Narra _____:
Ya había terminado, realmente fue agotador, hice mil cosas para mantener todo limpio. Ese zorro se encargaba de estas labores sólo, es admirable; el lugar está tan impecable.
Onikiri: Ama _____, le he traído un poco de té —dijo extendiendo un vaso, lo tome y le sonreí
______: Gracias, Onikiri —me dispuse a beberlo
Kotetsu: Ama _____, debe intentar que el maestro Tomoe sea su guardián
_____: les quiero pedir algo, no me digan Ama _____, solo _____, por favor. —ellos indicaron que si con la cabeza— ¿Cómo le hago para que Tomoe sea mi guardián?
Onikiri: debe besarlo en los labios, eso sellará el lazo divino —se notaba la emoción en su voz
_____: Vaya... Así que con un beso —sonrei maliciosamente, no me importaba besar al zorro. ¿Tanto quiso humillarme? Ya veremos quien termina riendo— ¿Cómo lo llamo?
Kotetsu: (saco unos rectángulos de papel y tinta) escriba un talismán con un mensaje, seguro le llegará, _____
_____: ¿Talismán? —y así comenzó otra explicación sobre qué eran los talismanes, como usarlos y su poder.
Tal parece ser que si voy a necesitar la ayuda de Tomoe para ser una Diosa, bien, lo llamaré y veré la forma de hacerlo mi Guardián: primero por la buena, después por la mala.
_____: bien hagamos un talismán —tome el papel y la tinta, me dispuse a escribir cuando escuché un sonido de afuera... Una voz, ¡alguien está pidiendo ayuda!
Mujer: ayúdenme, ¡Por favor! ¡Ayúdenme! —se encontraba en una zona algo oscura y un poco alejada.
Corrí rápido a su encuentro la mujer estaba de rodillas y algo inclinada, creo que estaba sangrando y traía un bebé en brazos. Me dispuse a ayudarla
_____: ¡Dios mío! ¡Déjeme ayudarla! —me acerque
Mujer: toma a mi bebé, por favor, tómalo —ordeno y eso hice, tomé al bebé. No había un bebé, sino un saco de carne
_____: ¡¿Que demonios?!
Mujer: (su voz comenzó a tornarse tenebrosa) que linda chica, tan amable —el supuesto bebé se volvió pegajoso y pesado—. Debes saber tan dulce como tu carácter
_____: ¡Mierda! —intente soltar al bebé, pero estaba pegado a mis brazos, no tenía forma de librarme de él.
Narra Tomoe:
¿Mmm?, ¿Y la humana dónde está? Creí haberla visto escribir y ahora, no hay nada.
Kotetsu: ¡Maestro Tomoeeee! —genial, seguro ya la devoraron y me lo perdí
Tomoe: ¿Qué pasa, Kotetsu? —apareci a su lado
Kotetsu; ¡el ama _____ fue a ayudar a una mujer y no regresa, la oímos gritar!
Tomoe: ¿Se supone que debo ayudarla?
Kotetsu: ¡Por favor!
Tomoe: n...
_____: ¡AYUDAAAA! —Realmente se oye desesperada...
Tomoe: me deberá un gran favor esa idiota —fui a buscarla, una bruja estaba apunto de devorarla, pero primero, estaba enfocada en aterrarla lo más posible—. Saquese —agarre a la humana como pude y la ayude a subir a un árbol, claro que la traía como si fuese un costal
_____: ¡AAAAH, ESTA MUY ALTO!
Tomoe: sigue gritando y todos los demonios van a saber dónde estás... Bien, niña inútil, esto no te saldrá gratis. Ahora, pídeme perdón por no haberme rogado y te ayudo a llegar a salvó al templo
_____: ¿Qué? No —la agarre de una mano e hice como si fuera a soltarla. La bruja estaba justo queriendo subir el árbol— ¡AAAAAAH!
Tomoe: hazlo o le dar de comer a esa bruja...
_____: está bien... Pero acércate para que mínimo no tenga que decirlo tan fuerte... —que débil, cedió muy rápido. Me acerque un poco a ella
Cuando menos sentí logro hablarme un poco y besarme... ¡Debe ser una jodida broma! Maldita humana.
_____: (se separó y al hacerlo se soltó por accidente) ¡SÁLVAME! —¡ME LLEVA, POR MÍ SE PODRÍA MORIR!
Tomoe: ¡COMO TE ATREVES, MOCOSA! —Y ahí me tienen dejándome caer para ayudarla
La alcance a agarrar antes de que la caída la matará. Esto me trae recuerdos,pero eso no interesa ya... Ahora de nuevo estoy atado a una humana. A una Diosa humana con un carácter peor que el de Nanami.
2 de junio de 2021
Aaaah llegó unas horas tarde, perdonen JAJAJAJA
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Mi Deidad - Tomoe y tú
Fanfiction______ Aoyama, regreso a aquel pueblo de Japón con la intención de mejorar y así mismo adaptarse a la vida que le toco, ella es Huérfana y solo tiene una vieja amiga de la niñez Nanami, quien le da un curioso regalo a su llegada, un regalo que le pe...