𝑨𝒈𝒓𝒊𝒅𝒖𝒍𝒄𝒆 -𝑩𝒂𝒌𝒖𝒈𝒐 𝑲𝒂𝒕𝒔𝒖𝒌𝒊 𝒙 𝑹𝒆𝒂𝒅𝒆𝒓

67.

Un día antes de Noche buena, la carretera quedo cubierta de nieve y hielo haciéndome imposible llagar a mi pueblo y pasar las fiestas con mi familia. ¿Cómo estaba? Destrozada. ¿Cómo vivo actualmente por el estrés? Con dos horas de sueño y cero ganas de vivir, pero aquí andamos al cien.

No podre ir mamá- dije para el otro lado de la línea- Las carreteras están cerradas y aunque lleve a Shoto al frente derritiendo el hielo dudo que me dejen pasar y dudo que Kirishima-kun me deje hacerlo. - mi mama solo se quejo conmigo por no tener mente de tiburón, pero al final lo termino aceptando. - Feliz navidad mamá, dile a papa que también lo extraño.

Al terminar la llamada solo me quede viendo mi sala, todo estaba desordenado, el sofá se veía mas calientito que cualquier parte de la casa con esa cobija de tigres que mi mama me había dado; en fin, me resigne a comer pollo frito o lo que sea que encuentre con servicio a domicilio, todo iba bien, me acababa de acomodar en el sillón y taparme solo para sacar mi cara cuando sonó el timbre. ¿Quién rayos me quiere visitar? No limpie, ¿Es necesario que lo haga? Tengo la misma ropa que ayer por no querer levantarme, ver anime y alimentarme de sopas instantáneas. Pero, en fin, tome el paraguas que estaba al lado de la puerta, uno nunca sabe si te quieren robar, yo no caeré en eso. Al momento de abrir la puerta seguramente quede como una loca al amenazar con el paraguas.

¿En serio no te bañas? - pregunto Bakugo que estaba frente a mi, obviamente solo solté el paraguas y me le tiré encima. - Te dije que regresaría.

Tonto. - dije enterrando más mi cara en su cuello- No me dijiste que vendrías.

Era una sorpresa- contestó el cenizo abrazándome con un brazo y arrastrando su maleta con la otra para entrar al departamento y cierra la puerta. - Te extrañé.

Te extrañé más- dije casi inaudible debido a las lágrimas que dejaba caer.

Deja de llorar- dijo el chico para separarme un poco y bajarme de el- Ya estoy aquí.

Esqueyoteamomucho- dije para empezar a llorar de nuevo mientras me aferraba al chico.

Te amo más, niña tonta- contesto el oji rubí mientras acariciaba mi cabello.

Dado un tiempo, dejando de llorar, Bakugo tomo un baño para después obligarme a bañarme, lo amo, pero sabe que no debió hacer eso.

No me gusta bañarme- dije saliendo del baño y tirarme sobre el chico. - No debiste de hacerlo.

Lo hice porque te urgía- contesto el cenizo para que le diera un golpe en el hombro. - Mañana saldremos.

¿Con este frio? - pregunte acurrucándome al lado del oji rubí. - Quedémonos a mimir y te doy cariñitos.

Eso lo harás hoy- contestó Bakugo para darme un beso- Te extrañe de todas las formas posibles.

Eres un pervertido- dije para volver a besarlo y darle una sonrisa.

Uno al que amas- contestó abrazándome y subiéndose en mi- Espero no haber perdido la práctica.

[...]

No te lo mostré ayer- dijo Bakugo sacando un vestido de la maleta- Es para ti.

Bakugo no era necesario- dije al ver que el vestido estaba demasiado hermoso. - Gracias.

No, hoy lo usaras- dijo el cenizo tomándome de la cintura- Festejaremos Noche buena y Navidad juntos, Teddy bear.

Me gusta mas ese apodo- dije dándole un beso en su mejilla. - Me bañare solo por eso.