Un anhelo en mi vida -Wangxian Omegaverse.

Capítulo28

Cuando Jiang Cheng abrió los ojos lo primero que vió fue el tranquilo rostro de Lan Xichen a su lado.

El Alfa soltó un profundo suspiro, al notar como la paz inundaba aquel rostro. Y casi inmediatamente se sintió culpable por llegar y causarle problemas.

Ya tenían suficiente con lo que estaba sucediendo a su alrededor con aquellos chismes, como para sumarle más a la lista de cosas que tenían que resolver.

Jiang Cheng alzó su mano dispuesto a acariciar la mejilla del otro Alfa, pero se detuvo a medio camino.

Tal vez debía irse ahora que tenía oportunidad, ya que Lan Xichen se encontraba dormido.

Anoche había salido a beber, exactamente para olvidarse de todo por un rato, pero no contó con que terminaría en el apartamento del mayor de los Lan.

Y mucho menos durmiendo juntos en la misma cama.

Un escalofrío recorrió su espalda, al pensar en las consecuencias que le esperarían si su madre se enterará de aquello.

Jiang Cheng podía ser un hombre Alfa, pero luego de todos los maltratos, había comenzado a temerle a su propia madre.

Lentamente intentó incorporarse de la cama para no despertar a Lan Xichen. Pero una mano se aferró a su cintura impidiendo que realizará la acción antes de acostarlo nuevamente  a su lado.

-¿Planeabas irte sin siquiera despedirte? -preguntó Lan Xichen con voz ronca por el sueño- Me hace pensar que hice algo mal

Jiang Cheng frunció el ceño comprendiendo, que parecía ser alguien quien luego de una noche apasionada se arrepiente de su cometido y huía.

-Gracias -susurró el Alfa de los Jiang ocultando su rostro en el pecho de su amado, sintiéndose avergonzado- Anoche debí de parecer un idiota

Escuchó el suspiro del Alfa, y luego sintió el suave tacto de una mano sobre su mejilla aún magullada.

-No debes pretender siempre ser fuerte Jiang Cheng -susurró luego de unos minutos en silencio- Al menos no conmigo

Jiang Cheng asintió mientras sentía como los labios de Lan Xichen depositaban un suave beso sobre su frente.

-¿Qué es lo que harás ahora? -escuchó el leve murmuró de su Alfa.

-No lo sé -negó Jiang Cheng mientras se dejaba abrazar por aquellos cálidos brazos que se habían negado a dejarlo ir- No quiero regresar a casa de mis padres

-Quédate aquí todo el tiempo que necesites, quédate conmigo

-Pero...

-Sólo quiero que estén bien y temo que si sales por esa puerta no será así

Jiang Cheng alzó su mirada encontrandose con la contraria, que lo miraba con ternura.

¿Desde cuándo alguien con  carácter como él no podía refutar  lo que aquella persona le estaba pidiendo?

Eso sólo significaba que estaba lo suficientemente enamorado como para bajar la guardia.

-Tengo miedo -confesó Jiang Cheng.

-Lo sé -contestó el Alfa de los Lan- Yo te protegeré, como te dije ayer solo confía en mí

Lan Xichen sonrió levemente antes de depositar un suave beso sobre los labios del Alfa.

Estaba seguro de algo, haría lo fuese para que Jiang Cheng no volviera a dedicarle aquella mirada que estaba en su rostro.

No quería que se sintiera triste o asustado.