Iwaoi & Sakuatsu stories

True self

Oikawa no podía estar más nervioso, se había encerrado en el baño de su novio y mejor amigo Iwaizumi excusandose con que quería tomarse un baño, cuando en realidad estaba sentado en el váter deliberando entre contarle la verdad a su pareja o irse a casa. Oikawa nunca tuvo problemas en revelar que era gay, pero revelar que había nacido con órganos reproductivos masculinos y femeninos era una cosa totalmente diferente.
Nunca había tenido que revelarlo, pero ahora que iba a manter relaciones con su novio por primera vez, estaba aterrado. Sabía que Iwaizumi tenía una mente abierta, pero no podía estar seguro de como reaccionaría ante tal noticia.

- Tooru, ¿estás bien?

- ¡Sí! Salgo en un momento.

Como pudo, se armó de valor y volvió a entrar en el dormitorio. Le esperaba sentado en la cama un Iwaizumi con una mueca confusa. Oikawa se acercó sin demasiada decisión, sentándose a su lado. Al notar sus nervios, Hajime le cogió la mano y empezó a acariciarla suavemente mientras le regalaba una sonrisa conciliadora.

- Tienes que contarme algo, ¿verdad?

Oikawa asintió levemente y se quedó en silencio, aun dudando en si debería decirle la verdad. Iwaizumi también se quedó en silencio no queriendo presionarlo más. Pasaron aproximadamente unos 20 minutos antes que Oikawa pudiera mirarlo a los ojos con decisión.

- No he sido sincero contigo... acerca de mi persona. Nunca he sentido la necesidad de contarlo, pero tú necesitas saberlo.

- ¿Y qué es?

- Nací con órganos masculino y femenino, y puedo dejar embarazado a alguien y también puedo quedarme embarazado.

Después de hablar cerró firmemente los ojos, a la espera de una lluvia de insultos, pero en su lugar sintió unos brazos enlazandose en su torso. Abrió los ojos lentamente, encontrándose con la cercanía de Iwaizumi. Al notar el cariño que contenía el abrazo, lo devolvió gustoso. Sin previo aviso, las lágrimas empezaron a caer.

- Estoy orgulloso de tí, Tooru. Te quiero.

Oikawa le dedicó una sonrisa y se acercó para besarlo, que poco después se transformó en uno más pasional. Las manos de Iwaizumi empezaron a delimitar el cuerpo de Oikawa. Empezó a desvestirlo mientras plantaba pequeños besos en su piel, dejando un rastro de marcas a su paso. Antes de bajarle los pantalones volvió a pedirle permiso, recibiendo una respuesta positiva. Ahora ya algo más nervioso, Iwaizumi lo desnudó por completo, admirando a su novio. Humedecido sus dedos con lubricante y empezó a abrir la entrada de su vulva. Cuando hubo insertado tres dedos, por fin entró en él mientras mantenía su mirada en la de Oikawa.