Intermedio (Atsumu Miya y tú)

Capítulo 46: Volver al juego.

Horiyama se alejó del beso y rápidamente retrocedió, tomo su celular y al prender la lámpara no podía creer lo que sus ojos veían.

_____: ¿Qué haces aquí? –Su cara se puso se enrojeció por completo agradeció a la obscuridad que no dejara ver ese tono en ella por completo- ¿Qué significa ese beso?

Bokuto: Sé que pronto me iré lejos, pero ya no puedo seguir perdiendo oportunidades, ya no puedo seguir diciéndote adiós una y otra vez –Comenzó a acercarse de nuevo a los labios de la castaña, pero esta retrocedió más quedándose en la pared-

_____: Dentro de poco nuestras vidas cambiaran mucho Bokuto, las relaciones solo arruinan a las personas... lo aprendí de ti.

Bokuto: Ya te lo he dicho, tenía miedo de enamorarme de ti estando tan lejos, pero no más, haré todo, pero por favor... -Su mirada era casi suplicante- Vuelve a enamorarte de mí, solo una vez más... ¿Te dije que enfrentaría mis miedos no?

_____: No sé si yo estoy lista para esto...

Nuevamente se abalanzo a la castaña, esta vez tomo su cintura con una mano y con la otra la de la parte de atrás de su cuello su espalda se encontraba en la pared lo que no le daba salida del beso.

Los besos de Bokuto eran bastante apasionados y se mostraba bastante dominante, cosa que le pareció sorprendente, ya que siempre le había parecido un chico tierno y relajado.

Bokuto: Estas demasiado sonrojada, te ves tan hermosa –Su cara bajo a la altura del cuello de la castaña dejando muchos besos bajando desde sus clavículas y volviendo a subir a la orilla de sus orejas-

_____: Bokuto-san ya no sigas ya para –Su respiración era entre cortada- No quiero que nuestra amistad quede arruinada.

El platinado se separó un poco de la castaña y se reincorporó para mirarla a los ojos, alzo su mano con su dedo meñique y recitó una promesa.

Bokuto: Prometo que no importa lo que pase con nosotros en el futuro, siempre seremos amigos –Junto su dedo con el de la castaña- no importa cuánto me dañes el corazón solo déjame intentarlo.

_____: No quiero hacerte daño, es por eso que no quiero intentarlo, yo... aún sigo queriendo a alguien más.

Bokuto: Entiendo que no es algo que puedas superar de un día a otro -Acaricio un mechón suelto del cabello de la castaña- pero si no lo intentas nunca lo sabrás.

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El platinado nuevamente la beso, esta vez al juntar sus labios la castaña correspondió, dejándose llevar por el momento. La temperatura comenzaba a subir entre aquel obscuro lugar, Bokuto era quien tenía la iniciativa al recorrer con su mano lentamente la piel de su espalda por debajo de su blusa de trabajo.

Bokuto: Siempre soñé con un memento así contigo, no importa que quieres que sea en tu vida –Continúo besando el lóbulo de su oreja mientras le susurraba- Disfrutemos del momento.

El juego acababa de comenzar, esta vez era Bokuto el jugador, Horiyama se sintió atrapada en un círculo vicioso donde a todos los chicos de los que se enamoró les gustaba jugar a los no compromisos en el principio, pero esta vez no volvería a caer como con Atsumu, no lo apostaría todo. No se volvería a enamorar.

Solo gozaría de los beneficios que le daba la libertad de ese momento, Bokuto se deshizo de su camisa, dejando una buena vista a la poca luz que apenas se mostraba, la castaña no pudo evitarlo así que comenzó a tocar la gran espalda de Bokuto y repartir uno que otro beso entre su pecho y clavícula.

Bokuto: Déjame verte, por favor... yo también quiero hacerlo.

Nuevamente sus caras quedaron frente a frente, ambos estaban bastantes sonrojados por el calor del momento, Bokuto comenzó a subir la blusa de la castaña solo dejándola en sostén, el platinado comenzó a jugar con los tirantes y bajando a sus pechos, en un movimiento rápido también le quito los pantalones dejándola únicamente en ropa interior.

Ahora era el platinado quien tenía el control de las cosas, la tomo en brazos y la cargo apretando su trasero, mientras ella enrollaba sus piernas sobre su cadera, involuntariamente comenzó a hacer movimientos de arriba abajo para que ambos cuerpos se rozaran sobre sus ropas, calentándolos cada vez más.

______: Bokuto –Pequeños jadeos salían de su boca con cada roce- Déjame desabrocharte los pantalones.

La de ojos azules se soltó del agarre de Bokuto, era más pequeña que él así que cuando se incorporó en el piso se arrodillo para desabrochar el pantalón del chico y bajarlo, cuando ambos se quedaron solo en ropa interior el chico nuevamente la detuvo y la miro a los ojos.

El chico desabrocho el sostén de la castaña liberando sus pechos, la acostó en el piso y con una mano tomo ambas manos de la castaña arriba de su cabeza, con la otra mano masajeaba uno de sus pechos y con su boca succionaba una y otra vez provocando espasmos en la castaña.

Después de un rato soltó sus manos y comenzó a darle besos bajando desde sus pechos gasta su abdomen, tocando los muslos de la castaña por debajo de lo que le quedaba de ropa interior.

Bokuto: Siempre te he querido ______.

Sus ojos estaban atentos a cada parte del cuerpo de la castaña cosa que la hizo sonrojar, con una de sus manos comenzó a hacer círculos con su pulgar entre su zona sensible haciéndole querer un poco más de su parte.

El platinado procedió a ponerse la protección ''ya estaba todo planeado'' pensó la castaña, el chico se posiciono entre sus piernas dejando acceso a su miembro que ahora estaba dentro de ella.

El lugar se llenó de jadeos y de sonidos de ambos, cada vez las estocadas eran más fuertes y, más rápidas las piernas de la joven se apretaron más a su cuerpo para que la entrada fuera más profunda, por el placer la castaña comenzó a arañar su espalda dejando marcas significativas en este.

Después de durar un buen rato de esa forma, la castaña se sentó arriba de él saltando y sintiéndolo una y otra vez, al final los dos terminaron sudados y exhaustos cayendo la castaña sobre su pecho mojado.

_____: Bokuto... no sé qué decir después de esto –Su respiración era agitada y su voz estaba entre cortada-

Bokuto: Ese imbécil no te merece... él jamás te tocaría así ______. –Su tono de voz era rasposo y grueso-

_____: No quiero hablar de él Bokuto-san –Escondió su mirada en el cuello del platinado-

Bokuto: Al menos después de tanto tiempo pudiste responder a mi pregunta –Sonrió victorioso-

_____: ¿De qué pregunta hablas?

Bokuto: Del día en que me entere que eras novia de Miya, te pregunte si eras mía... y no me respondiste, pero, ahora por fin lo eres, al fin eres mía. 

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Rayita Fuckgirl:p tenia tanto tiempo queriendo escribir este capitulo de verdad 7.7