Capítulo 10

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[ DAMIÁN KING ]

Ma aparco en el estacionamiento que esta a unos metros de la playa

-que hacemos aquí? -pregunta viendo todo a su alrededor

-solo camina -la guió hasta unas rocas, me siento y ella imita mi acción

-para que me trajiste aquí? -vuelve hacer otra pregunta

-necesitas distraerte -me limitó a decir, me concentró viendo las olas algo que me recuerda la primera vez que la vi

Me trago todas las malditas ganas de contarle todo, nos quedamos en silencio viendo las olas, la veo de reojo y esta llorando

-Mira princesa te voy a decir algo -rompo el silencio, la veo de reojo y ella me voltea a ver atenta

-nunca te rrebajes por un hombre, hombres hay millones -ella me interrumpe

-pero yo lo quiero, me trataba como princesa.. -me tenso y la interrumpo, no quiero que siga

<<creo que soportaría más una tortura a volverla escucharla decir eso >>

-calla -agarro uno de los moffin que compre y se lo meto a la boca

-puede que lo quieras pero eso no implica que tienes que rebajarte, nunca busques a un hombre, el te tiene que buscar a ti y tal vez te trataba como princesa pero va a llegar alguien que te tratara como reina -mira sus manos, parece niña chiquita como cuando la regañan

-Una mujer no se tiene que rebajar por un hombre y mucho menos alguien como tu -me mira confundida- mantente en la cima sentada en el trono y con la corona bien puesta, no mires para abajo porq se te puede caer -esta vez mira el suelo pero la agarro del meton para que me mire a los ojos, su colo azul intenso me consume poco a poco

-pero tadavia duele y no puedo evitarlo -ella está rota y se nota a quilometros

-te entiendo, llora, grita, desquitate puedes estar muy rota pero no lo demuestres a todo el mundo porque lo pueden usar en tu contra -miro las olas del mar que chocan contra las rocas de la costa

-no creo que entiendas lo que se siente que una persona que quieres no se recuerde de ti -la volteo a ver y ella hace lo mismo

-lo experimente, a diferencia mía es que yo no quería a esa persona, yo la amaba -me mira a los ojos, ese azul intenso que me lograba dominar sigue teniendo el mismo efecto en mi

-gracias, me has ayudado mucho -sonríe de lado, asiento

<< tal vez la ayude a sentirse mejor pero yo me siento como una mierda >>

-vámonos -ella me mira extranada por mi cambio de humor

No quiero tenerla tanto tiempo cerca de mi

-que sucedió? -pregunta confundída

-nada si? Solo nos vamos y ya no sigas preguntando -me en camino hacia el auto

Espero a que ella se suba primero para luego hacerlo yo, lo enciendo y arrancó, aceleró para llegar mas rápido a la mansión que no queda lejos

- si quieres salir pídeles a uno de mis hombres que te lleve -le digo cuando llegamos a la mansión, me bajo rápidamente del auto y camino hacia la entrada

-Damian! -paro en seco, cuando ella me llama

-si? -la miró por sobre mi hombro, no me atrevo a verla

<< joder perezco un maldito crió y un punto cobarde pero eso pasa cuando se trata de ella >>

-gracias -me agradece

-no tienes que agradecer nada -es lo último que digo antes de ir a mi despacho y encerrarme el resto del día en el

Ya es de noche, Emma se encuentra en su habitación, salgo de la mansión y conduzco hasta la bodega, los tipos que intentaron secuestrar a Emma ya llevan más de una semana sometidos a dolorosas torturas

Los hombres que custodian el lugar me reciben, no hablo con nadie y camino directo a donde están colgados del techo

Sus rostros están de formes y se encuentran cubiertos de sangre, ematomas por todo el cuerpo, heridas abiertas, cicatrices

-tengo que admitir que me sorprende que hayan resistido tanto -me paseo alrededor de ellos inspeccionandolos

-he recibido peores torturas -escupe uno haciendo sonreir

-lo dice porque todavía no has experimentado las mías -sus expresión cambia a una de miedo pero trata de recomponerla

-si sobreviví a las torturas del Boss crees que no voy a resistir las tuyas -ya me esta colmando la paciencia pero debo admitir que tiene los cojones bien puestos para hablarme así, pero lastima que muy pronto no los tendrá

-estas vivo porque así lo quizo y adivina de quien aprendió el Boss todas las tartutas? -su rostro muestra terror- bien empecemos -habló mientras me coloco los guantes de cuero negro

-Pasenme el hierro caliente -ordeno a uno de los hombres presentes, uno de ellos acata mi orden y me pasa lo antes pedido

-Señor por favor tenga piedad -ruega uno de ellos

-para que aprendan a no desobedecer a Damián King -preciono el hierro caliente en su abdomen y un grito desgarrado inunda mi canales auditivos

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SIEMPRE FUIESTE MÍA #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora