El diario de mi vida

Lo bueno siempre es lo que vendra...

Que razón empieza a tener esa frase de 'cuando una puerta se cierra, una mejor se abre' pero yo aún no me había dado cuenta.

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Cuando sentía que todo el mundo estaba desapareciendo, que estaba sola en la playa, rota y viendo como lo que más quería en mi vida era feliz, como eras feliz sin mi...Martina me abrazo, me agarro con fuerza intentando hacer que cada uno de los pedazos en los que me había roto se juntarán intentando reconstruirlos, intentando que este vacío que quedaba dentro de mi se llenara, pero lo único que consiguió fue ver como poco a poco me iba rompiendo un poco más, como las lágrimas iban saliendo una a una de dentro de mi y sin yo decirla nada, recuerdo que me dijo:

-Es hora de que te quieras a ti misma, todo lo que le has querido a él.

-Quererle a él era fácil Martina, él me hacía mejor, me quería por él y por mi...

-Si ha sido capaz de hacerte tanto daño, es que quizás nunca te ha querido tanto como te dijo, porque cuando se quiere, no se daña....

Sentía como las palabras de Martina me hacían más daño del que yo misma imaginaba que me llegarían a hacer.

Cuando llegue a casa, busque la caja en la que había guardado todas las cosas, todos los recuerdos, todo lo que fuimos y aún, sin saber como tuve tanto valor, lo tire todo a la basura, no quería tener más recuerdos, no quería saber nada más de todas las mentiras que me había dicho durante tanto tiempo.
Me puse los casos y entre canción y canción, me paraba a pensar que sería a partir de ahora de mi, que iba a hacer a partir de ahora, así que, abrí mi cajón y me puse a mirar detenidamente la oferta que me había propuesto mi tía. California.

Unos días antes de dejarlo Alex, mi tía se paso por mi casa para darme el folleto con una de las mejores universidades de psicología, sólo que esta se encontraba en California. Desde que era pequeña, la dije que quería estudiar en la mejor universidad de psicología y ella, encantada de darme ese capricho por mis 18.
Al estar con Alex, no se me pasó ni por la cabeza la idea de irme a California a estudiar, pero después de dejarlo se me había pasado por la cabeza unas cuantas veces, el cambiar de aires, de amistades y sobre todo, el estudiar lo que quería.

Después de pensarlo unas cuantas veces me dí cuenta de que por mucho que quisiera, no me podía seguir quedando aquí, que quedarme aquí significaría no olvidarle nunca y justo eso es lo que más quería hacer en estos momentos....