Tu voz

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- Vamos YoonGi tu puedes. - Se dijo a si mismo susurrando bajo. Sus manos tomaban su pelo entre tirones, sus piernas temblaban y en su garganta se sentía un enorme nudo. - Tu puedes, tu puedes...

Todo le daba vueltas, sus ojos estaban apretados fuertemente aguantando de manera casi tonta las lágrimas que querían salir. Sus labios temblorosos se resguardaban entre interminables mordidas y succiones que él mismo se daba tratando de sacar la frustración. Sentado al pie de su cama, con la luz apagada y el resplandor del televisor alumbrando su penoso ser. Min YoonGi luchaba contra él mismo. Sus pensamientos vagaban rápidamente en cosas malas, ideas pesimistas y la insoportable opresión en el pecho. De pronto se levantó de su lugar solo para acercarse al fino espejo que descansaba a un lado de su puerta. Abrió sus ojos lamentándose en el momento en que vió su reflejo... Era tan miserable y asqueroso, las lágrimas caían libres por sus mejillas y ser perdían en alguna parte de su cuello, sus ojos estaban rojos e inflamados y su cuerpo se veía débil y muy tembloroso. Entonces un nuevo dolor desgarrador atravesó su pecho... Él no era así, ¿Por qué le dolía tanto ver su reflejo?, ver su aspecto en ese momento solo lo llenó de rabia y un desesperado anhelo de querer volver a estar bien. Su cuerpo se desplomó en ese momento, calló duro sobre el alfombrado piso y su cabeza rebotó... Sorprendentemente no dolió o dolió mucho menos que el constante dolor que su corazón sentía.

Tirado ahí, en el piso de su habitación pidiendo en gritos internos que todo acabara y dejara de doler su teléfono sonó. Era un mensaje... 

Quizás podía ser él...

Quizás ya había escrito...

Pero no quería responder ahora, no en ese estado... YoonGi sabía que su mente le estaba jugando mal y podía decir algo incorrecto, ¿Como podría YoonGi decirle que todo estaba bien a la persona que jamas ha podido mentirle?,¿Podría aparentar falsa tranquilidad y hablar con él?... Definitivamente no... No podía mentirle, jamás había podido hacerlo y le dolía mucho no poder decir que todo estaba bien y hablar de algo random. YoonGi quería poder ser de ayuda para su persona favorita, pero ciertamente en su estado actual no podía serlo y era ahí donde todas las inseguridades llegaban a invadirlo nuevamente.

¿Por qué el se quedaría con nosotros?

Estás enfermo YoonGi, Tu no mereces cariño.

Nadie podrá jamas llegar a amarte, ¿Como lo harían si ni tu puedes hacerlo? 

Eres repulsivo y muy idiota. Tan molesto para todos.

Acaba con esto ya, lo tenemos planeado... Solo debes cortarte y todo se acabará.

Cobarde.

Y ahí estaba nuevamente su mente jugando con él. Un sonidito lastimero salió de sus labios mientras él se ponía en posición fetal, abrazando su abdomen y golpeando su cabeza repetidas veces contra el piso.

Y el teléfono volvió a sonar una, dos, tres... Luego hubo una momentánea calma y sonó una cuarta vez, y cinco y seis... Hasta que YoonGi pudo contar 14...

No podía hacer eso, no podía ignorarlo así como así, seguramente él estaba preocupado, quizás necesitaba ayuda o quizás pasaba algo, YoonGi no podía ser egoísta, no quería ser una preocupación para él. Con suavidad secó sus lágrimas o lo intentó... Levantó su cuerpo pesado del frío piso y se encaminó a la cama... Su cuerpo reposó nuevamente en el final de esta y tomó entre sus temblorosas manos el aparato.

YoonGi leyó los mensajes, todos eran de él... Estaba preocupado y asustado.

🐣Pollito🐣

YoonGi responde, estoy
asustado.
¿Estas bien? 

11:38.

Yoon... Vi tus estados
¿Quieres hablar?

The sky is the limit. YM Donde viven las historias. Descúbrelo ahora