𝑨𝒈𝒓𝒊𝒅𝒖𝒍𝒄𝒆 -𝑩𝒂𝒌𝒖𝒈𝒐 𝑲𝒂𝒕𝒔𝒖𝒌𝒊 𝒙 𝑹𝒆𝒂𝒅𝒆𝒓

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Dilo de nuevo. - ordenó el cenizo mientras su novia montandolo.

N-no. - murmuró la chica mientras aún era embestida por el chico. - Solo házlo. - dijo entre suspiros.

Dime qué quieres. - insistió el ojo rubí mientras ahora pasaba una mano por su cuello mientras ejercía una diminuta presión. - Sé que te gusta.

Más rápido. - alcanzo a pedir la chica aún entre más jadeos.

Cómo mi princesa diga. - contesto el chico para aumentar su velocidad, ambos soltaban gemidos y el cuarto estaba tomando más temperatura.

Y dirán, ¿Contexto? Bakugo vio a su novia saliendo del baño, solo una toalla la cubría y no pudo resistirse, posiblemente eso demoré los planes de la chica, pero mentiría si dijera que no le gustaba más esto. Llevaban tiempo haciéndolo, y era casi el segundo orgasmo que alcanzaban, claro que a Katsuki no le bastaba con escuchar a su mujer pidiendo más solo una vez.

Estoy...ya casi~ - soltó la chica subiendo el ritmo moviendo aún más sus caderas.

Te ves hermosa. - hablo Bakugo con una voz un tanto gruesa para que alcanzará los labios de la chica para así poder alcanzar su punto dulce y retener los gemidos de ambos.

Al terminar y recuperar un poco de su respiración _____ bajo del contrario para tomar su lugar en la cama haciendo que él la tomara en brazos.

Te amo. - murmuró el chico mientras besaba su frente.

Te amo aún más. - contesto la chica con una sonrisa.

Es domingo. - se quejo para apretarme más fuerte. - ¿No podemos quedarnos así?

Le prometí a las chicas que saldríamos al museo. - contestó para girarse a el. - Por favor.

Págame. - habló señalando sus labios, claramente la chica amaba molestarlo y le dió una en la comisura de sus labios. - Esos no son besos. - se quejo para tomar sus mejillas y besarla de una manera tierna. - Ve antes de que vuelva a tomarte.

¡Hey! - regaño la castaña para levantarse con las sábanas enrolladas. - ¡Te quedarás en abstinencia, ¿Oíste?!

No me refería a eso. - contesto el chico para levantarse de igual forma que su novia y abrazarla por la espalda. - Pero de igual manera, si quieres puedo hacerlo. - murmuró cerca de su lóbulo para después besar su hombro.

Bakugo. - regaño la chica para abrir su closet y ver qué podía usar.  - Me cambiaré, ve al baño.

Te acabo de ver así. - refunfuño el cenizo alejándose y recogiendo su pijama para salir de la habitación.

Tonto. - murmuró la de ojos café para volver a lo suyo.

[...]

Ya era costumbre que _____ llegará tarde, realmente siempre era así.

¡Ya llegué! - grito la chica moviendo su mano derecha en el aire llamando la atención de sus amigas. - Lamento la tardanza.

Quince minutos. - murmuró Jiro con celular en mano. - Al menos no fue una hora.

Esa vez se quedó dormida. - agregó Tsuyu.

Fue una vez, déjenla. - dijo Mina para tomar mi brazo y entrar al museo. - Solo una vez Yaomomo nos invitará.

Yaomomo nos quiere y por eso debemos de comportarnos, entendido. - dijo Ochaco para tomar mi otro brazo.

Es muy elegante. - murmuro Jiro. - ¿Qué veremos?