¿Confesion?

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SUNA POV.

Una vez más me encontraba alistándome parea ir a la escuela, ya que a final de cuentas Kenma y yo tomamos el tren bala para ir a nuestras casas ayer en la noche después de irnos de la mansión de Tendou. Todavía no sabíamos nada ni de Tsukkishima, ni de Bokuto cosa que si me lo preguntan resulta muy sospechoso, pero una vez más conociéndolos todo salió bien y por eso no nos mandaron ningún mensaje.

A decir verdad me encontraba orgulloso de mi mismo, por primera vez me levanté temprano, y si bien se debe a los nervios de volver a la escuela después del espectáculo que nos dimos el viernes en la fiesta, por lo menos no voy a tener que correr para poder llegar a tiempo a la escuela, en mi trayecto hacia allá todo fue tranquilo ya que gracias a todos los cielos no me encontré con nadie conocido, por lo que no tuve que dar ninguna explicación de lo qué pasó el fin de semana en casa de Tendou, y sinceramente esperaba que nadie me preguntara al respecto, digo estaba borracho ellos van a entender ¿no?.

Pero bueno, ya todos saben que si el universo odia a alguien, ese alguien es a mi, su pasatiempo favorito es ver a Suna Rintaro sufrir, nada más abrí la puerta del gimnasio y ya estaba siendo bombardeado por un sin fin de preguntas y felicitaciones, los únicos que si se habían comportado como seres humanos fueron  Aran, Osamu y Kita, quienes estaban en una esquina presenciando todo, no podía escuchar ni la mitad de lo que los inadaptados que tengo como compañeros me decían, así que gran fue mi alivio cuando kita logró sacármelos de encima para empezar la práctica.

Si bien después de eso nadie me siguió preguntando cosas, podía notar él como me miraban desde lejos, en fin detalles insignificantes, al acabar la práctica todos se habían dirigido hacia los vestidores más sin embargo una notificación de mi celular hizo que me detuviera a medio camino, y como no, la notificación era del grupo de los volleybollistas emos, obviamente quería los detalles de lo que había pasado ayer con los dos abandonadores , así que me dispuse a abrir el chat más sin embrago una voz interrumpió.

-Suna- al levantar mi vista pude ver que era osamu el que me hablaba.
-¿qué pasó? Le pregunte aún sin mirarlo, el chisme era más importante en estos momentos, más sin embargo antes de que pudiera empezar a leer, mi celular fue arrebatado de mis manos.
-devuélvemelo- le dije en voz monótona a osamu quien en estos momentos se encontraba con mi teléfono.
-¿son tus novios?- preguntó señalando el chat grupal de mi teléfono con su usual cara seria.
-¿eh?- y de un momento a otro empece a reír, yo pensaba que lo de la relación poliamorosa lo preguntaron solo para molestarme o algo por el estilo, no pensé que osamu en verdad se lo hubiera tomado en serio.
-no- conteste.
-¿pero  ellos son los de las fotos de antier no?- preguntó.
-bueno si, pero nos besamos en plan amistad- conteste.

-sabes no debería de ir besando a cada persona que sea amigable contigo- me dijo Osamu.
-pero ellos son mis amigos, así que no hay problema- argumente -aparte no es como si estuviera en una relación, así que no importa mucho- continue.
-¿y no te gustaría estar en una?- Osamu preguntó, y para ese momento estaba más que confundido, acaso estaba insinuando lo que yo creía que estaba insinuando.
-¿eh? ¿Como así?- pregunte intentando ocultar los nervios en mi voz y en mi rostro.
-era broma- y solo eso bastó para que mis ilusiones se quebraran y volviera a la realidad.
-ok- dije

Y así fue como termine yendo hacia los vestidores, con las esperanzas destruidas, con un incómodo silencio entre Osamu y yo, y sin poder haber leído los mensajes de el grupo, en fin ya haré eso después en clase de inglés, al llegar a los vestidores el único que estaba dentro era Atsumu.
-¿oh llegando juntos eh?- dijo claramente intentando molestar, o eso creía hasta que volvió a hablar.
-felicidades Sunarin- ¿porque me felicita? Juro que si dice algo me un poli amor le voy a partir la cabeza, estaba listo para protestar hasta que Osamu hablo.
-no le digas asi- dijo
-deja tus celos Samu, Sunarin es tu novio ahora así que no tienes que ponerte así- Atsumu dijo y yo no podía estar más confundido.
-no pensé que mi hermano se fuera a confesar, en serio pensé que serías muy gallina para eso, pero tal parece que no- siguió hablando Atsumu.
-no entiendo nada- dije, ya que capaz y que Atsumu solo estaba siendo raro una vez más.
-no trates de ocultarlo, es más que obvio que se acaban de volver novios, ¿o acaso solo te invito a una cita?- preguntó Atsumu, y de lejos podía ver como Osamu mantenía su cabeza baja.

No conteste la pregunta de Atsumu, y tal parece que eso bastó para que volviera a sacar sus propias conclusiones ya que volvió a hablar.
-vaya, no pensé que fueras alguien tan formal como para invitarlo a una cita primero Samu, pero bueno después de todo es de tu amorcito de quien hablamos- Atsumu siguió hablando y de reojo solo pude ver como Osamu miraba a su hermano con aires de homicida.
-Atsumu estas muerto- soltó Osamu.
-¿eh porque? Que acaso te estoy avergonzando, no tienes porque ponerte así ¿igual ya son algo no?- y justo en ese momento parece que atsumu entendió la situación- ¿espera acabo de hacer la confesión por ti verdad?- Atsumu rio incómodo.
-mierda- soltó Atsumu para de un momento a otro salir corriendo antes de que su hermano pudiera ir por el, así que ahora solo quedábamos Osamu y yo.

No planeo negarlo el ambiente que se formó era muy incómodo y Osamu parecía no querer decir nada al respecto, solo fue hasta su casillero y se empezó a cambiar ignorando todo lo qué pasó... cobarde, pues bien era ahora o nunca.
-también me gustas- solté acabando así con el incómodo silencio.
-¿qué?- preguntó el idiota de Osamu haciendo el momento aún más vergonzoso de lo que debería ser.
-ya sabes gustar como de... novios- solté cada vez perdiendo más dignidad por la pendejada que acababa de decir.
Y de un segundo a otro al quitar mi vista de el piso, solo pude ver a Osamu cada vez más cerca de mi, y sin previo aviso me beso.

Al separarnos el todavía tenía sus brazos al rededor de mi, y me estaba mirando fijamente con una leve sonrisa, nunca pensé que esto iba a llegar a pasar, rápidamente desvíe la mirada hacia el suelo y solo pude escuchar como se volvía a reír el idiota de Osamu.
-vamos Sunarin hay que ir a clases, cámbiate- soltó en un tono ¿alegre? ¿animado?
Y así es como ambos partimos hacia nuestras respectivas clases no sin antes quedar de vernos después de el tercer periodo para hablar y tal vez saltarnos algunas clases juntos.

Talvez hoy no era un mal día como yo pensaba.

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