t r e i n t a 🍼

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"Es lindo, ¿cierto?" Yoongi asintió sonriendo enormemente como respuesta a la pregunta planteada por el alto hombre a su lado. "Me gusta ésto, se siente tan simple pero mágico a la vez."

Y es que estaban caminando lentamente por el parque, tomados de la mano del otro y disfrutando de sus empalagosos aromas mezclados que los rodeaban. La rutina de caminar al anochecer por las calles, juntos y de la mano, se había vuelto una placentera rutina que la enamorada parejita cumplía diligentemente desde hacía varios días.

"¿Cómo van Youngbae y Seungwan?"

"Bien, creo, él ya conoce a la familia de ella y ella a la de él." Jimin besó con cariño la tersa y rosita mejilla de su novio cuando se sentaron en una banca.

"Me alegra mucho."

"Sí, a mí también..." El alfa rió bajito y frotó sus manos con intensidad en su pantalón de vestir negro antes de tragar con fuerza. "Yoon, yo, eh... ¿no te gustaría, no sé, viajar?"

"¿Como un viaje de una noche?" Los pequeños dientes frontales del castaño se asomaron en lo que quería convertirse en una emocionada sonrisa.

"¡No! Bueno, si una noche te parece poco puede ser de dos, o incluso tres, sólo quiero que pasemos más tiempo juntos.

Yoongi soltó una risita melosa y, con extrema delicadeza, tomó entre sus manos el atractivo rostro de su alfa, se acercó lentamente y dejó un piquito en los pomposos labios del otro, que sonrió dulcemente mientras sus mejillas se coloreaban de carmín y su aroma se hacía aún más fuerte.

"¿Entonces sí, Yoon?"

"Yo también quiero pasar más tiempo contigo, Jimin, pero con todo esto de la nueva revista no tengo mucho tiempo."

De pronto, la sonrisa del pelinegro disminuyó y su olor se hizo menos dulce, las feromonas de emoción fueron reemplazadas por las de la decepción y una incómoda risa salió de su boca. Yoongi hizo un puchero incoscientemente, algo en su pecho lo estaba haciendo sentir culpable por entristecer a su alfa.

"Sí, claro, cómo no pensé en eso antes." Jimin carraspeó, volviendo a reír incómodamente, mirando al piso y separándose un poco del agarre de su amado para no terminar llorando. "Con eso de que tu departamento y equipo trabaja tanto..."

Y no lo dijo de mala manera o con sarcasmo, porque sabía que últimamente Publicidad había estado esforzándose y trabajando extraordinariamente, pero así no lo tomó Yoongi, porque frunció ligeramente el ceño y soltó el rostro del menor.

"¿A qué te refieres?"

"¿Eh?"

"¿Estás insinuando que mi departamento, equipo y, por lo tanto, yo, no trabajamos lo suficiente?" Problemas. Eso pudo presentir Jimin cuando percibió lo picante que había en el dulzón aroma a vainilla de su novio. "¿Es eso? Respóndeme."

"¿De qué hablas? No quise decir eso, me refería a que entiendo lo ocupado que estás y que no siempre tienes tiempo para..."

"¡Claro! ¡Seguro piensas que no nos esforzamos porque el presidente te dijo eso!" El alfa estaba más que confundido, intentaba recapitular en qué momento fue que lo arruinó tan horriblemente. "No te culpo, es tu padre y creo que nunca le he agradado del todo, mucho menos ahora que tengo algo con su hijo... Espera, ¿sabe que tengo algo con su hijo?"

"Escucha, Yoongi, estábamos bien, sin pelear por tonterías, yo..."

"¿Insinúar que mi equipo no hace su trabajo adecuadamente te parece una tontería?" El pequeño suspiró con molestia. Miró severamente a los ojos contrarios y chasqueó la lengua. "Hablamos más tarde, ¿sí? Adiós."

Oh, mi bebé • [JimSu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora