Flower Prince; RebornPlay ۵

- capítulo 32 -

Reborn corrió por los pasillos hacia el ala médica. Mónica estaba de regreso en el comedor con sus padres, esperando mientras él iba a buscar a Auron.

Cuando Reborn abrió las puertas, Auron se estremeció y dejó caer una pila de libros. Otros herbolarios se sorprendieron y se alejaron arrastrando los pies al ver al Príncipe.

—Raúl. — Reborn comienza, —Por favor, ven conmigo. Solicito tu ayuda.

Auron asiente y camina junto a Reborn. Él ve a Axozer con una mirada molesta.

Una vez que los dos llegan a un área privada, Reborn echa la cabeza para mirar al otro. Auron estaba asustado por el miedo y la vigilancia en la expresión de su amante.

—Raúl, escúchame. Mónica y yo empezamos a hablar con el Rey y la Reina y- — Toma un respiro, —No va tan bien. Necesitamos que hables con ellos.

—¡¿Yo?! — Raúl grita, —¿Qué podría hacer?

—No lo sé. Es solo que tu madre pidió por ti así que- 

—Está bien, lo haré. — Raúl tranquiliza, —Cálmate, los convenceré.

Jack asiente lentamente y lleva a Raúl al comedor. Muy pronto, ambos están cara a cara con la puerta. La puerta que separa la perdición podría existir.

—No los he visto en tanto tiempo... — murmura Raúl.

Jack lo abraza, —Mónica estará allí contigo. Además, eres su hijo.

Raúl asiente y se pone de pie, —Gracias.

—Cuando sea.

El chico abre la puerta, donde lo esperan su padre y su madre. Reborn decide quedarse afuera para darle a la familia su espacio privado.

Su madre tiene un rostro de simpatía y anhelo, mientras que su padre se aferra a la confusión y la furia.

—Raúl. — La Reina susurra, —Estás de vuelta.

Auron no dice nada y se para al lado de su hermana.

Solo hasta ahora se dio cuenta de que ella era más alta que él. Aunque solo era una pulgada más grande, nunca la había reconocido.

—Diles, Raúl. — dice ella. —Diles.

Mónica estaba actuando de manera diferente a lo habitual. Era como si esto significara mucho para ella a pesar de su falta de conocimiento sobre The Anchors.

Él la mira a ella y luego a sus padres, específicamente a su madre. —Raúl...

—¿Por qué pensaste que regresé? — brama. —¿Por qué volvería a este horrible lugar sin una razón tangible?

—Viniste aquí como herbolario por tu trabajo- — responde su madre.

—Yo nunca volvería aquí, ni siquiera por trabajo. — Auron mira a su padre, —¿Quieres adivinar por qué?

Su padre le devuelve la mirada, pero no con el mismo enfado

—Regresé para beneficiarme de una revuelta que creo que está haciendo lo correcto. Estoy tomando mi propia decisión en esta situación. ¿Es sorprendente?

Su padre se queja, frunciendo las cejas y apretando los puños. —Escucha, muchacho. — Se pone de pie. —Vas a volver a esa enfermería, empacar tus cosas y marcharte de una vez por todas. Ver tu cara me da ganas de vomitar.