Amor Entre Líneas (Ereri) Omegaverse

Capítulo 17- Perdido.

Pasaron los días y mi relación con Levi iba mejorando, nos habíamos hecho más unidos, a pesar de que el tema con su representante aún no se había resuelto por completo, me dijo que ya solo se contactaban por el trabajo y que no se encontraban en su departamento, sino que iban a restaurantes, ese tipo no me agradaba en lo absoluto así que le dije a Levi que si quería, la compañía de mi padre le podría encontrar un nuevo representante.

- Sé que te procupa que vuleva a suceder lo de aquella vez, pero no creo poder dejar a Erwin sin trabajo, me ha apoyado desde hace más o menos tres años, conoce mi método de trabajo y lo que estoy dispuesto o no a hacer...

-¿Y? Levi, ese tipo en cualquier momento puedo volver a atacarte, puede que lo haga cuando yo esté de viaje o incluso puede que lo haga esta noche llegando a tu casa sin avisar...- mi tono de preocupación se hacía notar, pero es que ese tipo me daba un enorme nivel de desconfianza, sentía que en cualquier momento podía lastimar a mi Levi... mi cachorro- Levi, aún eres un cachorro para mí, deseo cuidarte, por favor, dime que al menos lo pensarás... suspiró.

-Está bien, ahora quiero que nos tranquilicemos y cenemos ¿de acuerdo?, dejemos estos momentos de estrés para depués- suspiré y procedimos con nuestra cita, la cual hasta el momento iba bastante bien.

Narra Levi

Eren me ha estado molestando mucho con que despida a Erwin, pero no me siento capaz de hacer tal cosa, él me apoyo mucho y me ayudo cuando estaba completamente perdido en aquel entonces, cuando mi carrera se estaba desmoronando poco a poco luego de que inicie como actor.. sino fuera por Erwin, no sé donde estaría en estos momentos, además, él se diculpó conmigo y primetió no hacerlo de nuevo, sus ojos se miraban tan arrepentidos y sus ojeras me dejaban ver que la situación no lo había dejado dormir, me hizo sentir tan mal que lo perdoné...

-Levi, tenemos un problema- Erwin interrumpió mis pensamientos, sacudí mi cabeza y asentí, indicándole que continuara- ¿recuerdas a Farlan? - mi mundo se detuvo, ¿escuché bien?, asentí repetidas veces, indicándole que continuara y me dijera el punto de mencionarlo luego de tanto tiempo- solicitó una reunión contigo- ¿QUÉ?- y la empresa que te patrocina aceptó... esta es la carta que me llegó esta mañana para que la leyeras.

Efectivamente, ese idiota se había vuelto a aparecer en mi camino justo en el peor momento, y lo peor de todo, como mi jefe mayoritario había aceptado, no me podía negar. Según lo leído, él vendría mañana por mañana y en la noche tendríamos nuestra reunión, mi respiración se detuvo por un momento, mi cuerpo me estaba dando a entender que aun recordaba todo lo que había tenido que sufrir por su culpa, mis ojos se llenaron de lágrimas al punto de llorar y tuve que pedirle a Erwin que me fuera a dejar a mi departamento.

-De acuerdo- dijo poco después de que se estacionara en la entrada del gran edificio donde se encontraba mi, ahora, hogar- cuídate, nos vemos mañana, descansa y deja de pensar en esto, recuerda que puedes contar conmigo para lo que desees- asentí y me bajé del coche, suspiré y subí a mi piso. 

No pude ni pensar en la cena, así que me fui a la cama, necesitaba dormir, mañana no sería un día muy bueno.

Esto es un sueño-recuerdo (contexto)

Luego de casi 2 años de relación, Farlan me había pedido matrimonio... deseaba con todas mi fuerzas que esto resultara, él había sido mi mano derecha y mi apoyo... no tenía familia y el único que me había ayudado luego de que mi tío Kenny me echo de su casa, había sido él. 

Tenía la llave de su departamento, podía ir cuando quisiera, incluso desvelarlo en medio de la noche si quería. Estaba muy feliz, miré mi mano, un hermoso anillo de diamentes incrustados de plata adornaba mi dedo anular, di gritos internos de alegría. 

Hoy había salido temprano del trabajo, quería pasar un poco más de tiempo a su lado, seguro en estos momentos estaría en su oficina, así que me dirigí a su casa ¿Qué diría cuando me viera ahí? además, le tenía una sorpresa... 

Abrí la puerta de su departamento y entré, puse mis cosas en la sala y decidí tomar un baño, de todos modos hoy sería el día en el que, por primera vez, me le entregaría. 

Abrí la puerta de su habitación debido a que el único baño de este lugar se encontraba ahí. Miré algo removerse en la cama, me asusté , pero reuniendo todo el valor que tenía me animé a acercarme, ¿será que Farlan faltó hoy al trabajo? No creo, si en la mañana me dijo que iba saliendo ¿entonces?

Cuando al fin estuve cerca, aprecie algo que jamás pensé que vería, justo en mis narices estaba Farlan... abrazando a Isabela, su secretaria, ambos estaban desnudos, entonces todo cobro sentido, siempre que iba a su oficina ella me miraba burlona, con una sonrisa desagradable en su rostro, todas las piezas se acomodaban en su lugar poco a poco... me vieron la cara.

Mi respiración era rápida y desesperada, cuando abrí los ojos todo estaba oscuro, di vueltas de un lado a otro sin lograr conciliar el sueño, miré el reloj 12:45 am, pensé en Eren y en si quizás me contestaría, así que le llamé, solo para intentar.

-¿Hola? - se escuchó al otro lado de la línea, miré la pantalla, en verdad era el número de Eren pero ¿por qué había contestado una mujer? ¿era su madre?, no la voz de ella no se escuchaba así... ¿entonces quién y a las 12 de la madrugada casi las 1?- ¿Bueno? Eren en estos momentos no puede atenderlo, por favor llame mañana, gracias.

-Espera, ¿quién eres? ¿por qué contestas el teléfono de mi novio?

-Oh, lo siento, es que él esta ocupado con algo justo ahora y me dijo que contestara, soy Mikasa, una muy buena amiga de Eren.

-Mikasa ¿con quién hablas?- escuché la voz de Eren de fondo- te dije que te bañaras, estas muy sudada y acabo de cambiar las sábanas.

-Sí, sí, ya voy, es tu culpa que esté así, te excediste hace poco.

-Deja de hablar y ve a bañarte, sino te mando al cuarto de invitados.

-Por cierto, tu novio está al teléfono...

-Te dije que no contestaras mis llamadas- su voz sonaba bastante enojada ¿le molestó que lo llamara? ¿cómo que se excedió? ¿por qué ella estaba sudada? ¿por qué cambio las sábanas? y sobre todo ¿ por qué demonios esa chica domirá con él?.

-Levi, ¿estás bien? ¿sucedio algo malo? ¿ quieres que vaya a---

-No necesito nada, diviertete con tu muy buena amiga- Colgué.

Ya sabía lo que había sucedido, no quería comprobarlo aún, ¿otra vez? y ahora con alguien aún más especial para mí... no puede ser, me acurruqué entre mis sábanas mientras que unas lágrimas gruesas empezaban a salir de mis ojos. 

Ciertamente ahora estaba más perdido que antes...

Continúa...