8| MAYA

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¿Cuánto dura el duelo de un amor? El vacío que deja un corazón roto o el  impulso de tomar el teléfono y llamarle porque ya él no lo está haciendo, no desde que le puse un alto a lo que teníamos

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¿Cuánto dura el duelo de un amor? El vacío que deja un corazón roto o el  impulso de tomar el teléfono y llamarle porque ya él no lo está haciendo, no desde que le puse un alto a lo que teníamos.

Se sentía como si hubiera tomado una mala decisión, así lo sentía mi corazón, incluso si mi razón sabía que solo había hecho lo correcto. ¿Por qué no podía dejarlo fuera de mi cabeza? ¿Por qué siempre tenía que estar pensando en él? No lo tenía tan arraigado en mi mente hasta que simplemente ya todo había terminado.

El profesor tiene media hora hablando sobre  algún tema que seguramente es fundamental para la  materia, yo no he podido escuchar absolutamente nada de lo que ha dicho porque su imagen no sale de mi cabeza.

Su sonrisa, el sonido de su voz mientras recitaba algún poema, el sabor de sus labios sobre los míos, también el dolor que causaron sus palabras al llegar a mis oídos "no lo sé". ¿Cómo tres simples palabras podía doler tanto? No tenía idea.

Garabateo algo sin sentido a un lado de mi cuaderno mientras vuelvo mi mirada hacia el profesor una vez más. Fui demasiado estúpida. ¿Cómo puedo enamorarme de alguien que me escribe poesía? ¿Por qué siquiera me gusta la poesía?

—Tierra llamando a Maya —vuelvo mi vista a Jules y alzo una ceja—. ¿Dónde tienes la  cabeza? Ya se acabó la clase.

Pestañeo y miro hacia el pizarrónen blanco, la mesa del profesor está ya vacía y los alumnos abandonan el aula.

Mierda. Tiene razón.

—Me distraje.

Entro todas mis cosas en el bolso con rapidez como si alguien estuviera esperandome para luego seguirla hacia afuera, para mi buena suerte no tengo otras clases el día de hoy.

—¿Quieres contarme?

No sé lo he dicho, en realidad la única que lo sabe es Ivy. Me he estado abrumando a mi misma durante demasiado tiempo.

—Aaron y yo terminamos.

—¿Qué? —la miro un momento—. ¿Por qué? ¿Qué te hizo?

Me enamoró y no siente lo mismo que yo por él porque aun no puede superar a su ex. Pero solo lo pienso, no lo digo, se  siente tan vergonzoso decir esas cosas, se siente incluso vergonzoso solo pensarlas.

—No me hizo nada.

—Eso no quiere decir que hayan terminado solo por amor al arte.

—Es mejor así —digo no queriendo hablar de ello—. El necesita su espacio y yo el mío.

Jules no parece muy convencida de mis  palabras, sin embargo asiente porque entiende que no es algo de lo que quiera hablar por el  momento.

—Cuando estés lista estaré aquí para escucharte, ¿si? —dice tomando mis manos, la  sujeto.

Cinco Razones Para Quedarte [Libro II]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora