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El sonido de la lluvia era algo sin duda relajante para la gran mayoría de alumnos quienes disfrutaban la gran serenidad que abundaba en los dormitorios. Eran aproximadamente las tres de la madrugada, la lluvia hacía que el clima fuera fresco llegando a calmar el calor de hace unas cuantas horas.
La gran mayoría ya se encontraban ya dormidos en sus respectivos cuartos a excepción de una joven alumna, la cuál aun estaba despierta a causa de su insomnio, el no poder dormir ya era algo común en su vida desde muy pequeña. Aquella joven en ocasiones tomaba pastillas para dormir pero después de un pequeño accidente, su mejor amigo se reusaba a entregarle nuevamente aquellas pastillas dejándola combatir el insomnio sola.
Su amigo Ojiro estudiaba en la misma universidad que ella, lo único diferente era el grupo y por ende diferentes dormitorios. Aquel rubio estaba más lejos de su departamento e ir sólo por una pastilla, puesto que sabia que no le daría todo el frasco y sumando que su amigo no le haría mi caso por las horas que eran, no le quedó más remedio que tratar de dormir sin las pastillas que le facilitan el poder hacerlo, lo cual era todo un reto.
______ se paró y caminó alrededor de cinco minutos alrededor de la habitación tratando de agotarse y poder dormir a causa del agotamiento pero fue inútil, se acercó a la ventana y observó la lluvia comenzando a sentir una calma interna pero ni con eso logro sentirse cansada o siquiera con sueño. Llevo sus manos a su cabello para poder quitarlo de su rostro con algo de frustración, sus dedos pasaron con suavidad entre las hebras ___ de la joven en un intento de acomodarlo mejor.
Un fuerte trueno resonó delante suyo sorprendiénda un poco, no se esperaba el sonido y le llegó a causar un pequeño susto. Observó por unos cuentos minutos más aquel paisaje que le aceleraba el corazón, los días lluviosos eran sus favoritos. Su mirada cambio de dirección está vez para observar la hora en el pequeño reloj que tenía en su mesita de noche.
3:48 am
La frustración la invadió tan rápido cómo fue consiente de la hora, mañana tendría clases y ella aún no había dormido nada, en esos instantes pensó con seriedad no dormir en toda la noche, si dormia en ese momento no lograría estar satisfecha y esto provocaría que la tarea de levantarse fuera más difícil de lo que habitualmente era. Caminó en dirección a su mesita de noche tomando su celular dispuesta a llamar a su amigo Ojiro y gritarle, si ella no podía dormir por su culpa haría que el también sufriera.
Mientras buscaba el número de su amigo ella ya estaba pensando en cada insulto que tenía conocimiento e incluso varios eran en diferentes idiomas, lo curioso es que sólo sabía su idioma natal y un poco de inglés pero conocía varios insultos en diferentes idiomas, cada quien aprende los idiomas cómo se les da la posibilidad.
