Cinco Razones Para Quedarte [Libro II]

PREFACIO

Kristen:

Estoy muy preocupado por ti, creo que nunca había estado tan preocupado por alguien.

Tuve que llamar a tu madre, mi mamá dijo que lo hiciera. No es el modo en que quería conocerla, seguro que tampoco quería escuchar la noticia así de repente cuando le marqué. Te juro que parecía que le iba a dar un ataque al corazón, luego cuando sustituí la primera sorpresa por la gravedad del asunto por el que llamaba, creo que no le importó tanto y sí temí que le pasara algo, así que también hablé con tu hermano mayor.

Vienen en camino, aún no los conozco, pero cariño, necesito que despiertes antes de que lleguen porque te juro que moriré de vergüenza.

Seguro esto es tonto, el simple hecho de escribirte mientras duermes es bastante tonto, pero como no estoy seguro de que me escuches como algunas personas aseguran que lo hacen las personas inconscientes he decido escribir porque al final terminarás leyéndolo y no quedará en el aire.

Si tengo que escribirte las razones por las que debes quedarte lo haría, porque no te vas a ir, no hoy, no ahora, mucho menos en estas circunstancias que me hacen sentir tan culpable, incluso si Maya me aseguró que no es mi culpa se siente como si así lo fuese.

Porque dime, Kris ¿qué haría ahora que te has robado mi corazón?

Aún te quedan mañanas para despertar a mi lado y yo despertar junto al tuyo.

Se supone que le diríamos a todos, juntos, tú y yo. No que iba a dar la noticia solo.

Cocinar es mucho mejor a tu lado. No por el desastre, sino porque me gusta cuánto amas el resultado.

La espontaneidad de nuestra relación y la conexión contigo no quisiera perderla nunca.

Y el simple hecho de que te amo es suficiente para querer que te quedes.

Esas solo son cinco razones para quedarte, no me hagas escribirte más que luego termino siendo muy cursi.

Por favor, despierta pronto.

Ryder.