Capítulo #10: "Sobre Protección"
*Punto de Vista: Alexander Cortés (Alex)*
Me he pasado la noche aquí, sentado, en un rincón, viendo cómo Mel se destruye, poco a poco, con cada trago. Yo he traído una bebida tras otra. No he querido hacerla enojar, ya hablaremos hoy, pero de momento necesito una ducha, tengo clases todo el día y ella también. Pero creo que no irá y no me apetece dejarla sola. La tomo entre mis brazos cargada y la llevo hasta la ducha, dejo que caiga sobre su cuerpo y el mío agua fría.
— Ah, ¿qué haces? — me mira como si hubiese hecho lo peor del mundo — Esta fría.
— Y la necesitas. La necesitas más que yo. Hay clases hoy y te has dormido en una bañera. Necesitas tomar una ducha y vestirte para asistir a la universidad — mi voz suena gruñona, quizás por no dormir bien.
Estuve cuidándola, mi mano en su cabello para que no se ahogase. Trayendo una tras otra botella. Hasta qué se durmió casi a las tres de la madrugada. Y estuve despierto luego de eso observándola para que nada le pásese, vacíe la bañera pero no me dejo moverla.
— No iré — su voz somnolienta.
— Por supuesto que vas a ir — aparto la mirada
— No, no lo haré — tomó una toalla para su pelo y otra para su cuerpo.
— Tomate un café con leche, no debes refriarte — tome también dos toallas. Seque mi cabello rojizo y ya caía por los hombros.
Me aliste para salir ya. Aún siendo temprano. Baje las escaleras y me encontré con una Mel acostada sobre la mesa, tumbada y con un tazón de cereal y en una de sus manos una taza de chocolate. Al menos me hizo caso.
Fui hasta la nevera, tome el jugo de frambuesa, y me serví un tazón de cereal con leche.
— ¿Estarás bien sin mi enana? — Me observa con esa mirada de tristeza y de no te vayas — te portas bien, me escribes, y te cuidas.
— Demasiadas cosas para hacerlas yo sola — se queja y me observa con esos ojitos marrones, si cabello suelto recién lavado, su olor a fruta.— Quédate conmigo — niego con la cabeza, sabe que no podría faltar a clases, y hoy tengo un examen.
— Tengo un examen — tomó su rostro en mis manos y beso varias beses su boca y luego su frente. Lo que la hace sonreír — Tenemos algo de lo que hablar.
— ¿Ah si? — ladea la cabeza y vuelve a arrugar su nariz.
— Si, algo muy importante, cuando regrese lo hablaremos — bese su frente una vez más. Y desayune a su lado, donde se pasó todo el rato con esa cara de pensativa.
Tome mi auto y fui hasta mi casa, busqué varias mudas de ropa. Y como siempre mi padre no se encuentra en casa, y en un par de días es su cumpleaños, probablemente ese día le muestre a Mel mi familia.
— Señor Cortés, su padre ha estado preguntando por usted — me sorprendió lo que me dice, mi padre nunca pregunta por mi — Como usted de seguro sabe pasado mañana es su cumpleaños y también el día de la muerte de su madre, y por lo tanto harán la respectiva visita al cementerio de cada año y luego la cena en la casa, estarán todos los amigos de tu padre. Su hermana también estará. Quiere avisarle que vengas a casa ese día, para ir juntos a presentar los respetos a su madre — me explica Gustavo, que me esperaba en la sala.
— Por supuesto que si, mi novia vendrá conmigo — le explico y continuo mi camino hacia la universidad.
En la universidad tengo un día agitado de clases, me ha tocado clases de historia de los números, y muchas otras clases aburridas. Me ha tocado hacer equipo con una chica llamada Evelin. Ojos pardos, piel blanca, cabello oscuro. Me cae bien. Se nota que es buena chica.
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Conociéndote
RomanceMelanie Guzmán es una chica que solo hace lo que en verdad la complace, ser libre. Jamás se había enamorado de nadie, y mucho menos pensó en hacerlo porque sabía perfectamente que ella no era una chica que alguien mereciera. Y no confundan esto últi...