UNFAIR. (Terminada)

18.

DEACON

-¡Bonnie ha aceptado tener una cita conmigo! -exclama Paul viniendo hacia mí con una sonrisa gigante en la cara.

No me gusta esa sonrisa, eso significa que de verdad está feliz y corre el riesgo de poder enamorarse de mi Bonnie.

-¿En serio? -le pregunto de mala ganas.

Cierro la taquilla de un portazo y le miro mal. Se le quita la sonrisa y pone las manos delante de él en modo de defensa.

-Tranquilo tío, la cuidaré como a un tesoro. Esmeralda me ha contado que ella está así porque se le declaró a alguien y ese alguien fue tan gilipollas como para salir corriendo, ¿sabes? No me ha dicho el nombre del chico, pero desde luego le doy las gracias por dejarme vía libre -dice sonriente-. Además, menudo idiota el chico, ¿no? Bonnie es todo lo que los tíos buscamos, es guapa, tiene un cuerpazo, es buena persona y tiene unos sentimientos preciosos.

-Sí, fue un gilipollas -murmuro apoyándome en la taquilla.

Paul se apoya a mi lado y suspira sonriendo. Ahora mismo parece un idiota enamorado y eso me da muy mala espina.

-Le recogeré a las ocho. Me das vía libre, ¿no?

Me mira esperando respuesta, y me gustaría decirle que no, que Bonnie es solo mía, pero fui yo el que la dejó tirada y le hizo daño, así que no tengo ningún derecho a negarme.

-No tienes que pedirme permiso, es ella la que decide si quiere o no.

Asiente sonriente y se despide para después irse. Me quedo apoyado en la taquilla por lo que parece una eternidad, pensando en todo lo que está pasando en mi vida en este momento. Bonnie parece que está tomando un camino diferente al mío y lo peor es que se que fui yo el que la separó de mí siendo tan gilipollas como para irme. Es que no podía creérmelo, y supongo que el primer impulso que me dio fue alejarme para que entendiera que no pasaría nada entre nosotros y que me olvidara. Pero realmente así lo que he hecho ha sido separarla del todo. Es ella la que se aleja de mí, porque no me mira y me ignora por los pasillos.

Aún así, confío en que si Paul intenta besarla o algo de eso, ella se negará porque está enamorada de mí y no de él. Oh dios, doy un egoísta de mierda. Es el típico ni contigo ni sin ti.

Resoplo por mis propios pensamientos y me voy hacia la puerta principal del instituto. Hoy paso de entrenamiento y de clases, estoy cabreado de cojones y tengo una leve sospecha de por qué es. Me voy directamente a la playa para intentar olvidarme de todo, y saco el mini lienzo y las pinturas que tengo en la mochila. Hoy me los tenía que llevar para la clase de arte, así que me ha venido bien y todo.

Comienzo a pintar el mar. Justo lo que veo delante de mí. Lo hago con furia, con la furia que siento conmigo mismo por todo lo que está pasando. Siento que no puedo corresponder a Bonnie como ella quisiera, pero a la vez siento que no soportaré que esté con otra persona o que le bese. En realidad ella quiere besarme a mí, ¿no? Debería ser yo el que lo hiciera. De repente la idea de besarla no me parece tan mala, pero me aparto ese pensamiento porque no está bien.

¿Pero por qué no está bien? ¿Porque hemos estado siendo mejores amigos durante siete años? ¿O porque lo veo como algo poco normal? Pero lo peor es que no debería importarme con quién saliera, de hecho debería alegrarme porque así podría olvidarse de mí, pero es todo lo contrario. Me jode que salga con Paul, y también con algún otro tío en general. ¿Y por qué? Eso es lo que más me molesta. No saber por qué.

En cuanto menos me doy cuenta ya he terminado el cuadro. Sí, está chulo. Dejo que se seque durante algunos minutos y cuando termina se secarse me levanto y me largo de la playa. No soporto ni siquiera estar aquí. Me voy directamente a mi casa y me tiro a la cama para intentar dormirme y no pensar más.

Cuando me despierto ya es de noche. ¿Ya es de noche? ¿Tanto he dormido? Me levanto de la cama hecho una mierda por tanto dormir y miro por la ventana. Miro el reloj, y son las once de la noche. Bueno, esta noche no dormiré en absoluto.

Me pongo a dibujar, pero estoy tan inquieto viendo la hora y pensando en que Paul y Bonnie deben estar juntos que tengo que dejarlo. Me levanto de la silla y me pongo a dar vueltas por la habitación. Son las una de la mañana.

Tengo que hablar con Bonnie, sí, tengo que hablar con ella y decirle que quiero que volvamos a ser lo de antes. No soporto no estar con ella y me estoy comiendo la cabeza pensando en ella. Me pongo unos pantalones cortos de deporte y una camiseta cualquiera y me voy corriendo calle abajo dirección a su casa. Cuando estoy enfrente, observo los árboles y toda la vegetación que hay alrededor del paseo que lleva a su puerta. Doy pasos largos, hasta que veo algo que me deja de piedra. Me quedo quieto en medio del camino y observo cómo Paul y Bonnie se están besando. La ira me invade por completo.

Las manos de Paul están en las caderas de Bonnie, y las manos de ella están en su pelo. Se besan con lentitud, como si no quisieran separarse nunca. Y por un momento envidio a Paul. No digo ni hago nada, tan solo los observo sin poder apartar mis ojos de ellos. Están tan metidos en su mundo que no han reparado en que estoy aquí.

-Quiero una segunda cita contigo -dice Paul cuando se separa.

Se miran durante unos segundos en los que parece que Bonnie se lo está pensando.

Vamos pequeña, di que no, di que no.

-Vale -dice al final.

Me llevo las manos al pelo y me lo echo hacia atrás. Joder, joder. Parece que por fin reparan en mí, porque Paul me mira y después me mira Bonnie. Se instala un incómodo silencio en el que los tres nos quedamos quietos y sin saber qué decir.

Es lo mejor, sí. Lo mejor es que ellos dos estén juntos y yo me quite de en medio, porque si no soy capaz de corresponderle, ella merece que la quieran de la forma que necesita. Sin decir nada y con el corazón en la mano me doy la vuelta y me voy corriendo. Me voy con el pensamiento de que lo mejor es que deje en paz a Bonnie y no le de falsas esperanzas. Quizá comenzar una relación con Paul es lo que necesita. Quizá lo que necesita es que me vaya de su vida.