CUÁNDO, DÓNDE Y CÓMO EL AMOR QUIERA | Chaelisa

Capítulo 28: Las dueñas

Esta es solo una adaptación, todos los créditos a su autora Alllove.

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Estudio de Rosé — Lunes a la tarde

—¿Se puede saber donde vas tan apurada? —apenas Jisoo llegaba al trabajo de su amiga se topaba con Rosé que al parecer iba de salida— No me digas que estás escapando del bomboncito de nuevo... ¿Acaso te persiguió hasta acá? ¿Quieres que te de una mano? Porque por más insaciable que sea no creo que pueda con dos ex cheerios juntas —la pelinegra ya tenía los colmillos puestos.

Rosé se frenó de golpe al mismo tiempo que giraba los ojos ante lo que estaba diciendo su amiga.

—Primero que jamás compartiría a Lisa, segundo no se te ocurra desafiarla porque te aseguró que pierdes otra apuesta y tercero no, no estoy escapando de ella, es sólo que me llamó Beth que necesita verme urgente en el bar de Dahyun —le comunicó a su amiga y empezó a caminar hacia la salida de vuelta.

—Para un poco idiota, y déjame ir contigo que necesito que hablemos de los contratos de Victoria Secret, o acaso te olvidas que necesito tenerlos listos antes de la primera sesión del sábado —le advirtió.

—Pues apúrate entonces pelinegra idiota, lo hablamos en el auto —la rubia quería llegar al bar lo antes posible. Estaba preocupada, Lisa nunca deja sola a su hija.

Bar de Dahyun

Las dos amigas caminaban las dos cuadras que separaban el estacionamiento del bar.

—¿Entonces le cumplimos a Joy todos sus caprichos? —Preguntaba la abogada repasando los últimos retoques de los contratos.

—Si Jisoo. La conozco. Está buscando que yo reaccione, y si hay algo que no pienso hacer es pelear con ella —Rosé sabía que su ex no iba a resultar fácil de manejar.

—Espera a que se entere que te estás comiendo al bomboncito —decía sonriendo la pelinegra— Aunque ya lo debe saber, los rumores están por todas partes —ella misma había visto que varias revistan ya especulaban sobre el romance de la jugadora estrella y la fotógrafa— A propósito ¿Cuándo piensan anunciarlo? —preguntó curiosa.

—No lo sé... No hemos tenido mucho tiempo de hablar —sonrió Rosé pícaramente— Esta semana va a ser imposible —la sonrisa se le caía— Lisa se va esta noche y probablemente vuelva el sábado...

—El sábado tú tienes la...

—Si, si lo sé Jisoo... La sesión de Victoria Secret —la rubia sabía que era algo importante para su carrera— Es solo que casi una semana sin mi novia... Uff... Va a ser terrible —Rosé no quería admitir que iba a ser un gran reto para ella pasar ese tiempo sin Lisa, si era posible la quería todo el tiempo al lado de ella.

—¡Dios mio! Porque me haces esto señor... —Jisoo dijo con su cabeza a la puerta del bar donde se encontró Lisa apoyada en la pared usando unos jeans rotos en las rodillas, una remera negra y lentes de sol— Oye tú —llamó la atención de la deportista que no se había dado cuenta de la presencia de las otras dos— ¿Acaso no sabes que los bombones se derriten en el sol? —Le preguntó usando un tono no más de reproche que de seducción.

Cuando Lisa se percató de quienes venían hacía ella sus ojos tenían un solo destino... Rosé.

—Espero que no, sino no voy a poder llevar nunca a mi novia a la playa... Hola Jisoo... ¿Puedes cerrar los ojos diez segundos? —pidió amablemente a la pelinegra.

—Esta bien Manoban, pero si me vas a tocar te aviso que no respondo de mi —bromeó.

—¡Jisoo! —Rosé la retó, Lisa no iba a tocar a nadie. Solo a ella.