BONNIE
Sábado por la noche. Esta semana ha pasado demasiado lenta. He seguido sin hablar con Deacon, y él tampoco ha a intentado contactar conmigo, así que supongo que algo muy malo se está cociendo en nuestra relación. No han faltado las miradas algo recriminatorias de parte de los dos. A veces sosteníamos la mirada, pero pronto la apartábamos porque... no sé. No sé si está enfadado conmigo o qué mierda le pasa, pero no soporto esta situación. Aún así no le he querido hablar yo por miedo o porque, simplemente, no sé si lo mejor es coger distancia. Espero que no sea eso último. No me imagino mi vida sin él. Sea de la forma que sea quiero que sigamos juntos.
Hoy, ya que es una fiesta algo más grande y seria, me he decidido poner un vestido. Sí, sé que un vestido de fiesta para ir a la playa es un poco tontería, pero no sabía qué otra cosa ponerme. Sí que me he puesto unas converse para poder ir cómoda. He quedado con Paul a las nueve de la noche. Paul y yo hemos estado toda la semana juntos en el instituto, y me ha robado varios besos que ha visto Deacon. Me ha tratado como a una reina y no me ha desatendido ni un segundo. Es una persona preciosa. No tengo ninguna duda de eso. Va despacio, como él dijo. No me atosiga, no me besa para conseguir algo más, y no me hace daño. No como Deacon. Él no sale huyendo.
En cuanto aparca el coche delante de mi puerta salgo corriendo hacia él. Me monto en el asiento del copiloto y le sonrío.
-Hola.
-Hola guapa.
Me agarra de la mejilla y me da un beso en los labios dulce y corto. Pone el coche en marcha de nuevo y sale calle abajo hacia el aparcamiento de la playa. Vamos hablando y escuchando música y el viaje se hace cortísimo. Vamos caminando tranquilamente hacia donde hemos quedado en vernos en la playa y cuando llegamos nos saludamos con los que conocemos. Hay por lo menos cincuenta personas bebiendo tranquilamente con la música puesta. Nos pasan unas cervezas y nos mezclamos con la gente. Mark me abraza con fuerza y me da mil besos.
-Te he echado de menos bonita -me dice cuando se separa de mí-. Estás guapísima.
-Lo mismo digo. ¿Todo bien?
-Todo bien -asiente con la cabeza-. Ven, quiero que conozcas a alguien.
Me agarra de la mano y me lleva hacia casi la orilla de la playa, donde hay un grupo de tres personas. Dos chicos y una chica. Mark me pone delante de él y me pone las manos en los hombros. Una chica preciosa de pelo rojo y ojos oscuros se gira hacia mí y me sonríe ampliamente.
-Bonnie, quiero presentarte a Aurora. Ella es... -se aclara la garganta y respira hondo-. Mi novia.
Le miro con los ojos muy abiertos y luego vuelvo a mirar a Aurora. Me sonríe con algo de timidez, pero estira el brazo para que le estreche la mano. Es tal mi ilusión por que Mark tenga alguien que le quiera que sin pensarlo demasiado me acerco a ella y le doy un abrazo. Le pillo un poco desprevenida, pero enseguida rodea sus brazos por mi cuerpo y me abraza fuerte.
-Encantada de conocerte, Aurora -digo cuando me separo de ella.
-Igualmente, Bonnie. Mark me ha hablado muchísimo de ti, le tienes loco.
Me río y Mark se rasca la nuca con una sonrisa.
-Es como mi hermana y tengo un capricho con ella que flipas -dice Mark sonriente.
Aurora y yo nos quedamos un rato hablando y conociéndonos un poco. Parece que Aurora era una amiga de Valeria y se conocieron hace unos meses. No es de aquí, así que viene cada cierto tiempo. Comenzaron a hablar y a llevarse bien y de ahí empezaron a salir juntos. Aurora es muy dulce y me alegro muchísimo de que Mark le haya encontrado. Acabo volviendo con Paul, que está hablando con un chico y me pongo a su lado. Me mira y me sonríe con brillo en los ojos.
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UNFAIR. (Terminada)
RomanceInjusto. ¿Qué es injusto? Injusto es enamorarse de un chico prohibido. Y esta vez no me refiero a uno de mala vida que me trata como si fuera una mierda, no, realmente me refiero a uno que es todo lo contrario que eso. Es atento, amable, de buenos h...