Capítulo 10

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Estaba mirando las delgadas marcas blancas de sus muñecas a sus brazos, tuvo que remover las mangas largas para apreciar mejor de ellas y recordar cuando anoche estaba encendidas por su voluntad.

El peliblanco llamó a la puerta de su habitación con unos golpeteos de sus nudillos.

-Entra -Murmuró aun mirando sus marcas.

Este entró mirándola sentada en medio de la cama con sus piernas pegadas a su cuerpo y su mirada en sus muñecas.

-Buen día ¿Cómo te sientes?

-Desconfiada -Murmuró, levantó su mirada y suspiró -Lo que hiciste anoche te lo agradezco mucho.

Jack negó a modo de que no agradeciera, tomó asiento frente a ella a la orilla de la cama.

-¿Nunca te había pasado?

-No, es que....-Ella pensó un momento -Cuando siento una amenaza a veces las siento cosquillear, es como si fueran a atacarme y como si fuera un sistema de defensa que me cosquillean las marcas. Anoche tuve una pesadilla tan fuerte que.......que seguro me hizo estar a la defensiva.

-¿De ve-verdad? -Jack ahora miró angustiado hacia abajo tras recordar que soñó con Pitch y la última vez que soñó con él fue porque Black desarrolló sus dones y podía atacar desde pesadillas - ¿Con qué soñaste?

-No recuerdo -Con su familia – ¿Quieres salir a correr hoy?

-No, gracias.

-Tomaré una ducha -Dijo poniéndose en pie -Ahora bajo para almorzar.

-Claro -Jack peinó sus cabellos ahora mirando a los pinos con esas gotas de la lluvia de anoche, Elsa miró a esa dirección y de nuevo a él.

-Ejem.

-¿Qué?

-¿Podrías salir? Tomaré mi ducha.

-Ah claro, perdona -Jack se colocó el pie, pero antes de salir se giró para sonreírle -Anoche tomamos nuestro primer baño en tu tina.

-Fuera -Elsa sonrió tras cerrar la puerta de su baño y provocarle una risa a Jack.

Cuando almorzaron fue en le mesa de jardín trasera a unos pasos del jacuzzi. Compartieron panes tostados con quesos derretidos y huevos estrellados, antes tuvieron que secar los asiento y la mesa debido a la lluvia de anoche y hoy continuaba el cielo nublado.

Elsa acercó la taza de té de frutos que preparó y sorbió con satisfacción.

-Estamos algo tensos después de lo de anoche ¿No crees? -Jack tomó asiento junto a ella.

-¿De verdad? -Elsa levantó una ceja con sarcasmo, en otro momento o en otro día antes se hubiera quitado de su lado, pero ahora le agradaba su cercanía y después de sentir cómo anoche la ayudó la hizo sentirse segura también.

-Podríamos entretenernos en algo.

-¿Y qué sugieres? -Elsa se encogió de hombros - ¿Jugar cartas? ¿Pintar?

-Lo que yo sugeriría te haría afortunada -Le mencionó con una divertida sonrisa dándole a entender a Elsa su intensión y a lo que respondió con un empujón a su hombro.

-No estés de bromas.

-No lo estoy -Respondió y Elsa le iba a fulminar con la mirada a lo que Jack soltó una risa -Ya ya en serio, sugiero que salgamos esta noche.

-No.

-¿Has visitado antes San Francisco?

-No, pero no me......

Guardiana de él. Primera ParteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora