Amantes (Drarry/Harco)

Capitulo 31

Si, definitivamente ya había muerto porque ningún argumento lógico afirmaría que Cedric Diggory estuviera en el piso a unos cuantos metros de él riendo mientras literalmente le partían la cara a golpes y patadas,  o talvez estaba llegando al mas allá y  en el transcurso estaba experimentando una serie de alucinación en donde Harry Potter había llegado y era el moreno el que con una mirada bastante homicida que te hacia querer corres lejos de allí era el que le pegaba con tanta furia a un sonriente Diggory.

Lo bueno es que esa alucinación era lo bastante real así que feliz se dedico a contemplar esos ojos verdes que brillaban en ira mientras sus grandes manos se llenaban de sangre, aunque para ser sincero él prefería que esa alucinación cambiara y le mostrara a su Harry, el que le hacia puchero para que lo besara cuando estaba molesto con él, si definitivamente prefería ver a su león tranquilamente durmiendo que a ese Harry furioso, cerro los ojos nuevamente y los volvió a abrir cuando las palabras crucio y avada kadrava llegaron a sus oídos, no sabia que en el mas allá también practicaban esas maldiciones ¿No se supone que ya no podías matar a algo ya muerto como era el caso de él? Frunciendo el ceño trato de enfocar su mirada de donde provenía el destello verde, subió un poco la mirada fijándose que era la alucinación de Harry la que hacia aquel hechizo, que bueno que antes de morir definitivamente podría ver a Potter matando al maldito que lo mato, si esa era una buena imagen para morir.

— ¡Draco! ¡Draco, háblame! — ¿Es esa la voz de Blaise? ¿Qué hacia Blaise allí? Talvez era eso de que un poco antes de morir recordabas a todos sus seres queridos, sonrió alegre y cerro los ojos tenia tantas ganas de dormir.

— No, no, no cierres los ojos, vamos quédate con nosotros Huron, mantente tranquilo pero con nosotros. — ¿La comadreja también? Que bueno que podía despedirse de sus amigos solo faltaban las chicas, pero y ¿Harry porque seguía molesto y no venia a despedirse también?

— Vamos amigo, no sigas la luz tienes terminantemente prohibido seguir la luz mejor sigue nuestras voces. — Dejo de ver a Harry y paso a ver a su moreno amigo quien trataba de ¿Cargarlo?

— No, no, no, no jodido hurón arrogante abre los malditos ojos, solo venos por favor no te duermas amigo. — Pedía el pelirrojo a su lado —¡Harry! ¡Harry ya déjalo, ya esta muerto! ¡Draco te necesita, apúrate!

¿Harry? ¡Si! Podría verlo antes de dormirse, enserio tenia mucho sueño ¿Era eso lo que ocurría cuando ya te morías definitivamente? ¿Te dormías?

Los grandes ojos verdes aparecieron en su borroso campo de vista, sonrió al verlo pero al ver como lagrimas opacaban el hermoso brillo de esos ojos dejo de sonreír ¿Por qué su león lloraba? ¿¡Maldita sea, acaso no podía pedir ver a un Harry feliz antes de morir definitivamente?! ¡Solo un Harry sonriendo era lo que pedía!

— Leon... — Dijo en un bajo susurro sintiendo su garganta arder y sin importarle el dolor levanto su brazo hacia la cara del moreno limpiando las lagrimas que resbalaban por su barbilla y una gota de sangre que manchaba su mentón, sonrió al ver esa linda sonrisa torcida que tanto amaba. — N...no llores.

— Tranquilo Dragon, te prometo que no llorare si no cierras los ojos y te mantienes despiertos y con nosotros ¿si?

— Ok...

Respondió aun sonriendo y después sintió como algo lo elevaba y la oscuridad se expandía bajo sus parpados aun oyendo la  voz de Harry, la de Ron y Blaise pidiendo que no se durmiera pero mierda el tenia mucho sueño.

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Ronald junto con los aurores llevaron los tres cadáveres a el ministerio y en el transcurso el pelirrojo envió un patronus a Hermione y Pansy informándoles sobre la situación. Mientras Blaise Zabini llego a San Mungo gritando a todo pulmón que necesitaban ayuda y Harry corría tras de él cargando a un muy lastimado e inconsciente Draco sin importar las miradas de asco que le enviaban las personas al verlos a ambos todos llenos de sangre y fijarse en quien era la persona que el salvador del mundo cargaba con tanta preocupación mientras gruesas lagrimas empañaban sus ojos.

— Déjenos encargarnos señor Potter, el señor Malfoy esta en buenas manos. — Dijo un medimago tratando de quitarle al rubio de los brazos a Harry quien con desconfianza lo miro de arriba a bajo.

— A Draco Malfoy le pasa algo mas y les juro que tumbare este maldito hospital asegurándome de enterrar sus cuerpos junto con los escombros. ¿Entendido? — El medimago junto con las dos enfermeras tragaron grueso sintiendo la poderosa magia del azabache vibrar furiosa, amenazante e imponente a su alrededor, asintieron rápidamente arrebatándole al rubio de sus brazos.

— Si sabes que el asesinato de Diggory nos traerá problemas con el ministerio ¿no? — Dijo el moreno abrazándolo por los hombros y juntos se sentaron en el piso sin importar la sangre impregnada en sus ropas, la gente que se jodiera.

— Lo se amigo, pero créeme que ahorita lo que mas me importa es mi Dragon, el ministerio y sus leyes se pueden ir a la mierda.