CAPÍTULO 13

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Hechicero:

Un círculo de tarenses sabios muy cercanos a Ada bendecidos con el poder de la manipulación de la magia por la Uidhe. Sólo quedan de ellos los pocos que sobrevivieron a la Gran Guerra y al transcurso de los milenios, junto con algún descendiente posterior a la llegada a nuestra dimensión.

Puntos fuertes: Inmortalidad y una gran inteligencia, puesto que se les concedió el don por su gran sabiduría y su falta de fuerza física.

Puntos débiles: Físicamente no tienen ninguna ventaja sobre los humanos, mucho menos sobre las demás criaturas.

Características especiales: Runas azules como las de la Uidhe (por transferencia de parte de los poderes de la diosa) salpicadas por la piel. Éstas se iluminan con la utilización de la magia.

***


Llegué a la habitación de Alec.

Allí estaba él, tumbado en la cama con un libro antiguo abierto sobre su pecho. Estaba distinto: su piel había adquirido un tono cetrino y sus ojos habían sido rodeados por unos semicírculos violetas. Parecía como si no hubiese dormido durante días.

<<No tiene sentido. Estaba perfectamente en el bosque. Sólo nos hemos separado durante unas horas. ¿Qué ha pasado? >>

― ¿Alec? ―Me acerqué y me senté en el borde de la cama junto a él.

Sus párpados se levantaron ligeramente, pesados, y me miró en silencio. Carecía de su usual brillo, parecían febriles.

Le acaricié la frente midiendo su temperatura con mis dedos. Su calor había desaparecido.

―Estás muy frío. ¿Qué ocurre?

―No me encuentro bien. He buscado en los libros pero no he encontrado nada. La directora dice que no me han hecho ningún maleficio, y Rose que no estoy enfermo. No me saben decir qué es.

Acomodó su cabeza para que mi mano cayera sobre sus pómulos y acomodó su cara con una pequeña sonrisa.

―Pero ahora que estás aquí me encuentro mejor...

Sonreí ante su ingenuidad y cogí el libro. Era una enciclopedia sobre las criaturas de la noche. En la página que se había quedado abierto había información sobre los vampiros y sus características.

― ¿Crees que es algo relacionado con ser dhampir?

―No lo sé. ―Susurró sin abrir los ojos.

Era lógico que se lo planteara. El ser Uidhe causaba un sinfín de cambios en mi cuerpo que eran inevitables, y él tenía relación con ello por ser quien era.

<<A lo mejor él también debe pasar por algo parecido. Ojalá hubiera algo escrito en los libros que lo explicara... >>

Cerré el tomo y lo dejé sobre su mesita de noche.

― ¿Y no es del veneno de arpía?

―Rose ya me dio el antídoto y funcionó.

No tenía más posibles respuestas.

El aire se enfrió a nuestro alrededor y reuní toda la paciencia que tuve en anticipación.

―Tienes una pinta espantosa, Alec. ―Dijo una voz masculina con un tono divertido.

Dirigí la mirada hacia el pie de la cama.

Era Dean, otra vez. Esta vez tenía unos vaqueros oscuros, una camisa blanca con los primeros botones desabrochados y el pelo desaliñado hacia delante.

Al Anochecer: La diosa y el mestizoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora