CAPITULO 24: ESTAMOS AQUI

4.5K 278 6
                                    

Narra Ana:
Siento un dolor pesado en mi cabeza, en mi cuerpo...
Apenas puedo abrir los ojos, puedo sentir la respiración de alguien que está conmigo
-Ana...tienes que seguir luchando-llora, ¿es Alex? ¿Alex está llorando? ¿Qué me ha pasado?-Martina te echa mucho de menos. Despierta por favor.
Joder, porque la gente llora y me echa de menos, y yo que ni abrir los ojos puedo. Quiero hablar, quiero decir que todo está bien.
-Todo se acabó, todo Ana-me dice, a la vez que acaricia mi mano-Rompí el contrato, te quiero muchísimo, tienes que despertar de una vez. Vamos mariposita, hazlo.
-¿De verdad?-intentó pronunciar, abro lentamente los ojos que pesados son. Observó la habitación, conectada a mil aparatos ¿Qué hago aquí?
-Ana, ¡despertaste!-comienza a besar mi mano, mientras llama al doctor-¡Doctor! ¡Doctor!
-¿Qué hago aquí?-intento moverme, pero un dolor atraviesa mi espalda, hago una mueca de dolor, la cual alerta a Alex.
-Ana, espera, ya viene el doctor.
-Buenos días Ana, que bueno que despertarte-el doctor entra en la habitación y comienza a observarme-¿Recuerdas algo del accidente?
Un recuerdo llega a mi mente, yo nerviosa, los frenos no iban, el camión llegaba a mi, y yo no podía hacer nada.
-Los frenos no iban-siento una presión en el pecho.
-Ana debemos hacerte un scanner completo-asiento-aún no sabemos la certeza en la que ha podido afectar al bebe-Mierda, el bebé ¿Alex? Mi mirada se dirige a Alex, quien está apoyado en el umbral de la puerta, con su mirada se que está enfadado, pero de una forma u otra intenta sonreírme.
-¿El bebe está bien?-pregunto angustiada.
-Vamos a realizarte una ecografía y comprobarlo-asiento-nos vemos en un rato. No te muevas en este tiempo, avisaré a tu familia.
El doctor sale de la habitación, y nuestras miradas se cruzan, se que le debo una explicación.
-¿Por qué no me lo dijiste?
-Lo siento.
-No te puedo echar nada en cara, porque yo me lo gane.
-Te lo iba a contar, no sabía cuando.
Se acerca a mi y se sienta en el mismo sitio donde estaba.
-Shhh...todo está bien-Alex se acerca a mi y besa mis labios a lo que los respondo. Cuanto echaba de menos esto.
-No he tenido nunca tanto miedo, pensaba que te perdía.
-Estoy aquí-cojo su mano y la llevo a mi barriga-Estamos aquí-y sonríe.
-Hija, ¡que susto nos ha dado! Gracias a dios estás bien-mi madre corre a abrazarme al que se le une al abrazo mi padre y mi hermano.
-Pequeñaja, que susto nos has dado.
-Estoy bien-logró decir por fin.
-Ana ¿estás lista?-asiento-Bien, les pido por favor quedar salgan todos de la sala.
-Alex no, por favor-miro que Alex está sonriendo. Al final de cuentas no quiero que se vaya, quiero que conozca a su bebé por fin.
El doctor comienza a echar el gel y comienza poco a poco a remover por mi barriga, haciendo que el monitor se encienda y por fin podamos ver al bebé.
Miro a Alex, quien está anonadado, es la primera vez que asiste a una cita de estas, con Martina no pudo.
-Ahí está su hijo-comenta el doctor-Vamos a escuchar su latido-el doctor aprieta una tecla y por fin podemos escuchar su pequeño latido. Alex está completamente embobado-Tengo que ir a por el informe, vuelvo en un minuto-el doctor sale.
-¿Ese es mi hijo?-asiento.
-O hija, aún no se sabe.
Sin esperar Alex se acerca a mi y atrapa mis labios. Echaba tanto de menos su olor.
-Gracias por esto-sonrío.
-Doctor ¿cómo está el bebé?-pregunto una vez el doctor ha entrado.
-El bebé presenta que está correctamente, me preocupa esto-señala en la pantalla una pequeña mancha-esa mancha.
-¿Qué es eso doctor?-pregunta Alex.
-Por todo lo que presenta es un hematoma coriónico, como veis-señala la parte del monitor-una membrana que rodea el embrión, y la pared uterina. Es lo más común en el primer trimestre, no suele aparecer, pero muchas mujeres si lo pueden presentar.
-¿Es grave?
-No Ana, pero si debes hacer reposo absoluto, de ahora en adelante te recetaré unas pastillas, y no quiero nada de movimientos bruscos.
-Tranquilo Doctor, yo me ocupo-confirma Alex.
-Estos dias debido a tus circunstancias te quedarás hospitalizada. Una vez que estés dada de alta, te daré cita para ir controlando este embrazo-asiento.
El doctor sale de la habitación.
-Me toca ser tu enfermero-sonrío y Alex ayuda a bajar mi bata ya que por mis dolores de espalda no puedo sola.

Volver a sentir MARIPOSAS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora