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Superheroina

Fue una situación extraordinaria. No todos los días una Luthor ingresaba en el hospital de National City después de dar a luz en medio de un atasco de tráfico. Especialmente el Luthor más joven que había estado desaparecido durante años. Fue una gran noticia, pero una de que los padres de Lena más que rápidamente hicieron todo lo posible para sofocarla, ya que lo último que necesitaban eran periodistas que volaran sobre ellos como buitres sedientos para informar sobre esa tragedia familiar.

Sin ningún esfuerzo, excepto por las sonrisas y las dulces palabras que fácilmente caían de sus labios frente a la morena, Kara logró convencer a Lena de que aceptara la medicación que el Dr. Kent le había recomendado. No era gran cosa, solo una medicina que ayudaría a la morena a relajarse, ya que esto parecía imposible en su estado normal después de todo lo que había pasado.

- Aunque el parto fue exitoso y Lena no presenta ningún problema físico, recomiendo que ella y el bebé pasen la noche aquí - dijo el Dr. Kent a los Luthors en presencia de Kara y Barry que aún estaban en el hospital. - Lena necesita descansar y solo le di un tranquilizante que la hará dormir por unas horas.

- Gracias, doctor - fue lo único que pudo decir Lilian Luthor, aún procesando todo lo que había pasado ese largo día. - Mañana por la mañana la llevaremos a casa entonces.

La morena de las gafas asintió.

- Recuerda que Lena estaba en una situación de estrés extremo. Necesitará toda la ayuda posible de las personas que la rodean y le recomiendo que el primer paso que dé en relación con ella sea buscar ayuda psicológica, ya que esto es lo que más necesitará Lena durante los próximos meses - habló con calma, enfocándose más en su atención al policía rubio que a los padres de la víctima, porque por lo que había observado el Dr. Kent, Kara era la que parecía más preocupada y consciente de la gravedad de la situación que los Luthor.

Kara asintió con la cabeza, mirando al médico, como si su mensaje fuera realmente para ella. Aunque la mujer policía apenas conocía a Lena Luthor, ella ya estaba involucrada. Después de dar a luz a Ben y todo lo que había sucedido ese día, Kara supo que incluso si quisiera, no podría seguir con su vida como si nada hubiera pasado. Porque había sucedido. Había sucedido algo muy importante.

- Volveré a la comisaría y pondré al día a nuestro jefe. No hay nada más que hacer aquí mismo - le dijo Barry a su socio después de que se alejaron de los Luthor. - ¿No vienes? -Preguntó al ver la mirada perdida de la rubia, quien ni siquiera parecía prestarle atención.-¿Kara?

- Uh, hola, aquí - dijo, sacudiendo la cabeza para "despertar". - ¿Que dijiste?

- Que voy a volver a la comisaría ... ¿No vienes? Llevamos aquí todo el día. No hay nada más que podamos hacer.

- Creo que prefiero quedarme un poco más - murmuró. - La conversación de Lena con sus padres no fue muy ... Agradable. Ella se salió de control, afortunadamente yo estaba allí. No quiero dejarla sola.

- Vaya, hablas como si fueran amigos desde hace mucho tiempo - observó. - Pero puedo entender tu preocupación. La pobre mujer debe estar bastante perdida. Probablemente tenga un par de tornillos sueltos - El comentario de su amiga disgustó a Kara, que arrugó la nariz.

- ¡No hables así, Barry! - protestó. - Lena no está loca. Pero sí, necesita toda la ayuda que pueda conseguir. Y quiero ayudar.

- El que habló ya no está ... Está bien, me voy. Me da noticias.

- OK.

Barry se fue, dejando a la mujer policía sola en la sala de espera. No exactamente solo, ya que los padres de Lena se quedaron allí, lo que hizo que la rubia se sintiera incómoda porque no los conocía y no tenía una buena impresión de ellos después del desafortunado episodio en la habitación de Lena.