Narrador omnisciente
La demostración había sido todo un éxito, todos hablaban de lo increíble que había sido. Ahora todos se encontraban en sus respectivos hogares, pero ahora mismo cierto chico de cabello azabache estaba muy confundido.
—¿Enamorado? ¿Yo?— se cuestionó así mismo el joven, el nunca había experimentado este sentimiento, por ello estaba confundido.
—Así es Hiro, el estar enamorado conlleva una serie de síntomas tales como: sudoración de manos, nerviosismo al estar cerca de esa persona, y una extraña sensación conocida comúnmente como "mariposas en el estómago"— terminó de dar el diagnóstico completo el robot enfermero, Hiro no le prestó mucha atención a lo dicho, ahora en su cabeza sólo rondaba un nombre de cierta chica...
_____
¿Qué voy a hacer ahora?
Esa era la pregunta que rondaba la cabeza del chico asiático, era muy pronto como confesar sus sentimientos hacía la pelicastaña, y aún no estaba del todo seguro de lo que sentía.
-Lo mejor será que espere para aclarar mis sentimientos-
Eso fue lo que pensó el joven de cabello azabache, pero...
Sólo espero que no sea mucho tiempo o será demasiado tarde....
-En otra parte-
Cierta chica de origen polaco y cabellos calabaza se encontraba hablando con _____.
—Sí _____, ¿nos vemos en el café de siempre? Okay está bien, nos vemos linda— musitó la de origen polaco para colgar la llamada, para luego observar a su compañero de habitación, el cuál estaba sentado sobre su cama afinando su guitarra.
El chico de origen mexicano, estaba tan concentrado en lo suyo que no se percató de que la chica lo miraba. Vannia tenía un plan, invitaría a Miguel con ellas al café, pues aunque no lo admitiera; el moreno estaba empezando a sentir algo por _____.
Pero se preguntarán cómo Vannia sabía eso, pues sí bien, el Rivera era muy bueno ocultando sus sentimientos, una vez Vannia lo descubrió escribiendo el nombre de la chica pelicastaña en la parte final de uno de sus cuadernos.
Así que esté era el plan perfecto para que se volvieran a encontrar.
—Miguel, oye ¿te gustaría ir al café conmigo?— preguntó inocentemente la pelirroja.
—¡Claro Vannia!, sirve que me distraigo un poco— dijo con una sonrisa nerviosa el moreno.
—Bueno, vámonos Migue— dijo animadamente la chica, para luego jalar el brazo del muchacho y sacarlo del dormitorio.
—Espera Va— el chico no pudo terminar su diálogo por qué su amiga no lo dejó, y cuando menos pensó, ya se encontraban rumbo al café.
-En el café-
Ya faltaban pocos metros para llegar al establecimiento, Vannia llevaba casi a rastras Miguel. El moreno no entendía porque era tanta la insistencia de la chica por llegar al café.
Hasta que por fin entendió, al llegar al café el de origen mexicano pudo observar a _____.
¿! PORQUÉ HICISTE ESTO VANNIA!?
Eso fue lo único que pasó por la mente del moreno, esto sin duda alguna debía haber sido obra de su amiga, Miguel en estos momentos sólo le rogaba a Dios para que no la regara.
—Vannia— dijiste su nombre para luego abrazarla.
—_____ hermosa— ella correspondió a tú gesto.
—Miguel, ¿cierto?— tu pregunta fue dirijida hacia el moreno, el cuál solo al escuchar su nombre se sobresaltó.
—Así es _____, un gusto en volverte a ver— dijo el Rivera con esa característica sonrisa en su cara, parecía que estaba de lo más normal, pero en realidad en sus adentros estaba hecho un desastre.
—El gusto es todo mío Rivera— dijiste con una pequeña pero visible sonrisa en tu rostro.
Ahora los tres se encontraban sentados en una de las tantas mesas de la cafetería, el lugar era realmente muy acogedor y lindo.
Después de un tiempo una persona fue a tomar su pedido, ahora estaban platicando animadamente.
—Oye Miguel, quería decirte que estuviste increíble en la demostración, de verdad cantas muy hermoso— dijiste para luego dar un sorbo a tu malteada de vainilla. A tal comentario Miguel se sonrojó.
—M-muchas gracias _____— dijo el muchacho con cierto rubor en su mejillas.
Vannia observaba aquella escena con una sonrisa de oreja a oreja, ella sabía claramente que en el moreno estaban empezando a florecer sentimientos hacía tí.
—Por cierto _____, ¿en que aula vas?— te cuestionó Miguel, era obvio que él no sabía.
—Ohh, yo no estudio en la facultad de música, yo estoy estudiando en el Instituto de Sanfransokyo— dijiste con cierta simpleza en tu tono de voz.
—Bueno Miguel, tú ya hablaste mucho ahora sigo yo— dijo la pelirroja, a lo que tú soltaste una risa y el de origen mexicano imitó tú acción.
Y así siguieron hablando de temas triviales, disfrutando la compañía uno de otro, y poco a poco Miguel fue conociendote mejor y tú a él, él era muy simpático y carismático.
Desde ese día algo cambió en Miguel...
En Miguel comenzaron a crecer nuevos sentimientos, de lo cuales aún no se percataba...
Y Hiro aún no quería aceptar lo que ya era obvio...
Ambos tenían algo en común...
Tenían el mismo sentimiento hacía tí...
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Hola mis querid@s lectores
Aquí les dejo otro capítulo, espero y les haya gustado ❤️
No olviden dejar su ⭐ y comentar
Cuidense mucho ❤️
Y sin más
Nos leemos pronto
CassMi
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ᴇꜱᴛᴏ ᴇꜱ ʟᴀ ɢᴜᴇʀʀᴀ┇ᴍɪɢᴜᴇʟ ʀɪᴠᴇʀᴀ x ᴛᴜ/ʜɪʀᴏ ʜᴀᴍᴀᴅᴀ x ᴛᴜ
Fanfiction-Esto es la guerra, Hamada- dijo el moreno con una sonrisa retadora en sus labios. -Así es, Rivera- desde ese día la guerra dió inicio. En la guerra y en el amor TODO se vale y todo es valido... ¿De qué serán capaces los 2 para poder conquistar tú...
