13. Mío.

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Sus ojos, sus manos, su cuerpo. Todo él denota confusión.

-¿Porqué? ¿He hecho algo mal? Pensé que querías montar en globo.

-No es eso, Kian. Es...todo. Estoy agobiada con el tema del bebé, con la boda, siento que me ahogo.

-¿Y porqué no lo dijiste antes?

-No lo sé, Kian. Contigo todo es muy rápido, intenso; siento que juego con fuego, y ya sabes...acabaré quemándome.

-Quémate conmigo. -Sus ojos brillan a la luz de la luna, su expresión es indescifrable, algo entre miedo, desesperación y a la vez deseo.-

-Kian...

-Mira, te prometo que no te presionaré. Haremos las cosas como tú quieras, como si quieres que nos casemos en un potrero. Me da igual todo con tal de que estés conmigo, ¿no lo ves? al final todo es sobre tí.

-Lo siento. Soy una tonta. No debería haberte preocupado, no quiero dejarte, es sólo...tiempo. Eso es lo único que necesito.

{...}

-Es un bebé precioso. -Justin está sobre mi regazo, jugando con un pequeño coche rojo y negro que Kian acaba de comprarle. -Se parece muchísimo a Jc, dios.

-Es raro, ¿sabes?

-¿El bebé?

-No. -Contesta mirando absorta al horizonte. -Como han cambiado las cosas...es decir, hace 3 años ni me imaginaba lo que se me venía encima, y ahora...tú, por ejemplo, vas a tener un bebé.

-Sí, todo es una locura.

-Kian me contó lo de ayer, que quieres esperar más.

-¿Te parece mal?

-Mal no, es normal que tengas dudas, yo también las tuve. Marie...Kian te quiere, pero algún día se cansará de esperar.

-Lo sé.

-Lo único que quiero decirte es que jamás he visto a alguien querer tanto a una persona como Kian a tí, créeme.

-Yo también le quiero, Annia, ¿crees que esto no es duro para mí? Me gustaría que fuera mucho más fácil pero no lo es.

-Marie...

-¡Estás haciendo una montaña de un grano de arena! -El bebé se sobresalta y empieza a llorar, nuestra agitada conversación cesa y coje a Justin mientras me mira fijamente.-

-Lo siento, lo siento mucho. No sé que me pasa, parece que estoy peleándome con todo el mundo.

-Será el estrés. Mira, te entiendo, sólo...relájate, verás como las cosas con Kian mejoran.

{...}

Me pongo de lado ante el espejo. Mi barriga está ligeramente más grande que la semana anterior. Deslizo mi mano alrededor de ella, pensando en Kian mientras sonrío como una tonta.

¿Quién iba a decirme que acabaría enamorada del chico que creí odiar?

Aparece de repente detrás mío y pone sus manos en mi vientre, su nariz roza pelo y le siento aspirar.

-Hueles muy bien.

-¿Tú crees? -Le pregunto pícara y le siento sonreír.-

-Sí. Y estás preciosa embarazada.

-Creí que era preciosa siempre. -Cierro los ojos al darme cuenta de que eso ha sonado presuntuoso y Kian me abraza un poco más fuerte.-

-Lo eres, y ese bebé lo será. ¿Sabes porqué?

-Dímelo. -Respondo girando sobre mia tobillos y quedando frente a frente con Kian.-

-Porque es mío. Y tú también.

Trouble again. [Kian Lawley]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora