Capitulo 14

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Y una mierda tras otra debía aparecer, ahora Yugyeom se sentía mas asqueado de lo normal y su cuerpo sufría espasmos.

¿Que había sucedido?

Se sentía tan bien con Jackson que olvido por completo su condición, fue demasiado tarde cuando su cerebro proceso lo que había hecho, lo que pensó y lo que deseo, le fue inevitable correr al baño tritando, como si esa noche hiciera mas frió de lo normal.

Su estomago no quiso albergar la comida digerida horas antes, sentado en cuclillas, las arcadas de dolor y desgarramiento lo invadieron, sus gritos silenciosos preocuparon a Jennie quien no se despegaba de la puerta, Yang estaba melancólica, ver a Yugyeom así le recordaba el pasado.

—Yugy— llamo Jennie.

Yugyeom no era consciente de nada, justo en este momento el dolor era de menos, su asco incrementaba con mayor frecuencia, no podía abrazar a una persona sin sentir que la contaminaba de su "enfermedad"

Que frió, pensaba al mismo tiempo que restregaba su cuerpo con la esponjita, los espasmos iban y venían, el dolor pronto se volvería insoportable, su tristeza invadió su mente, de un momento a otro empezó a llorar, dejando escapar todo lo vivido, tratando inútilmente de aligerar su dolor.

Habia olvidado parte de su pasado, pero Bambam estaba dispuesto a hacerlo ver nuevamente su ruina.

Lo sabia, presentía que su padre pronto perdería la cabeza y lo juzgaría igual que hace quince años, lo vería con asco y lo enviaría a rehabilitación, separandolo de su amado Jackson.

Jennie estaba al borde del desespero, por mas que llamara Yugyeom parecía no escuchar, estaba preocupada, tenia aquel desagradable sabor de amargura, sus entrañas se removían inquietas, tratando de advertirle.

—¡Abre la puerta!

Yang tomo de los hombros a su pariente, intentando dar su mejor sonrisa le dijo —Yugy no va a salir hoy— los ojos de Jennie se abrieron como platos —Es... cuando se siente mal deja que el agua lo limpie.

Aunque no lo notara, Yang tenia la mirada perdida y el corazón estrujado, deseaba llorar, tantos años habían pasado y... Una vez mas, estaba cayendo —Yugy— susurro Jennie —Tengo que ayu-

—Por favor Jennie— suplico apunto de llorar —No sabes cuanto sufre— y las lagrimas no se detuvieron —Por favor... para.

Sorprendida de ver tan vulnerable a la siempre sonriente Yang, desistió, tomando a su prima decidió ir a por un café y intentar calmar su intranquilidad.



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Bambam miraba a su padre sonreír cual demonio egocéntrico y malvado —Este país da asco, pero si tanto deseas a ese mocoso... Me encargare de llevarlo con nosotros.

Las puertas de la mansión Kim se abrieron en todo su esplendor, dando paso a la verdadera pesadilla, Bambam no podía estar mas feliz, era un sádico y codicioso hombre, estaba perdidamente fuera de control, su deseo por estar con Kim eran lo suficientemente grandes para considerarse peligrosos.

Padre, madre e Hijo ingresaron a la mansión siendo recibidos por el señor Kim, quien los invito a sentarse y charlar de su nuevo contrato —¿Entonces? ¿Que te parece?

La edificación y el negocio eran rentables, pero se necesitaba una alianza firme para poder terminar con el negocio —Es apropiado— concluyo Kim —Mi hijo sera el encargado, de momento deben esperar hasta que mi hijo este casado, no planeamos retrasar su boda.

Bambam gruño por lo bajo, sus padres le vieron enternecidos —No seria mas sencillo que la boda fuera aplazada solo unos días mientras conoce el terreno.

El señor Kim y la esposa del señor Kim rieron como si les hubieran contado el mejor chiste del mundo —Eso no sera posible— acorto dejando de reír —Mi hijo ha decidido sentar cabeza ¡por fin! si desean pueden esperar pero no planeo atrasar los planes.

Bambam estaba por protestar mas fue detenido por la voz de alguien mas —Padre— elegantemente el hombre ingreso a la sala, haciendo una reverencia a la familia invitada procedió a saludar —Buenas tardes, es un placer tenerlos aquí.

—Valla tu hijo esta muy apuesto— alabo la madre de Bambam —El placer es nuestro.

Yugyeom sonrió a medias, dándose media vuelta se acerco a su padre —Hoy los Jeon planean hacer una cena especial y desean que estemos con ellos, los abuelos de mi prometida quieren conocerme padre.

Su padre sonrió amplia-mente —Por favor hijo, diles que estaremos encantados de asistir, recuerda llevar los chocolates que le compraste a tu prometida.

Yugyeom asintio sonriendo —Estará encantada, gracias por ayudarme a elegirlos padre. Con su permiso me retiro.

Bambam tenia un tic en el ojo, ¿Yugyeom estaba fingiendo o era felicidad real? Tenia la mala impresión de no estar satisfecho, de hecho pensaba fervientemente que Yugyeom solo fingía, aunque se veía muy natural... ¡Maldición!

Bambam se levanto de su lugar dispuesto ir con Yugyeom, mas su padre que era mas prudente le detuvo —Espera un poco, ya casi terminamos el trato.

El señor Kim tenia sus motivos para alejar a Yugyeom de ellos, aunque el dinero era prestigioso y traería una estabilidad a futuro, no se arriesgaría a dejar que su hijo recayera en la enfermedad.

—Este negocio es importante señor Kim— la mirada del invitado cambio radicalmente, dándole mayor seriedad al asunto —Tengo entendido que los Estados Unidos quieren hacer el mismo tratado, si logran convencerlos perderíamos una gran oportunidad de desarrollo.

—Eso es un problema.

Su esposa analizo unos cuantos puntos y luego sonrió —Podemos hacer un apartado el Viernes Amor, Jungkook puede ir con nuestro hijo es muy bueno en detalles y terreno, ademas Jackson es un excelente chico de finanzas, eso nos facilita las cosas.

El señor Kim sonrió dándole la razón —Este viernes mi hijo viajara, estará aquí el lunes, el junto a su cuñado y amigo verificaran la tierra y el contrato.

—¡Es un trato! Mi hijo sera el encargado de llevarlos.

Bambam quiso protestar, no, simplemente no deseaba tener a un mocoso junto a un posible enamorado de Su Yugyeom, necesitaba gritarle al mundo que Yugyeom era suyo, nada ni nadie le impediría estar con el.

Antes de poder hablar, su madre le dio una sonrisa y apretó con disimulo su mano, entendiendo el mensaje callo sus quejas y se despidió con respeto de la familia.

Después de eso, con una firma y un buen apretón de manos, ambas familias partieron de la mansión, Yugyeom iba con la frente en alto, viéndose espectacular, sus padres le sonreían como unos enfermos.

Bambam detestaba a ese sujeto —No quiero que Jackson este en el viaje— reclamo lo antes posible —Ese maldito se atrevió a besar a mi Yugy.

Su padre rio divertido, dándole un apresaron en el hombro le sonrió —Yo me encargo de eso.

Maldito seas pasado.

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