Flower Prince; RebornPlay ۵

- capítulo 38 -

Llegó el día siguiente y Reborn extendió la mano por la cama. Suspiró molesto cuando no sintió a Auron a su lado. Después de levantarse, salió de la casa donde Auron caminaba de regreso con un balde de agua. Reborn salió y tomó la olla en sus manos.

—¡Oh, gracias! — El menor exclamó.

Reborn asintió y colocó el cubo junto al fuego. —¿Tienes hambre? — preguntó.

—Un poco, pero tengo algunas bayas, así que deberíamos estar bien.

Auron se dio cuenta del estado perezoso de Reborn y sonrió. —Sabes, yo puedo cuidar el agua y tú puedes tomar una siesta por un rato más.

El hombre negó con la cabeza, —No, no estoy cansado.

—Sí, lo estás. Vamos a caminar un rato, así que duerme un poco más.

Reborn suspira derrotado cuando mira el rostro del herbolario. —Si insistes. — Ríe y regresa adentro.

Después del desayuno, los amantes se pusieron los mantos y caminaron con bolsas en la mano; hacia el bosque.

—¿Raúl?

—¿Si?

—¿Alguna vez has considerado quedarte aquí?

Raúl se burló juguetonamente. —No, ni una vez.

—No sería tan malo.

Se detienen en seco y se voltean para mirarse.

—¿Cómo es eso? — Raúl preguntó.

—Es tranquilo aquí. No tenemos que lidiar con The Anchors, y siempre podríamos arreglar la casa. Iré a cazar todos los días y me aseguraré de traer algo, y te prometo que estaremos a salvo-

—Jack. Tenemos que ayudarlos.

—Lo sé. Solo temo que algo inmoral te pueda pasar si te involucras demasiado.

Raúl enarcó una ceja y se mostró inexpresivo. —Ya estoy involucrado, y muy profundamente. ¡Nos exiliaron! No puedo salir de esto incluso si quisiera.

Jack reprimió un grito de desesperación.

—Está bien, pero prométeme que me dejarás protegerte.

Raúl sonrió y se puso de puntillas para plantar un beso en los labios de Jack.

—Claro, lo prometo.

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Sara había participado en un juicio para convertirse en caballero de la guardia real. Ella tuvo éxito después de mostrar sus habilidades en combate.

Pero ella no vino aquí para golpear a los chicos mientras practicaba. Sara vino por Perxitaa. El Jefe de Guardia había anunciado que todos tomarían turnos, patrullarían el exterior del castillo, el interior y vigilarían a los prisioneros.

El plan era, Momon y Karchez posarían para entregar hierbas a través de la entrada del ala oeste, ya que la prisión estaba cerca. Habrían muchos guardias tanto por dentro como por fuera. Los dos causarían una distracción mientras Sara saca a Perxita.

Cuando finalmente llegó el momento, Sara estaba en esta prisión, paseando entre las celdas. Pronto encontró al dichoso pelirrojo abatido, casi hecho una pulpa, desplomado contra la pared. Sara tuvo escalofríos ante esta vista. Otro guardia patrullaba con ella y, al no poder comunicarse con Perxitaa, mantuvo la boca cerrada.