¿Hilo rojo del destino? ¡Es una estupidez! [Spartor]

Capitulo 12

Un albino de ojos bicolor se encontraba caminando por el parque que se encontraba por su colegio, tenía cierta compañía de un chico de cabellos azules y lentes de sol.
Sin embargo, después de un rato, el peli-azul tuvo que irse puesto a que para el se le hacía tarde, claro que solo era una excusa para ir a su casa y dormir.

El albino lo conocía bien, en tan poco tiempo habían formado una amistad grande; cuando el de lentes de sol se fue del lugar, el de ojos bicolor suspiro y borró su sonrisa.

— ¿Que mierda me pasa? .– Se pregunto a si mismo, desde hace unas semanas que o bien, apenas conoció a ese peli-azul.

No paraba de pensar en su amigo, quería estar cada vez más cerca de el, eso era lo raro. Nunca se había sentido de esa forma con alguno de sus amigos, bufo tratando de calmarse.

Al principio creyó que era solo por qué ese chico le parecía gracioso y agradable, pero después al pasar varios meses con ese chico le hacía sentir ¿Raro?; Si, quizá solo sea su imaginación. Pero se sentía solo cuando el mayor se tenía que ir.

— Rius .– Escucho la voz de cierto peli-azul.– ¡Rius! .– La voz se escucho ahora un poco más aguda.– ¡Mierda, Ramón! .– Escucho mejor la voz haciendo que saliera de su pequeño transe divisando a quién tenía al frente.

— ¿Sparta? .– El de cabello albino negó con la cabeza tratando de centrarse.– Lo siento, me distraje .– Se disculpo apenado.

— Hombre, se nota .– Dijo sarcástico, dio una risa leve.– Te estuve hablando desde hace Cinco minutos y no contestabas .– Se cruzó de brazos con una sonrisa.

El de cabello blanco desvío la mirada un tanto avergonzado, el castaño negó levemente y bajo la mirada, al alzarla pensó en el plan del pelirrojo.

— ¿En qué pensabas?, Si se puede saber .– Pregunto el de cabello castaño poniendo nervioso al de ojos bicolor.

— E-en nada .– Bajo su mirada y comenzó a jugar con sus manos, el castaño amplio su sonrisa al conseguir lo que quería.

— Si no fuera nada, no estarías nervioso .– Guardo ambas manos en su sudadera y ladeó la cabeza.– Vamos, dime, ¿En qué pensabas?, No puede ser nada malo .– Insistió, el albino suspiro alzando la mirada.

— Quizá me ayude a saber que pasa .– Pensó el albino, hablarlo no sería malo.– Estaba pensando en .– Balbuceo la última palabra o bien nombre.

— ¿Que? .– Pregunto confundido.

El albino suspiro y apretó los puños.

— En Timba .– Dijo en un tono muy suave y bajo, desvío la mirada con cierto tono carmesí en sus mejillas.

— Rius, habla más fuerte, no te escuché .– Excuso buscando que el contrario se enojase.

— ¡Estaba pensando en Rubén joder! .– Exclamó, al terminar su frase cubrió su rostro con sus manos para ocultar su rojo intenso en sus mejillas.

— Wow .– Pronunció intentando sonar asombrado.– ¿Enserio? .– Preguntó, el albino asintió sin quitar sus manos de su rostro.

— No se lo que me pasa ¿De acuerdo? .– Explico, el castaño se quedó callado esperando a que el albino continuara.– Últimamente he pasado más tiempo del que debería con el .– Dejo de cubrir su rostro y mostró su sonrojo.

— Me gusta pasar el rato con Rubén es divertido y agradable, pero cuando se va me siento vacío, es muy raro pero ¡Ay Andrés ayudame! .– Se acercó al castaño y coloco su cabeza en el hombro del antes mencionado.