bruja muy hábil. Eso acaba de dejar a Ron, el compañero de Harry Potter. A veces sentía que su madre amaba a Harry más que a él. Sabía que esto no era cierto, pero eso no le hizo dejar de pensar en ello.
Fey fue uno de los únicos que lo vio como es. A ella no le importaba que él no fuera el más inteligente, el más deportivo o incluso el más guapo (aunque pensaba que era bastante guapo).
Fey era su amiga incondicionalmente y siempre estuvo agradecido por ello. Sabía que no era un Weasley más. Ella sabía que él era especial. Y eso hizo que Ron se sintiera como el niño más feliz del mundo.
Ron, agotado por lidiar con sus hermanos toda la noche, cayó en un sueño sin sueños.
