Capítulo 5: Tratando de componer lo que arruiné

148 26 111
                                    

Diego.

La extraño tanto.

Soy un estúpido, perdí a lo más valioso de mi vida, perdí a lo que le daba sentido.

No me casaré con Brook para salvar la empresa de mi padre, no me casaré con nadie para salvar nada.

Soy mayor de edad, ¡carajo! YO DECIDO QUÉ HACER CON MI VIDA.

¿Sabes qué? A la mierda todo, me importa un comino que me despojen de mi casa.

El riesgo vale la pena.

Ella vale la pena.

Miro el collage que me hizo, recuerdo aquél día y cómo la lastimé.

Ato las agujetas de mis botas y me dirijo a hablar con mis padres.

—No me casaré con Brooklyn sólo para salvar su estúpida empresa. —Tengo el corazón en la garganta.

—Hijo, yo sé que es difícil... Sé que estás enamorado de Vera, y aunque la estimamos, no podrán estar juntos, al menos no ahora. —Habla mi madre con la voz suave, tratando de hacer que entre en razón.

—Tienes que hacerlo, pequeño gran amigo, después te podrás divorciar. —Manifestó mi padre, tomándome la cara con una de sus enormes manos para tratar de tranquilizarme.

Súper fácil.

— ¡Brooklyn tampoco se quiere casar conmigo! ¡Tiene novio! —Subí el tono de voz, me estaba empezando a desesperar— Me sorprende viniendo de ustedes, que siempre me alentaron a encontrar el verdadero amor...

—Es un simple matrimonio de conveniencia. No te tienes que quedar con ella para toda la vida. Y si esa muchachita en verdad quiere estar contigo, lo entenderá...

Lo entenderá... claro, por supuesto, y hará como que nada pasó, me perdonará y permitirá ser la segunda opción.

— ¿Qué gana el padre de Brooklyn con todo esto? —Cambio el tema, no quiero seguir hablando de Vera, porque eso implicaría hacerme ver mis errores y enfatizar el hecho de que la herí, de que tal vez, lo arruiné todo y no tenga solución.

—Quiere que su yerno dirija la empresa. Contó que no se la iba a dejar a Dante porque no tiene las agallas.

—Y, ¿por qué no lo hace con el verdadero novio de Brook?

—Porque es pobre. Y ya sabes cómo es ese señor.

— ¿En qué siglo creen que estamos? —Pregunto molesto, tensando la mandíbula.

—Perdónanos hijo, de verdad. Pero, es tu obligación.

—No entiendo cómo es que llegaron a perderlo todo en unos segundos. —Paso mis manos sobre mi cabello con desesperación.

—Nosotros tampoco. —Contestan con simpleza.

—Con quien debería de casarme, es con Vera y lo saben. Ni Brooklyn ni yo merecemos esto, no merecemos ser infelices al lado de alguien a quien no amamos.

—Te lo dije la primera vez, y te lo repito ahora: no tienes opción, es sólo un papel, una mera transacción, después viene la gratificación, pero primero, se tienen que hacer sacrificios. —Es la primera vez que escucho hablar de esa manera a mi padre, como uno más del montón, como alguien cuadrado y conservador.

Siempre nos burlamos de esas personas, nuestra familia era moderna, liberal y feliz. Por eso siempre me consideré una persona afortunada, por no haber crecido como la mayoría de mis amigos, por haber tenido amor desde la niñez.

Corro hacia mi habitación, me da rabia e impotencia no poder hacer nada, antes de ello, observo el rostro con lágrimas de mi madre.

My Rockstar Lover [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora