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-Buen día. Necesito que describa mi apariencia física- le dijo Lora a una mujer que estaba sentada. La mujer la examinó de pies a cabeza antes de sonreír de manera amable.

-Creo que mides uno cincuenta y cinco. Tu cabello es rubio y lo tienes amarrado en una coleta. También llevas una bonita bolsa de color rosa. Además de que tu ropa blanca es algo destapada, en mis tiempos las mujeres no íbamos mostrando tanta piel- dijo la mujer. La descripción era completamente errónea. Lora medía como uno sesenta y cinco, además de que vestía un pantalón de pants negro junto a un top del mismo color.

-Yo puedo vestir como quiera. Además de que me olvidará en este instante así que no tiene caso- dijo Lora sonriendo con sarcasmo. La mujer bajó la mirada y la canadiense se enfocó en Aylara.

-Así que practicaré el engaño y manipulación al mismo tiempo- dijo Aylara mientras caminaban alejándose de la mujer.

-Exacto, ocuparás la imagen que te mostré. El método es el siguiente, pasarás unos minutos viendo la imagen modificada de ti en el espejo hasta que te convenzas a ti misma que esa es tu apariencia, cuando lo hagas irás a que alguien describa tu apariencia. Si lo consigues con tres personas seguidas intentaremos que engañes a dos al mismo tiempo- le explicó Lora. Aylara asintió y tomó el espejo. Trató de memorizar cada rasgo del rostro que Lora le estaba mostrando. Movió los ojos, hizo algunas muecas y giró el espejo. Era algo muy extraño, durante toda su vida había memorizado su rostro, se había visto al espejo todos los días antes de salir a la calle, pero ahora tenía a una desconocida por reflejo.

- ¿De dónde sacas la idea para un rostro? - preguntó Aylara mientras se tocaba las mejillas. Hasta sus manos eran distintas.

-Combino personas que veo en la calle, gente de libros históricos o sencillamente creo una persona en mi mente- explicó Lora mientras seguía con su caminata lenta. Aylara notó que la canadiense odiaba quedarse quieta y casi siempre estaba en movimiento.

- ¿Como hiciste a Rachel? - preguntó Aylara. Quería ver a su reflejo hablar para hacerse a la idea que era distinto pero que a la vez era ella.

-Combinación de una chica que vi en una revista y un personaje que leí alguna vez. Aunque hice al menos otras siete chicas para el plan boomerang. Puedes hacer cuantas apariencias quieras y ponerles cuantos nombres quieras mientras no uses nada relacionado con el grupo, ni siquiera combinaciones- dijo Lora.

-Anotado, no usar tu rostro o el de cualquiera de nuestro grupo- dijo Aylara.

Finalmente se sentía un poco acostumbrada a su falso reflejo. Le dio el espejo a Lora quien lo guardó en su mochila y caminaron. Aylara se acercó hasta una chica que parecía más o menos de su edad y le tocó suavemente el hombro.

- ¿Podrías describir mi apariencia por favor? - preguntó Aylara. La chica la miró un poco hasta frenar en su muñeca.

-No llevas pulsera de identidad, eso más el hecho de que pareces ser latina quiere decir que eres una indocumentada- dijo la chica algo incómoda. Aylara suspiró y Lora llegó para borrarle la memoria a la chica. Ambas caminaron mientras la mexicana iba cabizbaja.

-No pude, aún no sé cómo engañar y verme a mí misma no me ayuda- dijo decaída. Lora miró alrededor enfocándose en varias personas a la vez.

-Es arriesgado seguir así, vamos a la base y ahí intentaremos otra cosa- dijo Lora. Comenzaron a caminar de regreso a la base, Aylara iba algo decaída. En dos semanas sería su primera misión y no podía engañar a las personas. Sería un peso muerto.

Cuando llegaron a la base Lora le indicó a Aylara que se quedara en la sala. La mexicana esperó sentada mientras Lora subía a su habitación. Bajó minutos después con un cuaderno y un lápiz.

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