Marido por accidente.

Capítulo 36: Harry borracho, siempre dice la verdad.

Elizabeth.

--Por favor, por favor, por favooor --ruego a Harry sentada en la cama de nuestro cuarto. Sí, nuestro. Desde que me dejaron en L.A con la banda en lugar de Nueva York ya que los idiotas debían adelantar un par dw canciones y arreglar no-se-que-cosas del proximo tour, y claro esta, para seguir con la farsa de que somos dos adolescentes enamorados, Harry nos obligó a compartir habitación.

Harry es, ¿Cómo describirlo? Desordenado. Todo el cuarto tiene ropa tirada por todos lados, de ambos, si, yo soy organizada pero con él, me gana el desorden. De todas formas no hay nada peor que dormir con él, porqué cuando no está en plan romantico/sexual cómo cualquier otro chico, duerme como una morza con cuellos de jirafa como extremidades y ronca como rugido de león y ahí es cuando todo lo sexy se le escurré de entre los largos dedos. Y no voy a malpensar eso.

--¡Callate! --responde por sobre el ruido que provoca escuchar a Skrilex a las diez de la mañana, pero esa es otra cosa que hace Styles.

--¡Harry! Un vuelo no puede tardar mucho, a demás ustedes me trajeron contra mi voluntad y sin siquiera avisarme. ¡Eso te hace un secuestrador Traidor! --le grito para que escuche por sobre el ruido, pero que mi voz no llegué al pasillo.

--Ya... Termino... --Su voz se oye como si perdiera fuerzas. No puedo hacer otra cosa que reírme con ganas.

Joder. Que no le cuesta nada.

Cinco minutos después en los que yo sigo con mi estúpida e insistente cansionsita del por favor Harry abre la puerta del baño, ya no hay música y solo se oye el sonido de la cadena y la mochila recargandose sumado al spray aromatizante. Frunzo la nariz, sip, él estaba en el baño, cagando, con música. Especificamente Skrilex.

--Fuchi. Estoy segura de que si tus fans se enteran de que el gran guapo y sexy Harry Styles ronca como morza, patea como caballo, caga con música y tan fuerte cómo si hubiera comido queso chedar con porotos y leche, se les quitaria toda esa obsesión por ti, a demás y perdona que te diga, no te ves biem por las mañanas. --Le digo viendo como se tira a mi lado solo con boxers negros demasiado señidos.

--Agh, primero, princesa, tú no cagas con olor a flores ni estas que deslumbras cuando despiertas y segundo, mis nenas, que no son fans, son directioners, saben todo eso y me aman igual. A demás, a nadie le gusta escuchar como los otros cagan y ¿que mejor que poner música fuerte?, funciona para todos. Ahora, por favor, deja de mirar a mi amigote --me contesta. Frunzo el ceño, no miro su estúpido pene, joder, ¿le da pudor decir la palabra? Tiene diecinueve, dios. Pero es que tiene una manchita que...

--¡HARRY TE MASTURBASTE EN MI CAMA! ¡SUCIO, PERVERTIDO DE MIERDA! --Le grito saltando de la cama, y sintiendo a flor de piel los gemidos con los que creí que había soñado antes de despertarme asqueada. Harry coloca sus brazos debajo de su cabeza.

--Tecnicamente, es nuestra cama. ¿Qué querías que hiciera? Levantarte con una erección, con frío y sin poder bajarla, duele después de unos minutos, ¿sabes? A demás estabas dormida y no fue como si estubiera pensando en ti o justo sobre tu cuerpo, eh.

Agh, asco. Ew. Ew.

--Ew. Quiero que cambies las putas sabanas, ¿Cuantas veces lo hiciste? --El mueve una mano sugerente, joder --¿toda la puta semana? ¡Dormí en tu asqueroso semen! Ew ew ew ew --me retuerzo como paranoica, moviendome de un lado a otro sintidome sucia y bañada en esperma. Ewwwww.

Harry ríe cómo desquiciado.

--Tampoco es tan así...--murmura con voz lenta.

--¡Te juro que voy a hablar con todas las revistas de chismentos de Los Angeles y que se enteren de que tengo un novio falso que es jodidamente asqueroso! --murmuro/grito.