7. Destino: Aeropuerto
Habíamos perdido nuestro objetivo, durante una semana tratamos de acercarnos a Harper, pero era imposible cada que estábamos cerca de ella sus padres se interponían y nos pedían que nos alejáramos porque éramos un grupo raro que podría mal influenciar a su hija, al parecer los cinco somos considerados una negatividad para la vida de los hijos de ciertas personas en este lugar. Así, también el pueblo comenzó a notarnos y alejarse por momentos de nuestro pequeño equipo, algunas veces nos veían como desconocidos siendo un poco bruscos y otras veces nos trataban como siempre, lo cual ya nos esperábamos.
La única vez que pudimos estar los suficientemente cerca fue un viernes donde en un trozo de papel que le entregamos estaba la dirección de mi casa, más una nota que decía que si notaba cosas extrañas como que de la nada pareciera que se encontraba en otro lugar y nadie más lo notaba o si sus padres actuaban como si siempre estuvieron en Ocean City toda su vida, se acercara a nosotros porque podríamos ayudarla o al menos tratar. Esa noche la esperamos al igual que los días siguientes, pero no vino. Al caminar por el pueblo ni siquiera nos miraba para el lunes nos rendimos pensando que tal vez ella no era diferente que posiblemente es parte de este pueblo y debíamos seguir con nuestro propósito: obtener respuestas.
Hoy era martes y mañana llegaría la última familia, no sabíamos que esperar y seguíamos sin respuestas pero habíamos notado un par de cosas en nuestro intento de querer salir de aquí, a diferencia del puerto que siempre se encontraba lleno de gente porque en este todas las mañanas los pescadores iban a hacer su trabajo para regresar por las tardes con sus cargas para vender en el supermercado o llevar una porción a sus casas o incluso aquellos que solo eran aficionados y pescaban con cañas mientras charlaban con otros pescadores, el aeropuerto siempre estaba vacío, éramos totalmente conscientes de que nadie salía de este pueblo a más de ciertos empresarios y el alcalde el cual había viajado el sábado por la tarde y llegaría en la madrugada del miércoles, es decir esta noche y en el afán de encontrar respuestas ideamos un plan para acercarnos a este lugar.
Para llegar al aeropuerto había dos formas: el camino que todo el pueblo conocía y estaba iluminado con una carretera, no era nuestra opción y el camino del bosque que estaba oscuro y podría tener muchos insectos, este es el que usaríamos. Por la mañana compramos dos linternas para cada uno y suficientes baterías, dos cuerdas, repelentes, bolsas impermeables, sacos para dormir y dos mochilas para los gemelos porque Harry, Sabrina y yo ya las teníamos desde aquella noche en la playa, necesitábamos estar preparados. Luego de obtener los suministros fuimos a mi casa, específicamente a mi habitación para armar y repartir las cosas necesarias para cada uno.
Mientras Alessandro y Adriano se sentaban en la alfombra nosotros tres sacábamos nuestras mochilas de debajo de mi cama, estas eran iguales a las que compramos, pero tenían un poco de tierra y hojas, nada importante. Hicimos un círculo a nuestras provisiones y las dividimos, ubicando todo de la manera correcta, las linternas en los bolcillos laterales junto con los repelentes para tener un fácil acceso, sobre estas la cuerda sujeta en el gancho externo, la bolsa para dormir parada al lado derecho en el interior de la mochila y las bolsas impermeables del lado contrario y en el lugar del centro iría la comida para el camino de ida, el tiempo de espera y el camino de regreso.
Para las once de la noche ya estábamos listos, todos habían ido a sus casas para descansar un par de horas, bañarse y vestirse con ropa negra sin joyas o cualquier cosa que refleje con la luz o brille que si algo salía mal pudiéramos ser parte de la oscuridad de la noche y escapar sin ser vistos. Treinta minutos después de que todos llegaran y guardáramos la comida que habíamos preparado por la mañana, salimos por la puerta de atrás que estaba frente a una pequeña arbolada que conecta con la plaza y a su vez esta se encuentra junto al bosque, por lo cual caminos entre los arboles uno de tras del otro hasta llegar a la plaza, el orden en el que íbamos era Harry al inicio, seguido de Brina, luego Adriano y por último Alessandro y yo.
Al mirar a nuestro alrededor solo había pocas luces de algunas casas cerca de donde nos encontrábamos, no había personas rondando o caminando por ningún lugar lo cual era normal porque era de madrugada y era día de semana a diferencia de los fines de semana que todo estaba lleno de adolescentes, música y alcohol. Nos dispusimos a caminar el tramo restante que nos faltaba para llegar al bosque, desde que salimos de mi casa estábamos en silencio no nos queríamos arriesgar a ser atrapados tampoco usamos las linternas porque en esta parte aún había la suficiente claridad para no necesitarlas. Al llegar al inicio del bosque podíamos escuchar el viento moviendo las hojas de los árboles y el chirrido de los grillos también se podían observar varias luciérnagas planeando en el aire.
Continuamos y ya estando unos cinco metros dentro del bosque encendimos las linternas dado que ya era imposible seguir sin ellas, inspeccionando el lugar encontramos varios gusanos arrastrándose entre el lodo y hojas del suelo, en algunos árboles vimos nidos de algunos pájaros y búhos totalmente despiertos para cazar. De un momento a otro escuchamos pasos y no éramos nosotros porque estábamos totalmente quietos, nuestro primer movimiento por instinto fue apagar las linternas, cuando de la nada los pasos se detienen poniéndonos alerta no podíamos distinguir nada a nuestro alrededor porque todo era oscuridad y más oscuridad.
⸺Hola ⸺dice una voz de repente mientras la luz de una linterna nos alumbra tomándonos por sorpresa como era de esperarse nuestra reacción fue gritar al mismo tiempo que encendíamos nuestras linternas para apuntar a la persona que salió de la nada. El grito en conjunto fue tan fuerte que varios de los pájaros que había visto junto a algunos búhos, salieron volando del lugar del susto que les dimos como una auténtica película de terror.
¡Holaaaa!
He vuelto con otro capítulo, de ahora en adelante trataré de que estos sean de al menos de mil palabras cada uno. Espero disfruten de esta lectura.
¿Quién creen que es la persona que llegó?
¿Creen que encontrarán algo en el aeropuerto?
Hasta luego visitantes.
Dani.
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Ocean City
Bilim KurguHe vivido toda mi vida en este pueblo perdido en el mapa. La única manera de llegar es por avión o barcos porque está rodeado de un espeso bosque que no permite rutas de carretera, pero nunca han venido personas nuevas, es como si se hubieran olvida...