Después de ti

Capítulo 25 EDITADO

P.O.V Vallolet

De alguna forma u otra los días pasaron aunque pensé que nunca lo harían, todo era un caos, mi hermana se había ido de la manada sin decir nada, ni siquiera dejó una nota, solo sabemos que se fue sola, ya que Aaron estaba enfermo según sus padres.

Alex andaba triste, sentía que era su culpa, le dolía tener que ser su mate y no que fuera Aaron quien era a él al que quería mi hermana.

No supe mucho cómo Alex y mi hermana se enteraron de que Aaron era mi mate y que me había rechazado, pero luego de una discusión un poco intensa con Alex quien me echaba la culpa de todo pensó las cosas mejor y se logró calmar dejando paso a la tristeza.

Nunca habíamos peleado de esa forma, de solo recordar me dolía el corazón.

Escucho los pasos acelerados de Alex los cuales venían en mi dirección.

Al encontrar a la que estaba buscando explota sin dejarme procesar siquiera algo.

-No puedo creer que no quisieras hacer esto ¡a mi! ¡soy tu mejor amigo, joder!

-Qué te pasa.

-Me pasa que rechazaste a tu maldito mate para que estuviera con la mía, ¡sabias que era mi mate y lo hiciste aun así!-. se tira el pelo frustrado y noto como todo su cuerpo tirita de cólera, de rabia pura.

-Te juro que no lo sabia cuando lo rechace.

-Ja, como si no lo supieras, viste como me acerque a cuidarla y a taparla para que nadie viera su cuerpo desnudo, viste como gruñía queriéndola proteger.

-Tenia la mente muy confusa ¡no me estaba transformando Alex, tu también lo viste! como si tuviera cabeza para pensar las razones de porque la fuiste a buscar-. digo frustrada.

-A mi no me mientes, tu solo no querías estar emparejada con ese hijo de puta porque sabias que ibas a ser infeliz toda tu maldita vida y preferiste cagarmela a mi.

Le propino una cachetada sintiendo comezón en mi mano.

-No puedes estar mas equivocado, TU NO SABES LAS RAZONES POR LO QUE LO RECHACE, TU NO SABES QUE-. me atraganto con saliva y siento mis ojos quemar.- tu no sabes que todo lo que he echo es para que aun que sea ustedes sean felices.

-Querrás decir tu hermana.

-No puedo creer que dudes de mi, eres mi mejor amigo me conoces mejor que nadie ¿de verdad me estas diciendo todo esto?

-No te conozco Vallolet, todos estos años de amistad ahora son una mierda, de qué me sirve tener una amiga así ¡mi mate se va lejos para no verme, ni a mi, ni a ti, ni a tu mate!-. ahoga un gemido de agonía.

-¿Jazmín? ¿se va? ¿pero a donde?-. se frustra por mis preguntas tontas y mueve los trazos a todos lados.

-¡Que mierda voy a saber yo! como si me lo fuera a decir si es que se quiere alejar de mi.

Corro a su habitación y noto que no estaba su ropa con un par de cosas mas.

La noche fue un caos en toda la manada, todos la buscábamos incluso en las manadas vecinas pero era como si la tierra se la hubiera tragado.

Mi padre con mi hermano no entendían nada, veía lo preocupado que estaban todos y me dolía notar la angustia de mi padre que se dividía entre la perdida de su hija y ver como su mate que lloraba desolada.

Lo peor fue que los sabios de la manada pedían que comenzara a liderar la manada siendo guiada por el alfa, pero solo había mal ambiente en toda la manada, nadie entendía por qué la hija del alfa se había ido y mis padres tampoco tenían la cabeza para pensar en algo más, por lo que tome el mando y les di tiempo a mis padres para que asumieran que tarde o temprano Jazmín volvería cuando su corazón y pensamientos estuvieran en orden, ella nunca fue de las que evitaba los problemas, por lo que solo me quedaba confiar en que volvería, por lo menos me consolaba que no rechazó a Alex.

Por más de 3 meses trate de volver a la normalidad los ánimos de la manada y aproveche este problema para hacernos mas cercanos a las manadas de esta zona para que no fuéramos tanto enemigos sino más bien aliados, esperando que así, si mi hermana llegara a una de esas manadas la recibirían cuidándola.

Casi no dormía y es que aun no entendía muchas cosas por lo que tenia que consultar a los sabios constantemente o leer los libros de nuestra historia.

Lo peor era que sabia que no podía seguir haciéndolo sola, necesitaba un apoyo y en este caso era mi beta, Alex, de quien no sabia mucho solo me lo tope una vez quien se disculpo por sus actos y sin más se fue a buscar a mi hermana.

Abro la ventana de la oficina que ahora era mía e inhalo profundo, cierro los ojos intentando relajarme y puedo escuchar a los niños correr mientras gritan alegres y sonrío al saber que otra vez había un poco de armonía.

Mi cuerpo se congela al sentir el olor de Aaron y al verlo noto como me mira y modula un "lo siento mucho" a lo que yo solo le respondo con una sonrisa.

Cierro la ventana y vuelvo mi atención a la torre de documentos que tenia en el escritorio.

Suspiro mirando el techo.

Estaré bien.